Portada » Filosofía » Crítica de Nietzsche a la Metafísica Occidental: El Crepúsculo de los Ídolos
El texto proviene de Crepúsculo de los Ídolos (subtitulado Cómo se filosofa a martillazos), la última obra que Nietzsche publicó en vida. Esta obra, escrita antes de su colapso mental, resume y actualiza las principales problemáticas que abordó a lo largo de su trayectoria. En el capítulo «La razón en la filosofía», Nietzsche realiza una de sus críticas más contundentes a la metafísica occidental, argumentando que el origen de sus errores radica en el lenguaje. Critica las teorías y valores de la cultura occidental, desde los griegos hasta Kant, pasando por el cristianismo, por considerarlos basados en conceptos metafísicos («falsos ídolos») de una moral que desprecia la vida.
Nietzsche reconoce la influencia de Heráclito, el único filósofo occidental que, según él, no despreció los sentidos y aceptó el mundo tal como es, con su devenir constante. Sin embargo, la mayor influencia en su juventud provino de Schopenhauer, a quien luego rechazó. Schopenhauer postulaba una «voluntad de vivir» oculta tras los fenómenos naturales, una fuerza irracional que se manifiesta en la lucha por la supervivencia. Su pesimismo se deriva de la idea de que la «voluntad de vivir» en el hombre es un deseo insaciable, por lo que la vida es sufrimiento. Nietzsche adopta la idea de la «voluntad de vida», pero rechaza la negación del deseo de vivir, afirmando la vida a pesar del dolor.
Nietzsche ha influido en numerosos filósofos, especialmente del siglo XX. Se le puede considerar un «educador del siglo XX», comparable en influencia a Marx y Freud. Estos tres pensadores, conocidos como «maestros de la sospecha», cuestionan la racionalidad y objetividad del conocimiento occidental, buscando desenmascarar las «falsas conciencias» que se ocultan tras las teorías políticas, psicológicas, éticas y metafísicas.
Finalmente, destaca la influencia de Nietzsche en Heidegger, quien considera que el error de la filosofía no es la división entre mundo material e ideas inmateriales, sino la creencia de que la realidad se limita a las cosas existentes, ignorando lo posible.