Portada » Magisterio » Diseño del modelo de focalización
Describimos al modelo racionalista como aquel que formula las políticas públicas en función de un conjunto de técnicas que le ayuden a encontrar la mejor decisión. Por otro lado, el modelo incremental elabora las políticas tomando en cuenta aquellas alternativas que difieren muy poco de las políticas que ya se llevan a cabo, y analiza sólo los aspectos en que la opción nueva y sus consecuencias difieren de la situación actual.
Modelo racional |
Modelo incremental |
Establecer los objetivos, ordenándolos según su grado de importancia. |
Establece los objetivos a cumplir con la política. |
Elabora distintas alternativas posibles para lograr los objetivos. No se tienen en cuenta sólo las conocidas sino que se inventan y se generan alternativas nuevas. |
Las alternativas posibles que se tienen en cuenta para lograr los objetivos son aquellas que ya se llevan a cabo, que ya se conoce sus consecuencias e impactos. |
Se valoran las consecuencias que puede traer cada alternativa: |
Se elige la alternativa que sea más viable políticamente. |
Compara las alternativas ordenándolas de la más deseable a la menos. |
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Se elige la mejor opción. |
El cuadro realizado muestra los 5 pasos establecidos por Hebert Simón para un modelo racionalista. El modelo racional no consta de pasos formalizados sino que fueron establecidos a modo de comparación con el primer modelo.
Podemos observar que en el segundo modelo la política determina las políticas públicas, es decir, las políticas se elaboran con el interés de ejercer control, influencia o poder sobre otros. Lo positivo de este modelo es que al elegir alternativas ya existentes o aplicadas anteriormente se reducen las posibilidades de error y fracaso y se puede prever el comportamiento de los individuos y de los grupos con intereses en el problema y su solución.
En cambio, en el primer modelo, el análisis técnico y detallado es el que define a las políticas. Hay un mayor grado de incertidumbre sobre sus consecuencias pero da lugar a nuevas formas de atender el problema en cuestión.
El autor define 9 tipos de evaluación de las alternativas, las cuales se pueden relacionar por sus objetivos con alguna de las 4 fases del proceso de la política pública.
Se relaciona con la fase de identificación y definición del problema, y la fase de formulación y adopción de una alternativa. Se encarga de recolectar información del contexto político, administrativo, legal, social y económico en el que se va a desarrollar el problema para alimentar el proceso de su definición y la formulación de alternativas.
Se relaciona con la fase de definición e identificación del problema dado que trata de delimitar los límites y carácterísticas esenciales del problema y las posibles conexiones con otros problemas no considerados explícitamente. Su objetivo es conocer en profundidad el problema que la política pretende eliminar o aminorar.
Se relaciona con la fase de formulación y adopción de una alternativa, ya querealiza un primer análisis de la política, para verificar si se puede llevar a cabo o si su diseño consta de fallas y hay que reformularlo.
Se relaciona con la fase de formulación y adopción de una alternativa dado que su objetivo es determinar si el diseño de la política permite lograr las metas y objetivos deseados.
Se relaciona con la fase de formulación y adopción de una alternativa debido a que su objetivo es producir información para afrontar las amenazas y aprovechar las oportunidades presentes en el entorno específico en el que se desarrolla la política pública. Por lo que sirve como información para elaborar una alternativa.
Se relaciona con la fase de la implantación de la alternativa adoptada, donde su objetivo es determinar el grado de cumplimiento de los mandatos incluidos en la política, comparando el diseño inicial de la intervención con el funcionamiento real de la misma.
Se relaciona con la implantación de la alternativa adoptada, ya que su objetivo es detectar posibles variaciones en la naturaleza del problema y las eventuales desviaciones respecto del plan inicial de implantación.
Se relaciona con la fase de evaluación de los resultados, dondesu objetivo es medir la eficacia de la política pública, comparando los impactos previstos con los observados.
Se relaciona con la fase de evaluación de los resultados, debido a que su objetivo principal es conocer si la política produce los beneficios esperados por los distintos actores que participan en el proceso.