Portada » Español » Determinantes posesivos
Lo normal es que el nombre vaya presentado en su sintagma con palabras como el, mi, este, tres, etc.
Los determinantes son:
· los artículos, y
· los adjetivos determinativos;
Esto es:
o los demostrativos
o los posesivos
o los numerales
o los indefinidos
o los interrogativos
o los exclamativos
¿Cuál es la función de los determinantes? El nombre posee un significado muy general:
reloj designa a todos los relojes del mundo. Pero lo normal es que nos refiramos a uno o a varios de ellos, a éste en particular, al mío, a dos relojes… Los determinantes limitan, precisan, la extensión significativa del nombre: el reloj del comedor;
tu reloj;
aquel reloj, etc.
Hay dos series de artículos: la de los determinados (el, la, los, las, lo)
, y la de los indeterminados (un, una, unos, unas)
.
Los artículos indeterminados presentan en el sintagma nominal (y, por tanto, en la oración) a los nombres que designan personas, animales o cosas no conocidos (por el hablante, por el oyente o por ambos), o que aparecen por vez primera en el discurso.
Los artículos determinados presentan nombres de personas, animales y cosas que ya son conocidos, o que han aparecido antes en el discurso.
Entre los artículos determinados suele incluirse la forma neutra lo:
· Estaba en lo hondo del pozo.
· Me gusta sólo lo auténtico.
Precede siempre a adjetivos (y no a nombres como los demás artículos, ya que no hay nombres neutros en español).
Esto hace pensar a algunos gramáticos que no es verdadero artículo, sino un pronombre (equivalente por tanto a un nombre).
· Estaba en lo hondo del pozo (= en la parte del pozo que es honda).
· Me gusta sólo lo auténtico (= las cosas auténticas).
Otros gramáticos sostienen (por razones bastante complicadas) que lo no se comporta como un verdadero pronombre, y que es un artículo especial cuya función consiste en convertir el adjetivo en nombre.
Lo hondo equivaldría a ‘la hondura’; y lo auténtico, a ‘la autenticidad’. Por supuesto, el neutro lo carece de plural, como todas las palabras neutras.
Nosotros consideraremos que si lo va acompañando a un adjetivo, lo sustantiva y por tanto hace la función de determinante;
Pero si va solo, es decir, no acompaña, sino que sustituye a un nombre o a otro elemento de la oración, entonces cumple la función de un SN, porque se trata de un pronombre.
También pueden acompañar al nombre para constituir el sintagma nominal, además de los artículos, los llamados adjetivos determinativos, esto es, los demostrativos, los posesivos, los numerales, los indefinidos, los interrogativos y los exclamativos.
Sitúan en el espacio lo designado por el nombre, y son:
este, ese, aquel, con sus plurales y femeninos. El demostrativo esteseñala un objeto que está próximo al hablante.
Ese apunta a un objeto situado a una distancia media del hablante. En cambio,aquel se refiere a objetos que están lejos del hablante. También puede hacer referencia al tiempo (más o menos próximo). Y es normal usarlos para referirse a algo que ya ha sido nombrado.
Señalán a quién pertenece el objeto designado por el nombre. El cual puede ser de un poseedor (mi balón) o de varios poseedores (nuestro balón). Cuando preceden al nombre, pierden su acento, y lo conservan cuando van detrás de él. Algunos posesivos tienen formas átonas (mi, tu, su) diferentes de las tónicas (mío, tuyo, suyo).
Presentan dos series:
·
Precisa la cantidad exacta de los objetos a cuyos nombres acompañan. Y sus formas son la interminable serie de los números:
uno, dos, tres.
..
·
Señalán el orden en que está colocado, dentro de una serie, aquello a cuyo nombre acompañan. Sus formas son:
primero, segundo, tercero.
..
Los ordinales no pueden presentar, ellos solos, al nombre: han de asociarse a otros determinantes (artículos o adjetivos determinativos).
Señalán imprecisamente la cantidad de objetos a cuyo nombre acompañan (frente a los numerales, que la señalán con precisión). Sus formas son numerosas, y resulta difícil hacer un inventario completo. He aquí los principales:
..
· Los adjetivos interrogativos preceden al nombre preguntando por su naturaleza. Son qué, cuál, cuánto.
· Los adjetivos exclamativos ponderan la cantidad o la intensidad con que se manifiesta lo designado por el nombre. Soncuánto y qué.
Dos o más determinantes pueden acompañar al nombre, asociándose entre sí: Todos los días… A veces, el nombre puede aparecer precedido y seguido de determinantes: Algunos amigos míos…
Con mucha frecuencia, el adjetivo calificativo (SAdj)
acompaña también al nombre como constituyente del sintagma nominal. Es su función principal, esta función se denomina ADYACENTE:
MI camisa blanca
El sintagma verbal es aquél sintagma cuyo núcleo es un verbo, y que aparece generalmente en la oración desempeñando la función de predicado, rodeado, a su vez, de uno o varios complementos que precisan y completan su significado.
Tradicionalmente, el sintagma verbal se ha considerado como el constituyente primordial de la oración; una de las partes imprescindibles, en tanto que núcleo del predicado, de toda oración exocéntrica o gramatical
Expresan el predicado como posible, probable, necesario, etc. Se construyen siempre con infinitivo.
Señalán la inminencia de la acción:ir a, estar para, estar a punto de + infinitivo: Voy a escribir.
Señalán el momento en que se inicia la acción: empezar a, arrancar a, decidirse a, echar(se) a, ponerse a, romper a + infinitivo: Empiezo a escribir.
Señalán la repetición del proceso: volver a, soler + infinitivo: Vuelvo a estudiar.
Señalán el fin o la interrupción de la acción:
Calisto, un joven noble apuesto e ingenioso que penetra, persiguiendo a un halcón, en la huerta donde se haya Melibea, de quien queda profundamente enamorado. Ante el rechazo de ésta y aconsejado por su criado Sempronio, decide encomendar su cuidado a Celestina, para lograr por medio de ella el amor de Melibea. La alcahueta consigue mediante artimañas que Melibea se enamore de Calisto. Los criados de éste intentan explotar en beneficio propio la pasión de su amo: que había prometido una cadena de oro a Celestina si lograba entre todos enamorar a Melibea. Cuando esto sucede, los criados reclaman su parte y ante la negativa de Celestina, la matan.
Pleberio, padre de Melibea.
Lo sorprendente es que una historia en apariencia tan simple, que podría haber sido la de una novela de serial, se convierta en argumento de una extensa y trascendental obra. ¿Cómo ocurre esto? Aparte de otras razones, dos son las que aquí se pueden señalar: por una parte, la acción se demora tranquilamente, con lo que se consigue diseñar unos caracteres de gran fuerza y un ambiente que es exacto reflejo de la vida misma; por otra, la trabazón de causas y consecuencias – fatales en definitiva – se entrecruzan como en la vida misma.
La Celestina es una obra única en cuanto a la creación de caracteres. Aunque Calisto y Melibea aparecen como protagonistas, es Celestina la que señorea la obra entera; éste es el hecho que justifica el cambio de título.
(Toledo, 1501? – Niza, 1536) Poeta renacentista español. Perteneciente a una noble familia castellana, Garcilaso de la Vega participó ya desde muy joven en las intrigas políticas de Castilla. En 1510 ingresó en la corte del emperador Carlos I y tomó parte en numerosas batallas militares y políticas. Participó en la expedición a Rodas (1522) junto con Boscán y en 1523 fue nombrado caballero de Santiago.
(1527-1591)
Fray Luis de León nacíó el 15 de Agosto de 1527 en Belmonte, Cuenca (España) en el seno de una prestigiosa familia consagrada a las profesiones de leyes, ejerciendo la abogacía y posteriormente la judicatura su padre Lope de León. Su madre se llamaba Inés Varela.
En el año 1541 ingresó en los Agustinos y en 1560 se licenció en Teología por la Universidad de Salamanca, centro del que fue catedrático.