Portada » Historia » Crisis del Siglo XVII: Felipe III, Felipe IV y Carlos II
Tema 9. La España del siglo XVII.
En Siglo XVII se produce el fin de la hegemonía internacional militar de los Austrias, así como el inicio de una crisis económica, demográfica y social. En contraposición a los Austrias Mayores, los Austrias Menores, denominados así por su escaso peso político, contaron para su gobierno con la ayuda de un valido que les asesoraba en la toma de decisiones.
El cargo del valido no era institucional, sino fruto de un nombramiento, este sistema de gobierno se tradujo en un distanciamiento entre el rey y sus vasallos, y en la desconfianza hacia la corona.
1.
Felipe III (1598-1621) este contó con el Duque de Lerma, su medida más destacada fue la expulsión de los moriscos entre 1609 y 1614, acusados de falsos conversos, esto afectaría gravemente a la economía agraria.
2. Felipe IV (1621-1665) confió en el Conde-Duque de Olivares, que intentó consolidar el poder absoluto del monarca sobre los reinos a través del proyecto la «Uníón de Armas», que pretendía crear un ejército reclutado y mantenido por cada reino. Su política encontraría especial oposición en Cataluña y Portugal. En Cataluña, explotó una rebelión de campesinos en 1640 sofocada hasta 1652, y en Portugal también en 1640 que concluirá en 1668 con la independencia del reino portugués. Tras la destitución de Olivares en 1643 se produjeron tumultos por diferentes motivos económico-sociales.
3. Carlos II (1665-1700) monarca con limitaciones físicas y psíquicas, contó con Juan José de Austria, El Duque de Medinaceli y el Conde de Oropesa. Se produjeron disturbios sociales como Cataluña, Valencia, Valladolid y Madrid.
Concretamente la crisis de 1640 se inscribe con el reinado de Felipe VI, asesorado por Conde Duque de Olivares. Este último intentó consolidar el poder absoluto del monarca sobre los reinos mediante la «Uníón de Armas», que pretendía crear un ejército reclutado y mantenido por cada reino. Su política encontrará oposición en Cataluña y Portugal, cuyas sublevaciones se conocen como la crisis de 1640.
• En Cataluña, tuvo un carácter anticentralista, estalló una rebelión de campesinos en 1640 que no pudo ser sofocada hasta 1652, que se saldó con numerosos muertos y la pérdida del Rosellón y la Cerdaña, que pasaron a ser controlados por Francia.
• En Portugal, unida a España desde que Felipe II la incorporará en 1580, estalló una insurrección en 1640 de signo independentista y anticastellana que concluirá en 1668 con el reconocimiento de la independencia del reino portugués y la proclamación del Duque de Braganza como rey con el nombre de Juan IV.
En cuanto a aspectos internacionales se produce el ocaso de la dinastía de los Austrias, que asentaron en el XVII los mismos objetivos que en el XVI: defensa a ultranza de su patrimonio, protección de la religión católica frente a luteranos y calvinistas, y la conservación del monopolio comercial en América. Esta política les originaba un acuciante endeudamiento y tuvieron que afrontar nuevos factores: 1. La escasez de recursos financieros, que restringíó el alcance de la política exterior e incrementó la presión fiscal, 2. La pérfida de efectivos militares, 3. La acción de holandeses e ingleses en las colonias de España y Portugal, que obligaron a invertir recursos en defensa y buques para América, 4. La aparición de nuevos enemigos y el surgimiento de distintos frentes.
Durante el reinado de los Austrias Menores se asienta el sistema de Westfalia- Pirineos, donde ocurre:
1. Durante el reinado de Felipe III se firmó la paz con Inglaterra (1604), se acordó la Tregua de los Doce Años con las Provincias Unidas y se atravesó una época pacífica con Francia.
2. Con Felipe IV y Olivares, no se renovó la tregua con los PPBB y se cooperó con los Habsburgos de Viena, hasta el punto de involucrar a España en la Guerra de los Treinta Años (1618-48), que enfrentó a católicos y protestantes. Finalmente, la sublevación de Cataluña y Portugal en 1640 resultó decisiva; en 1643 los tercios españoles fueron derrotados por Francia en Rocroi.
En 1648 España firmaba la paz de los Pirineos, por lo que perdía varias plazas y Francia se consolidaba como potencia hegemónica en Europa.
En buena parte de la Europa mediterránea, durante el Siglo XVII, se produjo una importante crisis económica, demográfica y social. Esto provocó un malestar social, y generó una creciente inestabilidad política. Esta situación no afectó al ámbito artístico-literario, que conocieron una auténtica Edad de Oro.
Desde el punto de vista demográfico, la población se estancó en torno a los 8 millones de habitantes. Esto afectó especialmente a Castilla. Además, hay que sumar la crisis de subsistencia, el rebrote de epidemias, los enfrentamientos bélicos (Cataluña, Portugal) y la expulsión de los moriscos.
En materia económica, encontramos problemas con los distintos sectores productivos. La producción agrícola disminuyó, debido a la escasez de mano de obra, las cargas fiscales sobre el campo y la reducción de la demanda de los productos agrícolas. Muchos campesinos tuvieron que abandonar o vender sus tierras para convertirse en jornaleros y la propiedad se concentró en manos latifundistas. La artesanía, entró en recesión así como la industria metalúrgica vasca y naval. Por su parte, el comercio exterior exportaba materias primas e importaba manufacturas.
En materia social, encontramos una clara sociedad estamental con dos estamentos privilegiados: nobleza y clero, que no pagaban impuestos y tenían trato preferencial: y uno no privilegiado, el tercer estado. La nobleza, cerca de un 10% de la población, se concentraba en el norte peninsular, destacando la urbana y la cortesana. El clero, era destino principal de segundones nobiliarios, también constatamos la existencia de un bajo clero. Finalmente, el tercer estado presentaba una heterogeneidad notable, y el grupo más numeroso era el de los campesinos.
La triple crisis del Siglo XVII no afectó al ámbito artístico-literario, que con el Barroco conocieron la Edad de Oro.
El término Barroco designa todo un movimiento cultural difundido desde Italia y que en España se extiende desde finales del S.XVI hasta mediados del S.XVIII. La cultura era propagandística y se puso a servicio de la Iglesia Católica y de la Monarquía Absoluta, además, buscó llegar a un público masivo recurriendo al Realismo naturalista, la ostentación y el lujo; en general, mediante cualquier elemento contrario al equilibrio clásico.
En el ámbito del pensamiento, aparece un grupo de críticos a los que se los denomina arbitristas. Destacan figuras como Sancho de Moncada.
En el apartado literario, está muy influido por obras como El Lazarillo, se difunde la novela picaresca. Además, se desarrolla la gran obra de Cervantes, escrita en dos partes (1605-1615). En poesía aparecen Góngora y Quevedo, y el teatro gozó de enorme popularidad con Lope de Vega, Calderón de la Barca.
En el campo de las artes, destaca pintura naturalista donde destaca el manejo de la luz, el movimiento y el color. Predominan los temas religiosos y se configuran 3 grandes escuelas nacionales en Valencia, Sevilla y Madrid.
Tema 10: La España del Siglo XVIII.
El año 1700 asiste a la muerte sin descendencia de Carlos II. Este había elegido como sucesor a un nieto de Luis XIV de Francia, a la postre Felipe V de Borbón, varias potencias europeas propondrán a un candidato opositor: el archiduque Carlos de Habsburgos. Se desata un conflicto, la Guerra de sucesión (1701-1713-15).
De una lado los Borbones con el apoyo castellano y del otro una Liga Antiborbónica en la que destacan los Habsburgo, Holanda, Gran Bretaña y los reinos peninsulares más orientales, se enfrentan en una contienda con tintes de Guerra Civil e internacional con distintos escenarios: las fronteras de Francia, incluidos los territorios españoles en Milán y Flandes; las posesiones francoespañolas de ultramar, en las que desembarcó en 1704 el pretendiente Carlos de Habsburgo.
Las hostilidades se debilitarán con el acceso del archiduque al control del Imperio Austriaco en 1711, facilitando la firma de la Paz de Utrecht. Compuesta por los tratados de Utrecht (1713) y Rastatt (1714) supuso la consolidación de Gran Bretaña como potencia naval y comercial. Por su parte los Habsburgo arrebatan a España Flandes y las posesiones italianas. A nivel nacional asistimos a la llegada de una nueva dinastía al trono español, los Borbones en la persona de Felipe V, con un modelo reformista.
La Guerra de sucesión y el Sistema de Utrecht (1701-1713-15) suponen la institución de la dinastía de los Austrias por la de los Borbones en la persona de Felipe V. Los Borbones inician una monarquía absolutista de corte francés y promoverán una serie de reformas para consolidarla: mayor centralización de la administración, el control sobre la iglesia y un intervencionismo del Estado en la economía. Primeros monarcas destacamos:
• Felipe V (1700-46): en sus comienzos estuvo aconsejado por miembros designados por Luis XIV. También estuvo influenciado por sus dos esposas y por válidos tanto extranjeros como españoles. Este abdicó en su hijo Luis I en 1724. Su medida más notable fue la implantación de los Decretos de Nueva Planta, y además, fue el promotor de la Ley Sálica.
• Fernando VI (1746-59): dejó actuar a burócratas más profesionalizados en cuanto a tareas de gobierno. Los válidos comienzan a conocerse como secretarios. Destacó entre otros el marqués de la Ensenada, al que se le atribuye un plan de reforma fiscal inspirado en racionalidad y eficacia. Su objetivo era sustituir los diferentes impuestos por una única contribución. Surgíó el Catastro de Ensenada.
La Guerra de Sucesión y el Sistema de Utrecht (1701-1713-15) suponen la sustitución de la dinastía de los Austrias por la de los Borbones en la persona de Felipe V. Estos inician una monarquía absoluta de corte francés y promoverán una serie de reformas:
1. Reforma del Gobierno y la Administración: siguiendo los principios de centralización y uniformidad para evitar los privilegios locales y forales, por lo que se sustituye el tradicional sistema de consejos por la ampliación de poderes del Consejo de Castilla. Así, los secretarios se convierten en funcionarios imprescindibles. Tambine, se da la supresión de los privilegios de los reinos orientales a partir de los Decretos de Nueva Planta y se diseñará una nueva administración basada en los intendentes y los capitanes generales. Cabe destacar las reformas acometidas en el Ejército y la Armada con el objetivo de crear un ejército permanente a través del reclutamiento de: voluntarios; levas de vagos y maleantes; y, la quinta, un reemplazo de varones no exentos de los diferentes pueblos de España.
2. Mayor control sobre la iglesia: se puso en marcha una política regalista que amplía el poder de la corona en materia eclesiástica que vio la luz en el Concordato con la Santa Sede (1753), por el que se concedía a la corona el derecho de patronato universal.
3. Incremento de la intervención del Estado en la economía: siguiendo el modelo mercantilista se inaugurarán reformas fiscales para incrementar las finanzas del Estado. Destacaron el aumento de la recaudación de impuestos, la creación de manufacturas y la promoción de toda una serie de obras públicas. En materia de impuestos destacó una reforma fiscal promovida por el marqués de la Ensenada, que tenía el objetivo de cambiar los impuestos por una única contribución.
El despotismo es aparentemente contradictorio, Absolutismo (inmovilista, antidemocrático) e Ilustración (racional, antitradicionalista). Este fue implantado por Carlos III, hijo de Felipe V que sucede a su hermano Fernando VI que muere sin descendencia. Carlos III combinó su participación activa en el gobierno con el asesoramiento de un equipo de secretarios y «ministros», como Esquilache, Campomanes y Floridablanca.
El primer gran problema interno fue el Motín de Esquilache (1766), una revuelta popular que estalla por el incremento del precio del pan, aunque la excusa fue un decreto que prohibía el uso de capas y sombreros alegando que amparaban la delincuencia. Se extendíó por casi todo el país y acabó con la destitución de Esquilache. En los ayuntamientos surgieron cargos elegidos por los ciudadanos y se decretó la expulsión de la Compañía de Jesús por considerarlos contrarios al gobierno.
Destacaron una serie de reformas económico-sociales orientadas al impulso de la agricultura. También destacaron las medidas encaminadas a la liberalización del mercado, lo que provocó un aumento de la inflación que dinamitarán sucesos como el Motín de Esquilache. Por otro lado, bajo la supervisión de Olavide se puso en marcha un plan para colonizar Sierra Morena. Y, también destaca el desarrollo de obras públicas, por lo que el monarca es conocido como «el alcade de Madrid». Finalmente, surgíó el Banco Nacional de San Carlos en 1782.
El objetivo fundamental de los Borbones fue la recuperación de los territorios perdidos en Utrecht (1713-15). El gran aliado será Francia y el principio enemigo Gran Bretaña.
Constatamos diferentes monarcas:
1. Felipe V (1700-46). Casado con Isbal de Fernesio, que deseaba que su hijo Carlos III gobernara un reino italiano, consiguiendo que este se proclame rey de Nápoles y Sicilia y que su hijo segundo Felipe sea el ducado de Parma.
2. Fernando VI (1746-59). Mantuvo una política exterior neutral. Firmó el Concordato de 1753 que concedía a la corona el derecho de Patronato universal. Finalmente, recuperó el potencial naval de la Armada.
3. Carlos III (1759-88). Deshizo el equilibrio anterior emprendiendo la llamada Guerra de los Siete Anos (1756-63) en la que se firma la Guerra de Independencia de las colonias británicas de Norteamérica con el objetivo de recuperar Menorca.
El propósito de los Borbones fue el reforzamiento de su control colonial, para ello dispondrán una serie de medidas de índole administrativa y comercial:
A) Medidas administrativas: se dieron sobre todo con Carlos III impulsadas por José Gálvez, que procedíó a: 1. Recortar el poder administrativo de los criollos; 2. Crear dos nuevos virreinatos para hacer más efectivo el control político y fiscal de Indias: Nueva Granada y Río de Plata; 3. Revitalizar la inmigración de España a América; 4. Menguar el poder de la iglesia; 5. Promover en Indias la creación de un ejército permanente que incluirá mestizos y criollos; 6. Acrecentar la presión fiscal; 7. Reprimir cualquier consto revolucionario como el de los»Comuneros del Socorro».
B) Medidas comerciales: orientadas a que América exportase materias primas a la Península e importara los productos industriales españoles. Se favorecieron medidas como: 1. El traslado de la Casa de Contratación de Sevilla a Cádiz en 1717; 2. Se autorizó a compañías comerciales para que explotasen en régimen de monopolio algunas áreas y productos coloniales; 3. Se procuró eliminar la competencia extranjera; 4. A partir de reglamentos entre los que destacan el de Libre Comercio de 1778, se suprimíó el monopolio gaditano; 5. Se tomaron medidas para acabar con la industria de las colonias para que estas abastecieran con manufacturas peninsulares.
A lo largo del S.XVIII, los Borbones llevado a cabo un programa reformista cuya base intelectual fue la Ilustración, hablamos de una ideología emergente.
La ilustración aterrizó en España con retraso al resto de Europa y en los reinados de Felipe V y Fernando VI solo cabe hablar de grupos minoritarios que reclamaban reformas, como los proyectistas y los novadores, y algunas figuras como Benito J. Feijoo.
Los nuevos ideales no encontraron aplicación efectiva hasta el reinado de Carlos III, que encarnó el llamado Despotismo Ilustrado, modelo a caballo entre el Antiguo Régimen y el Liberalismo que tiene como lema «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo».
Por lo que se refiere a los canales de difusión del movimiento ilustrado, destacan las academias; las instituciones de enseñanza superior alternativas a las universidades; las sociedades económicas de país; los consulados y las publicaciones periódicas de carácter científico, literario o sociológico.
Todos ellos reservados a los grupos sociales superiores.
Finalmente, en cuanto a las figuras intelectuales y artistas de signo ilustrado, destacan: 1. Intelectuales ilustrados como Feijoo y Jovellanos; 2. Científicos y expediciones como C.Mutis y 3.Artistas y literatos. Destaca la figura de Goya y en materia literaria se desarrollan el ensayo y la epístola. Entre los prosistas destacan Cadalso; en poesía, Samaniego; y en teatro Moratín.