Portada » Derecho » Derechos y Deberes en la Constitución de Honduras: Ciudadanía, Territorio y Gobierno
La República de Honduras adopta constitucionalmente la forma de una democracia representativa y republicana.
La convocatoria, organización y dirección de las consultas ciudadanas corresponde únicamente al Consejo Nacional Electoral. El Tribunal de Justicia Electoral resolverá lo que proceda en base a sus competencias sobre estos asuntos.
Se explica la ubicación geográfica del territorio y sus límites establecidos con los países colindantes, invocando determinados laudos con los cuales se han reafirmado los límites.
Los tratados internacionales deben ser aprobados por el Congreso Nacional antes de su ratificación por el Poder Ejecutivo. Una vez en vigor, forman parte del derecho interno de Honduras.
Si un tratado afecta una disposición constitucional, debe ser aprobado por el mismo procedimiento que rige la reforma de la Constitución. Simultáneamente, el precepto constitucional afectado debe ser modificado en el mismo sentido y por el mismo procedimiento, antes de ser ratificado por el Poder Ejecutivo.
En caso de conflicto entre el tratado o convención y la Ley, prevalecerá el primero.
La nacionalidad hondureña se adquiere por nacimiento (jus soli o por ser hijo de hondureños nacidos en el extranjero) y por naturalización.
Los extranjeros en Honduras tienen derechos civiles similares a los hondureños, pero deben respetar las leyes locales y están sujetos a restricciones en actividades políticas y empleo.
El sufragio es un derecho y una función pública. El voto no solo es una prerrogativa de los ciudadanos, sino también una obligación que permite la conformación del poder público.
Su función principal es organizar y supervisar los actos electorales. La Ley Electoral regula su organización y funcionamiento. Es responsable de coordinar la organización de las elecciones presidenciales, asegurando que el proceso de votación, escrutinio y resultados sea legítimo y transparente.
El Tribunal Supremo Electoral estará compuesto por tres magistrados propietarios y un suplente, elegidos por el Congreso Nacional por un período de cinco años. Estos magistrados deben ser hondureños por nacimiento, tener más de 25 años y reconocida honorabilidad.
Los partidos políticos son fundamentales para canalizar las demandas de la ciudadanía, estructurar el debate político y seleccionar candidatos para cargos de elección popular.
El artículo 59 garantiza que los derechos humanos son universales, indivisibles e interdependientes, y asegura su protección por parte del Estado.
El principio fundamental es el «Interés Superior del Niño», que prioriza el bienestar del menor en todas las decisiones que lo afecten.
Prohíben la pena de muerte y la interrupción del embarazo, reafirmando la protección de la vida desde su concepción.
Estos artículos protegen el derecho a la inviolabilidad del domicilio y de las comunicaciones, así como el derecho a la propiedad privada.
Se reconoce el derecho al trabajo, a condiciones laborales justas, a un salario mínimo, y se garantiza la protección contra el desempleo.
El acceso a la salud es un derecho humano fundamental, y el Estado tiene la responsabilidad de garantizar servicios de salud gratuitos y de calidad para quienes no puedan costearlos.
La educación es un derecho fundamental, gratuita y obligatoria. El Estado debe garantizar el acceso a una educación de calidad sin discriminación.
Se garantiza el derecho a una vivienda digna y se promueven programas de vivienda social, regulando el arrendamiento y las construcciones para asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso a un hogar.