Portada » Biología » El asombroso viaje de la sangre: Explorando el sistema circulatorio
La sangre desoxigenada (con CO2) entra por las venas cavas superior e inferior a la aurícula derecha. Mediante la válvula tricúspide, pasa al ventrículo derecho y luego, a través de la válvula pulmonar, a la arteria pulmonar para llegar a los pulmones. Las arterias son los vasos sanguíneos que llevan la sangre desde el corazón a todas las partes del cuerpo, en este caso, los pulmones. Una vez en los pulmones, la sangre desoxigenada se intercambia por sangre oxigenada (con O2) y regresa al corazón por las venas pulmonares. Las venas son las que llevan la sangre desde los pulmones u otras partes del cuerpo hacia el corazón. La sangre oxigenada pasa por la vena pulmonar a la aurícula izquierda, luego al ventrículo izquierdo, atraviesa la válvula mitral y la válvula aórtica, y finalmente llega a la aorta para ser distribuida al resto del cuerpo.
Transporta alimentos, absorbe nutrientes, expulsa sustancias de desecho y distribuye oxígeno, CO2 y otras sustancias de desecho procedentes de las células.
Líquido rojo opaco que toma oxígeno del aparato respiratorio y nutrientes del digestivo, distribuyéndolos por todo el cuerpo. Recoge los desechos y los lleva a los riñones para su expulsión a través de la orina. En nuestro organismo tenemos 5 litros de sangre, compuesta por células sanguíneas y plasma.
Formado por un 90% de agua y un 10% de sustancias disueltas (proteínas, hormonas, etc.), se encarga de transportar los productos residuales a los riñones.
Motor de la circulación sanguínea, es un órgano musculoso hueco del tamaño de un puño, situado entre los pulmones.
Tiene cuatro cavidades: dos aurículas y dos ventrículos.
Sus válvulas permiten la comunicación entre aurículas y ventrículos e impiden el retroceso de la sangre.
Comienza en el ventrículo derecho. La sangre atraviesa la válvula pulmonar, pasa a la arteria pulmonar y llega a los pulmones para recoger oxígeno. Regresa al corazón por las venas pulmonares, entra en la aurícula izquierda, atraviesa la válvula mitral y pasa al ventrículo izquierdo.
Comienza en el ventrículo izquierdo. La sangre atraviesa la válvula aórtica, pasa a la arteria aorta y se distribuye por todo el cuerpo para recoger CO2. Regresa al corazón por las venas cavas, entra en la aurícula derecha y, a través de la válvula tricúspide, pasa al ventrículo derecho.
Sistema de retorno paralelo al venoso y componente principal del sistema inmunitario. Se considera un sistema de limpieza formado por linfa, vasos linfáticos y ganglios linfáticos.
El sistema linfático participa en la respuesta inmunológica y en la resistencia a enfermedades.
El líquido que se filtra durante la circulación pasa por los ganglios linfáticos para eliminar bacterias, células anormales, etc. Este líquido regresa al torrente sanguíneo a través de los vasos linfáticos.
Líquido claro, amarillento, de aspecto lechoso y composición similar al plasma sanguíneo. Contiene proteínas de gran tamaño y grasas absorbidas en el intestino. Está compuesta por glóbulos blancos y células que atacan a las bacterias en la sangre. Se origina a partir del líquido intersticial de los tejidos y es recogida por los capilares linfáticos, que la drenan hacia vasos más gruesos.
Tubos delgados que transportan la linfa. Poseen válvulas para impedir su retroceso. Se clasifican en capilares linfáticos y venas linfáticas.
Abultamientos de tamaño variable distribuidos a lo largo de los vasos linfáticos. Actúan como filtros de la linfa, ayudando a combatir gérmenes, infecciones y sustancias extrañas.