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RELIGIÓN 1º DE BACHILLERATO
TEMAS DE LA SEGUNDA EVALUACIÓN
A. EL REINO DE Dios (bloque 2, tema 2)
Definición:
– No estamos hablando de ningún territorio o país, ni tiene connotaciones políticas.
– El Reino de Dios es la acción de Dios en el mundo para transformarlo, y en nuestra vida para salvarnos.
Parábolas del Reino
Mayores: Mateo 13,3-23 – El sembrador: una parte de la semilla que echa cae en el camino y se pierde; otra cae entre zarzas y la planta se asfixia al crecer; otra cae en terreno pedregoso y la planta se seca por falta de raíces; y por fin una parte cae en tierra buena y produce mucho fruto.
Significado: representa las diferentes reacciones de la gente al escuchar la palabra de Dios.
Mateo 20,1-16 – La viña: el dueño de una viña paga el mismo salario tanto a los que trabajan desde la mañana, como a los que han trabajado solo por la tarde y a última hora del día.
Significado: en el reino de Dios lo importante no es la recompensa que recibamos, sino que ya
solo trabajar por el Reino es suficiente recompensa, porque nos hace felices.
Lucas 14,15-24 – El banquete: un hombre invita a su boda a varias personas, pero estas van poniendo excusas para no ir, por lo que acaba ordenando a sus sirvientes que inviten a todas las personas que encuentren por los caminos.
Significado: el Reino de Dios es universal, es para todos los hombres, porque los judíos, el antiguo Pueblo de Dios elegido, han rechazado a su enviado.
Menores: Mateo 13: La cizaña – El grano de mostaza – La levadura – El tesoro – La perla – La red
Gestos proféticos de Jesús
1. Incumplir normas de la Ley de Moisés (como la de no trabajar en sábado) cuando hay que atender necesidades humanas.
2. Saltarse las normas judías de la pureza: tocar a enfermos, dejarse tocar por mujeres, no realizar el lavado ritual de las manos…
4. Acoger en su grupo de discípulos a todos tipo de gente: pecadores públicos (publicanos, prostitutas), mujeres, terroristas (zelotes), marginados en general…
B. LOS DERECHOS HUMANOS (bloque 4, tema 1, páginas 221-223)
Pecado estructural: son estructuras políticas, económicas y sociales creadas por los seres humanos y que, en lugar de servir para hacerlo crecer, lo anulan.
Declaración universal de los derechos humanos:
Fue adoptada y proclamada en 1948 por los países fundadores de la ONU, tras acabar la Segunda Guerra Mundial.
Derechos civiles (artículos 3-21 de la declaración): son los más antiguos, y son aquellos que se refieren a la libertad del individuo; se pide a las autoridades que no se inmiscuyan en esta libertad, o sea, no inmiscuirse en la vida privada de sus ciudadanos. Son estos derechos:
– a la vida
– a la libertad
– a la seguridad
– a ser juzgado con imparcialidad
– a circular libremente dentro y fuera del propio país
– a tener una nacionalidad
– a casarse y fundar una familia
– a la propiedad individual y colectiva
– a tener libertad de pensamiento, conciencia y religión
– a opinar
– a reunirse y asociarse
– a participar en el gobierno del propio país, eligiendo o siendo elegido para cargos
Derechos sociales (artículos 22-27 de la declaración): aquellos que se refieren a la igualdad entre individuos como integrantes de una sociedad, y en los que se pide a las autoridades que los garanticen, a través de servicios públicos. Son estos derechos:
– a la seguridad social
– al trabajo y a un salario digno
– al descanso
– a subsidio de desempleo, pensión, y bajas por maternidad o enfermedad
– a la educación
– a participar en la vida cultural y científica
Derechos globales o intergubernamentales (no contemplados en la declaración de 1948): aquellos que se refieren a la solidaridad entre los pueblos que conviven en el mismo planeta, y en los que, para garantizarlos, es imprescindible la colaboración entre los gobiernos de los diferentes países; por eso se les llama ‘intergubernamentales’. Algunos de estos derechos son:
– a la paz
– a la asistencia humanitaria
– a vivir en un ambiente no contaminado
– a la privacidad en Internet
Iglesia y Derechos humanos
– Desde 1967, por iniciativa del papa San Pablo VI, la Iglesia tiene un organismo que lucha por implantar los Derechos Humanos en los pueblos de la tierra: se llama Comisión de Justicia y Paz, y su labor es extraordinaria.
– Pero, por otro lado, la Iglesia tiene muchas dificultades para implementar los Derechos Humanos a nivel interno, dentro de su propia estructura: falta de democracia al elegir a obispos y párrocos, abusos de poder, denegación del acceso de la mujer al sacerdocio y al gobierno de la Iglesia, tendencia a encubrir escándalos, dificultad para poder elevar quejas y críticas, falta de estructuras de control sobre el ejercicio del poder…
C. LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA (bloque 4, tema 2, páginas 229-234)
La primera encíclica de un papa sobre el problema social: Rerum novarum (1891), de León XIII.
El Concilio Vaticano II (1963-1965) cambió el tono de la Iglesia en sus documentos, para ser más positivo y conciliador y menos condenatorio.
La primera encíclica de un papa sobre el tema ecológico: Laudato si’ (2015), de Francisco.
– La Iglesia llegó tarde al problema social: aunque muchos sacerdotes y órdenes religiosas (como habéis visto en los trabajos que os he mandado) ya llevaban mucho tiempo trabajando en labores sociales, los dirigentes de la Iglesia reaccionaron tarde, y dejaron que se les adelantaran las doctrinas de Karl Marx que dieron origen al socialismo.
– Buena parte de la burguésía católica, gobernantes y obispos, al principio reaccionaron muy mal a la DSI y la ignoraron o se opusieron abiertamente a ella.
– La DSI ha hecho una contribución importante a la humanidad, porque sus principios han sido integrados en la Declaración de los Derechos Humanos.
– La Iglesia ha ido adaptando su doctrina a los nuevos problemas que han ido surgiendo en la humanidad. A partir de los años 60 del Siglo XX (Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II) ya no había necesidad de denunciar la situación de los trabajadores, pero la Iglesia comprobó y comenzó a denunciar la enorme diferencia que existe entre países ricos y países pobres: la explotación económica de estos países, y el fomento de la inestabilidad política en ellos (financiando guerras) para conseguir beneficios económicos.
– Aunque la Iglesia se opone al socialismo, ha aprovechado algunas de sus ideas, y también se ha opuesto siempre al capitalismo salvaje: considera que ambas ideologías, en su versión más extrema, anulan a la persona y la privan de su dignidad.
Principios de la DSI:
1. Dignidad de la persona humana: la persona (hombre y mujer) es digna como hijo de Dios; no es un objeto que pueda ser explotado por empresas ni gobiernos; es deber divino defenderla y ayudar a promocionarla.
2. Primacía del Bien Común sobre el interés particular: las personas no se realizan solas, sino colaborando con las demás, por tanto el interés de cada uno no sólo debe estar limitado por el interés de los demás, sino que además debería estar orientado al progreso de toda la sociedad. Pero también se debe recordar que el orden y el progreso deben estar al servicio de las personas, y no al revés (así se evitan abusos de poder).
3. Destino Universal de los Bienes: todos tienen derecho a disfrutar de los bienes de la tierra, porque Dios nos los ha dado a todos; la Iglesia considera un escándalo la acumulación excesiva de bienes en manos de unas pocas personas; pero por otro lado la Iglesia defiende que la propiedad privada es un derecho, y se opone a la idea socialista de que el estado sea dueño de todo.
4. Principio de solidaridad: es imprescindible que los pueblos colaboren entre sí, para el bien de todas y cada una de las personas, porque si no la humanidad se encaminará hacia una catástrofe.
5. Principio de subsidiariedad: es la gran aportación de la Iglesia a los derechos humanos (papa Pío XI, en la encíclica Quadragessimo anno); este principio dicta que una institución superior debe siempre cuidar de otra inferior que dependa de ella, tanto positivamente (resolviendo los asuntos que la inferior no puede resolver) como negativamente (no interfiriendo en los asuntos que sí puede resolver la inferior); de aquí viene la palabra subsidio (=ayuda económica).
6. Principio de participación: el ciudadano, como individuo o asociado a otros, directamente o por medio de los propios representantes, tiene el deber y el derecho de contribuir a la vida cultural, económica, política y social de la comunidad civil a la que pertenece.
D. ESTADO Y RELIGIÓN (bloque 4, tema 3, página 252)
Hay cuatro tipos de estado con respecto al hecho religioso:
1. Estado confesional: aquel en el que existe una religión declarada como Oficial del estado, y por tanto el Jefe de Estado (y en muchos casos también los miembros del Gobierno) tiene que pertenecer a esta religión. Ejemplos: el Budismo es la religión oficial de Camboya; el Sintoísmo es la religión oficial de Japón; la mayoría de países musulmanes lo son oficialmente (monarquías como Arabía Saudí y Marruecos, repúblicas como Irán y Pakistán); varios países europeos son oficialmente cristianos: los países nórdicos (Islandia, Noruega, Suecia, Dinamarca y Finlandia) son luteranos, el Reino Unido es anglicano, Malta y Mónaco son católicas, y Grecia es ortodoxa.
A partir del Concilio Vaticano II, la Iglesia dejó de defender este modelo: prefiere mantener una actitud más independiente con respecto a la política, para no ser manipulada por nadie.
2. Estado laicista: aquel en el que no existe ninguna religión oficial, ni se colabora con ninguna religión (no hay clases de Religión en las escuelas, p. Ej., ni funerales ni misas de estado…) porque lo religioso es relegado al ámbito exclusivamente privado. Es el caso de Francia.
3. Estado laico: no hay ninguna religión declarada como oficial, pero se colabora activamente con aquellas religiones de mayor implantación. Es el modelo preferido por la Iglesia, y el que sigue España.
4. Estado oficialmente ateo: aunque se tolera el ejercicio de las religiones en privado, están controladas y en ocasiones perseguidas, y se prohíbe su difusión y cualquier acto público religioso. Ha sido el caso de los regíMenes comunistas, y hoy en día el de China y Corea del Norte.