Portada » Economía » Conceptos Fundamentales de Economía: Mercado, PIB, Inflación, Crisis y Empresa
Es una forma de organización económica en la cual se realizan intercambios de bienes y servicios con el objetivo de adquirir satisfacciones por parte de vendedores y compradores, basándose en la oferta y la demanda. Existen principalmente dos tipos de economía:
El Producto Interior Bruto (PIB) es la medida principal de la producción económica de un país durante un periodo determinado. Sirve para medir la actividad económica y el tamaño de una economía.
Los factores que lo componen, desde la perspectiva del gasto, son:
PIB = Consumo de las familias (C) + Gasto del gobierno (G) + Inversión bruta (I) + (Exportaciones (X) - Importaciones (M))
También se puede entender como el valor añadido generado por el conjunto de empresas de un país.
Valor Añadido = Valor de venta - Valor de consumo intermedio
En resumen, refleja la actividad económica que desarrolla un país.
El desempleo en el mercado laboral es la situación en la que un ciudadano, formando parte de la población activa y estando en edad y disposición de trabajar, carece de empleo y lo busca activamente.
La población activa consta de las personas empleadas y las desempleadas (que buscan empleo).
En España, el desempleo se mide principalmente a través de dos fuentes:
Los criterios no son coincidentes porque miden el fenómeno de forma diferente y sobre universos no exactamente iguales (registrados vs. encuestados según criterios OIT). Por ello, las cifras del paro registrado (SEPE) y de la EPA suelen diferir.
Una empresa es un sistema complejo que consta de varias partes interrelacionadas. Es un sistema dinámico, que evoluciona con el paso del tiempo, lo que requiere planificación y estrategia. También es un sistema abierto, ya que se relaciona constantemente con su entorno, lo que exige conocimiento, coordinación y control por parte de un grupo organizado para su gestión.
Las principales causas de la crisis económica que afectó a España de forma severa a partir de 2008 incluyen:
Una recesión es una fase del ciclo económico caracterizada por una disminución significativa de la actividad económica general de un país. Técnicamente, se suele definir como un periodo de al menos dos trimestres consecutivos de contracción del PIB real.
Respecto a la situación en España, el texto original afirma: «No estamos ya porque ya estamos creciendo.» (Esta afirmación depende del momento exacto en que se escribió el texto original; la situación económica es cambiante).
Una política fiscal expansiva consiste en un conjunto de medidas adoptadas por el gobierno que actúan sobre la economía, generalmente cuando ésta se encuentra en una situación de bajo crecimiento o recesión, con el objetivo de estimular la demanda agregada. Estas medidas suelen incluir:
El propósito es incrementar la producción y reducir el desempleo.
El PIB español mejoró en 2015 debido a una combinación de factores, entre ellos:
(El siguiente párrafo del texto original sobre la entrada de capital en bolsas es confuso y parece describir un problema de inversión más que una causa de la mejoría del PIB. Se corrige gramaticalmente pero su conexión lógica es débil):
Una entrada significativa de capital en las bolsas españolas, que invirtieron en empresas extranjeras, pudo llevar a pérdidas si esas inversiones no resultaron rentables; por ejemplo, si se compraron activos a un precio y su valor posterior fue menor, no se recuperó la inversión inicial.
La mejoría económica puede detenerse o ralentizarse por múltiples factores, como el agotamiento de los impulsos iniciales, cambios en el contexto internacional, tensiones geopolíticas, subidas de tipos de interés, o la necesidad de nuevos ajustes estructurales.
La relación entre déficit, deuda y PIB es compleja:
Por tanto, mientras el déficit puede tener un efecto expansivo a corto plazo, la acumulación de deuda puede ser un lastre para el crecimiento futuro.
Cuando algunos economistas afirman que para salir de la crisis en España es necesaria una «devaluación interna», se refieren a la necesidad de ganar competitividad exterior sin poder recurrir a la devaluación de la moneda (ya que España comparte el euro).
¿En qué consiste? Es un proceso de ajuste macroeconómico que busca reducir los costes laborales unitarios (salarios en relación con la productividad) y los precios internos en comparación con los de los socios comerciales. El objetivo es que los productos y servicios españoles se vuelvan relativamente más baratos, impulsando así las exportaciones y reduciendo las importaciones, lo que ayudaría a corregir déficits en la balanza de pagos y a estimular el crecimiento.
¿Se ha realizado? Sí, en gran medida. Tras la crisis de 2008, España experimentó un proceso de ajuste significativo, incluyendo moderación salarial (e incluso bajadas en algunos casos), reformas laborales que buscaron flexibilizar el mercado de trabajo y aumentos de productividad en ciertos sectores. Esto contribuyó a una mejora notable de la competitividad y a un fuerte crecimiento de las exportaciones.
Antes de la entrada en la Unión Económica y Monetaria (UEM), España sí podía devaluar su moneda (la peseta) para ganar competitividad. Ahora, al ser el euro una moneda común para todos los países integrantes, esa herramienta no está disponible a nivel nacional, por lo que el ajuste debe hacerse por otras vías, como la mencionada «devaluación interna».
Como norma general, la deflación (caída generalizada y sostenida de los precios) se considera mala para la economía por varias razones:
Por estas razones, los bancos centrales suelen tener como objetivo mantener una inflación baja pero positiva.
La cadena de valor es un modelo conceptual que describe el conjunto de actividades interrelacionadas que una empresa realiza para diseñar, producir, comercializar, entregar y apoyar sus productos o servicios. Cada actividad de la cadena va añadiendo valor al producto final.
Es una herramienta estratégica utilizada para analizar las actividades empresariales e identificar fuentes de ventaja competitiva. Describe las actividades necesarias para llevar a cabo la producción y entrega del bien o servicio ofrecido.
Ambos tipos de actividades son necesarias en una empresa, pero se diferencian en su función dentro de la cadena de valor:
El coeficiente de caja (también llamado encaje bancario o coeficiente de reservas mínimas) es el porcentaje de los depósitos totales que un banco comercial debe mantener obligatoriamente como reservas líquidas (dinero en efectivo en sus cajas fuertes o depositado en el banco central) y que no puede utilizar para conceder préstamos o realizar inversiones. Es una herramienta de política monetaria utilizada por los bancos centrales para controlar la liquidez del sistema financiero y la capacidad de los bancos para crear dinero.
Un «banco malo» (bad bank en inglés) es una entidad financiera, a menudo creada o respaldada por el gobierno, cuyo propósito es comprar los activos tóxicos de los bancos comerciales. Los activos tóxicos son aquellos con un alto riesgo de impago o de pérdida de valor, como créditos hipotecarios de dudoso cobro, préstamos a promotores inmobiliarios en quiebra, etc.
Papel en el sistema financiero: Su función principal es sanear los balances de los bancos comerciales al liberarles de estos activos problemáticos. Al vender estos activos al «banco malo» (generalmente a un precio inferior a su valor nominal, pero superior al de mercado en ese momento), los bancos mejoran su solvencia, recuperan la confianza y pueden volver a conceder crédito a la economía real. El «banco malo», por su parte, se encarga de gestionar y tratar de liquidar o vender dichos activos a lo largo del tiempo, intentando recuperar el máximo valor posible (idealmente, venderlos a un precio superior al que los compró, aunque no siempre se consigue).
Las acciones preferentes (o participaciones preferentes) son valores complejos emitidos por una entidad (generalmente un banco, caja de ahorros o gran empresa) que se sitúan en un punto intermedio entre la deuda y las acciones ordinarias. Quien las compra realiza una inversión a cambio de una rentabilidad generalmente fija (o variable pero predeterminada) que suele ser superior a la de los depósitos tradicionales.
Sin embargo, implican riesgos significativos para el inversor:
En España, su comercialización masiva a clientes minoristas sin la debida información sobre sus riesgos generó gran controversia tras la crisis financiera.
El entorno de la empresa es el conjunto de factores, fuerzas y circunstancias externas que rodean a la organización y que pueden afectar, directa o indirectamente, a su desarrollo, funcionamiento y capacidad para alcanzar sus objetivos. Este entorno es complejo y dinámico, y puede presentar tanto oportunidades como amenazas para la empresa.
Las empresas deben analizar continuamente su entorno para definir sus estrategias, adaptarse a los cambios y poder competir eficazmente.
El análisis PEST (o PESTEL, añadiendo factores Ecológicos y Legales) es una herramienta para analizar el entorno general. Examina cuatro tipos de influencias clave: