Portada » Deporte y Educación Física » Desarrollo Psicomotor, Cognitivo y del Lenguaje en Niños: Etapas Clave
Las conductas motrices son las primeras y más aparentes desde el inicio del desarrollo. Se rigen por dos leyes fundamentales:
Gracias a la maduración y los estímulos, se desarrolla el control postural siguiendo estos hitos:
Coordinación Oculo-Manual:
La coordinación manual fina progresa, permitiendo comer solo.
Los movimientos de las piernas ganan precisión. El niño mejora en correr, frenar y subir/bajar escaleras. En motricidad fina, traza líneas verticales y usa instrumentos como pinceles y tijeras. Puede ensartar bolas y enroscar tapas. En motricidad gruesa, mantiene el equilibrio en un pie, anda de puntillas, monta en triciclo y sube escaleras alternando pies.
Construcción del Esquema Corporal:
Desarrollo de la permanencia del objeto (8-12 meses). Inicialmente, las actividades se centran en el propio cuerpo. A partir del 4º mes, el bebé repite acciones que producen resultados interesantes. Hacia el 8º mes, muestra intencionalidad y coordina conocimientos para alcanzar metas. Al final del año, organiza acciones para lograr objetivos.
Comprensión avanzada de relaciones medios-fin. Aparición de la función simbólica (18-24 meses). Clasifica por similitud y trabaja con colecciones. Realiza imitación diferida y aparece el juego simbólico.
La función simbólica permite usar significantes para representar significados. Discrimina cantidades discretas, identifica hasta 3 objetos y cuenta hasta 3. Realiza combinaciones de acciones medio-fin.
Emisión de sonidos vocálicos y balbuceo. El balbuceo se vuelve repetitivo (6-8 meses). Primeras palabras (9-10 meses). Transición del gesto a la palabra. Jerga expresiva (12 meses).
Pronunciación correcta de vocales y estabilización de consonantes. Sobreextensión del significado de las palabras. Esfuerzos por ser comprendido. Combinación de dos palabras. Primeras flexiones en nombres y verbos. Uso de preposiciones, artículos, pronombres personales y posesivos.
Desaparición de dificultades en diptongos y progreso en consonantes. Crecimiento del léxico. Uso del pronombre de tercera persona. Sintaxis más compleja con subordinadas, yuxtapuestas y coordinadas. Uso de conjunciones (especialmente «y»). Intencionalidad comunicativa avanzada.