Portada » Español » Comunicación y Lenguaje: Elementos, Funciones y Evolución del Español
Dubois define la comunicación lingüística como el intercambio verbal entre un hablante que produce un enunciado y otro hablante que lo recibe. Añade que «la comunicación es el proceso en cuyo transcurso la significación que un interlocutor asocia a los sonidos es la misma que la que el oyente asocia a esos mismos sonidos.»
Quilis, por su parte, afirma que la comunicación es la respuesta discriminatoria de un organismo a un estímulo.
La comunicación se compone de seis elementos básicos:
La comunicación tiene varias fases: dos psíquicas, dos fisiológicas (en los órganos articulatorios del hablante y los órganos del oyente, que es la fase productora, y la fase inversa llamada fonética auditiva), y una fase acústica, constituida por las ondas acústicas complejas de cada sonido.
El signo lingüístico.
Saussure estableció las bases de la lingüística moderna, definiendo las lenguas humanas como conjuntos sistemáticos de signos que permiten la comunicación.
Lo que hace original a cada lengua es la forma. Esto diferencia la competencia comunicativa de la lingüística.
Se refiere al conocimiento de una lengua, incluyendo sus componentes fonológicos, sintácticos, semánticos, léxicos y morfológicos. Según Gambert, existen áreas diferenciadas en cada competencia:
En resumen, la competencia lingüística es el hecho de saber la lengua en todos sus niveles.
Se entiende como la suma de varias competencias:
Es mucho más completa que la lingüística, ya que la lingüística es parte de la comunicativa. La clave de la competencia comunicativa es saber adecuar el discurso al público al que va dirigido.
Funciones del lenguaje.
Antes de nada, hemos de aclarar que el lenguaje es la capacidad humana de comunicarse mediante un sistema de signos sonoros articulado.
La primera función es la representativa, que es utilizada cuando pretendemos transmitir un informe sin hacer valoraciones ni pretender una reacción en nuestro interlocutor. Ej.: Está lloviendo; la capital de Marruecos es Rabat. Esta función se centra, dentro de los elementos de comunicación, en el mensaje, aunque hay lingüistas que opinan que se centra en la unidad exterior o referente.
Función expresiva o emotiva. Usada cuando el emisor, que es el elemento en el que se centra esta función, pretende dar cuenta de su estado físico o anímico.
Función apelativa o conativa, mediante el uso de esta función, pretendemos provocar una reacción en el receptor. Que es el elemento fundamental, queremos que haga algo o lo deje de hacer. Ej.: Abre la ventana.
Función fática o de contacto. Se usa para comprobar el canal, que es el elemento fundamental, sigue abierto, es decir, si la comunicación es físicamente posible. Ej.: ¿Me oyes?
Función poética o estética. Se utiliza cuando se pretende crear belleza usando el lenguaje. Al igual que la representativa, su elemento fundamental es el mensaje, pero al contrario que esta, se fija en la forma, no al contenido. Ej.: Novelas, poesías etc.
Función metalingüística es usada cuando se utiliza la luenga para hablar de la misma lengua u otra lengua cualquiera. El elemento fundamental de esta función es el código, es decir, en la lengua respectiva de la que se habla.
Las tres primeras, son muy comunes en cualquier acto de conversación. A las tres últimas se les llama funciones lingüísticas. Casi cualquier acto de comunicación alberga más de una de las funciones.
El pre-lenguaje es una forma de comunicación rudimentaria que aparece en los bebés y son la base del lenguaje.
El pre-lenguaje es un conjunto de cualidades, que son también capacidades neurofisiológicas. Percepción, motricidad, imitación y memoria. El lenguaje es una capacidad extremadamente desarrollada en el ser humano, que tiene un sistema de comunicación más especializado que el de los animales. Es una capacidad a la vez física y psicológica, pertenece tanto al dominio individual como al social, y capacita al ser humano para abstraer, coceptualizar y comunicar. En este lenguaje, el que se compone de lengua y habla. En definitiva, pensaremos mejor si nuestro lenguaje es mejor, hablaremos mejor si nuestro lenguaje es mejor. Si no dominamos el lenguaje no podemos pensar con claridad, ni podemos expresar lo que pensamos.
La lengua tiene una naturaleza esencialmente oral, sin embargo al ser perpetuada por la escritura se convierte en idioma, en medio de comunicación para los ilustrados, y en medio de marginación para los analfabetos. La lengua permite la comunicación entre los miembros de una comunidad idiomática, que puede o no coincidir con los límites geográficos o políticos de un estado.
El habla es el uso individual que cada persona hace de la lengua, en su caracterización, intervienen la edad, el sexo, el estado de ánimo, la profesión y otros factores. Hay notables diferencias entre el habla de un hombre y una mujer etc.
Debemos distinguir el componente individual del habla y el componente social de la lengua y que no se puede concebir el uno sin el otro.
Lengua: Según el DRAE en su 23º edición, es el sistema de comunicación y expresión verbal, propio de un pueblo o nación o común a varios. Para el diccionario del español usual de México, es el sistema de signos fónicos o gráficos, con el que se comunican los miembros de una comunidad humana.
Idioma: Es una lengua que tiene un corpus literario o que se utiliza en foros nacionales e internacionales. Tiene un gran número de hablantes o que se ha estandarizado de manera formal. También tiene que ver en la diferencia entre lengua e idioma los conceptos de nación o pueblo.
DRAE: lengua de un pueblo o nación o común a varios.
Dialecto: Un sistema lingüístico derivado de otro; normalmente con una concreta limitación geográfica, pero sin diferencias suficientes frente a otros de origen común. Diccionario del español usual de México: manera de hablar una lengua, un grupo de personas, comunidad, o hablantes de una región; ej. : Habla de ciudad de México, habla de Bajío etc. son dialectos del español.
Habla: Según el diccionario del español usual de México, es una manifestación completa de una lengua, por un individuo o una comunidad. Según el DRAE, es un sistema lingüístico de una comarca, localidad o colectividad, con rasgos propios dentro de otro sistema más extenso.
Según los lingüistas, la lengua es un sistema lingüístico que se caracteriza por estar plenamente definido, por poseer un alto grado de liberación, por ser vehículo de una cultura diferenciada, y, en ocasiones, haberse impuesto a otros sistemas lingüísticos.
Dentro de la naturaleza, también hay tipos de lenguaje:
Lenguaje táctil. Se desarrolla con las manos y con los pies y se dan sobretodo en los primates. Entre sus funciones están las de tranquilizar, mostrar amistad, etc.
Lenguaje químico. Depende del sentido del olfato y del sentido del gusto. Las sensaciones químicas pueden viajar mucho gracias al viento. Estas sustancias químicas son las feromonas. La función principal del lenguaje químico es la atracción sexual.
Lenguaje acústico. Consiste en la emisión de ondas sonoras, que pueden variar de altura e intensidad. Son muy útiles, ya que tienen la capacidad de viajar en todas direcciones, y el receptor las localiza con mucha facilidad. Ej.: monos aulladores, sapos. Los sonidos de baja frecuencia viajan más que las de alta frecuencia.
Lenguaje visual. Consiste en que los animales cambien de color, según sus necesidades primarias, incluso pueden encenderse, o apagarse.
Lenguaje de vibraciones. Actúan sólo en distancias muy cortas, y lo emplean animales como las arañas o los cocodrilos.
Lenguaje eléctrico. Sobretodo usado por peces, con algunas excepciones. Pueden atravesar objetos sólidos, y son usados para defenderse, orientarse y para el cortejo.
La lengua oral tiene un número limitado de receptores. Permite la modificación inmediata del mensaje y está sujeto a interrupciones. Esto es debido al feed-back. El lenguaje oral siempre se refuerza con pausas, cambios de ritmo etc., con muchos códigos extralingüísticos. No demanda una excesiva organización gramatical. Siempre tiene lugar en un contexto situacional. En el contexto situacional está gran parte de la lengua oral. Entre el contexto y los códigos extralingüísticos sumarían gran parte del mensaje (60%). La lengua oral es mucho más dinámica e innovadora que la lengua escrita (aunque la lengua escrita, incorpora los neologismos). La lengua oral no permite auto analizar nuestro propio pensamiento.
La lengua escrita no es sucedánea de la lengua oral. Se adquiere mediante una instrucción especial, necesita un largo proceso de formación, entrenamiento y práctica. Es un proceso artificial, así que no hay manera de escribir “naturalmente”. La lengua escrita tiene unas reglas definidas y por lo tanto definibles. Exige una planificación, se debe considerar no sólo lo que se va a decir, sino cómo, para qué, y a quién se va a decir. Es lo que se llama técnicamente fases de invención, redacción de borradores, evaluación, revisión y edición. Por lo tanto, está mejor estructurada que la lengua oral. Por eso, nadie puede pretender escribir como habla. Es mucho más conservadora, menos dinámica y más selectiva para introducir neologismos. Lo más importante de la lengua escrita es la capacidad de permitirnos analizar nuestro propio pensamiento. Y por lo tanto sólo ella nos conduce a la conquista de nuestro propio yo. La escritura tiene mucho que ver con la liberalización del hombre sin ella, se es un marginado social.
El período pre-romano:
Los íberos, tenían una lengua que tenía mucho que ver con el eusquera, y se situaban en el levante y en ambos lados de los pirineos. Se cree que su cultura viene de África.
Los tartesios eran más civilizados, estaban más influídos por la cultura oriental, y estaban en el sur de Portugal y parte baja de Andalucía. Pervivieron más que los íberos.
Los fenicios, vinieron de Cartago, y fundaron su primer asentamiento en el S. XII antes de cristo. Fundaron Gadir (Cádiz), Malaka (Málaga). Los fenicios ganan a los griegos, que se ven obligados a ir al levante, donde fundaron Lucentum (Alicante). Ambos desarrollan el arte ibérico.
A los ligures les quedó un espacio, que es el centro y el noroeste de la península. Se cree que ellos provienen de la Provenza italiana, porque sus sufijos fueron encontrados en diversas toponimias de distintas partes de España. Ej.: Barcelona.
Los celtas invadieron la península en el siglo VII a.C. Proceden del sur de Alemania. Se establecen en Galicia, norte de Portugal y sierra morena. Más tarde conquistan el bajo Aragón. Se mezclan con los íberos, y forman la llamada raza celtibérica que dan nombre a muchísimos topónimos. Casi todos tienen nombre de guerrero. Sego -> Victoria… Segovia.
No podemos hablar de una unidad lingüista antes de los romanos.
La única que se conserva es el vasco, cuyo origen es muy discutido:
– Es de procedencia africana, porque presenta coincidencias importantes con el bereber, cusita o el sudanés.
– Originario de la región del Cáucaso. Presenta algunas similitudes sintácticas con las lenguas del Cáucaso actuales.
– Origen mixto: Por un lado, de estructura y fonética caucásica, que incorpora numerosos elementos camíticos, de las lenguas ibéricas, celtismos y abundantes latinismos.
A partir del siglo III antes de Cristo, los romanos emprenden la conquista de Hispania, En 206 a.C. aunque años antes, ya había romanos en el territorio para poder atacar. La pacificación completa fue cuando augusto sometió a los cantabrones y a los astures. Lo que consiguió Roma, fue evitar las luchas entre territorios de lo que ellos llamaron Hispania. Impone su cultura, que traía los conceptos de derecho y ciudadanía. Eran los maestros de la administración. Transforman el modo de vida de los habitantes trayendo la forma de vida latina, que ha su vez era herencia de la griega. Por supuesto, traen el latín, que se impuso rápidamente como instrumento de comunicación en todo el imperio. Los topónimos revelan que hubo mezcla entre la lengua latina y la celta y vasca.
El latín es un idioma claro, preciso, enérgico, práctico y ordenador. Adquirió belleza, cuando tuvo contacto con la lengua griega. Hispania fue testigo del florecimiento de la literatura latina que imitó, haciéndolos suyos, los modelos de los grandes maestros griegos. Así, muchas palabras de origen griego, han pasado a nuestro idioma por medio de la imposición del latín. Poesía, filosofía etc. El latín viene de las lenguas europea, como las célticas, germánicas, itálicas, eslavas, y escandinavas. No provienen de las lenguas indoeuropeas el finés, etrusco, lapón, estoniano, húngaro y vasco.
Hay dos tipos de latín, el latín culto y el latín vulgar. El primero era utilizado por escritores y el vulgar era utilizado por el pueblo de Roma. Finalmente, el vulgar fue el que se impuso en las colonias. En cada provincia había diferentes modalidades de la lengua, dependiendo de su cercanía o lejanía de la metrópolis.
Este latín vulgar, también se ve influido por el euskera, (farina -> harina), las lenguas germánicas (Burgos), y sobretodo, por el árabe (alcalde, alcantarillas). Las mayores influencias árabes fueron sustituir la s por la j, (jabón) y con poner la í final para formar sustantivos.
El primer nombre de la lengua es el castellano, porque nació en Castilla. La polémica empieza en las zonas bilingües de España, que dicen que su idioma es parte del español. Lo políticamente correcto en las comunidades bilingües es decir castellano en vez de español.
El desarrollo del español se puede agrupar en tres etapas:
– El español medieval (S.X – S.XV). Hacia el siglo X existían cuatro dominios lingüísticos que podían fijarse por el comportamiento de la vocal breve tónica latina. Por ejemplo, Porta, en castellano se convirtió en puerta, en leonés y aragonés en puorta, y en el mozárabe en puarta. En términos generales se mantuvo la o del latín en la lengua del extremo occidental de la península, como es el caso del gaélico-portugués, y también se mantuvo en el catalán, que ejercería su influencia en todas las tierras mediterráneas fruto de la expansión política. Al siglo X pertenece el primer documento escrito (glosas silenses y glosas emilianenses), que son anotaciones al margen en romances, en textos en latín que ya no se entendían. Las primeras se escribieron en el monasterio de Silos, y las segundas se escribieron en el monasterio de San Millán de la Cogolla. En el sur se seguía hablando mozárabe, hablado por las familias hispanas que seguían en este territorio y heredaban la lengua. Se mantuvo sin grandes alteraciones, bien por afirmación cultural que marcara la diferencia entre árabes y judíos, bien por falta de contacto que se estaban desarrollando en los territorios cristianos. En mozárabe se escriben los primeros poemas líricos romances (las jarchas, que son composiciones escritas en alfabeto árabe o hebreo, pero que transcritos corresponden a una lengua arábigo-andaluza). El primer paso para convertir el castellano en el idioma oficial lo dio Alfonso X el Sabio, que mandó a escribir en castellano y no en latín, todas las grandes obras históricas astronómicas y legales de las que se tenían conocimiento, para poderlas difundir. Entran los galicismos a causa del camino de Santiago.
– El castellano moderno (S.XVI – S.XVII finales), comienza con la publicación de la primera gramática castellana de 1492 de don Elio Antonio de Nebrija. A esta época pertenece el cambio de las consonantes que altera y consolida el sistema fonológico del español. La iglesia en esta época tiene más poder que el propio estado. Se estabiliza el sistema de las sibilantes (s,c,ç,z.). Desaparece el sonido aspirante de la h y el de la x como j. Se elimina la distinción entre b y v. El verbo haber se convierte en auxiliar, la sintaxis empieza a tener un orden determinado y se crean muchos neologismos debido al creciente imperio español. Es esta época se publica el diccionario de Alcalá, en la complutense, y también apareció la Minerva, una gramática normativa y descriptiva, hecha por Francisco de las Brozas. En 1611, se produce la publicación de El tesoro de la lengua española o castellana, hecho por Sebastián de Covarrubias, que es el primer diccionario que contiene cuanta información sincrónica, e histórica había disponible en el momento de su publicación. Todo el mundo quería hablar español, era la lengua diplomática de esa época, hasta el S. XVIII. Llegó a su esplendor literario con el Siglo de Oro. Aunque es el idioma dominante, siguen cogiendo palabras de otros idiomas, sobretodo del italiano, del francés y americanismos.
El español contemporáneo empieza en 1713, cuando se fundó la Real Academia, hasta hoy. En el S. XVIII, los cambios fonéticos y fonológicos, incluido el sistema verbal actual, estaba hecho. La Academia lo que hizo fue fijarlo, para que no hubieran más vacilaciones. Para ello, publica una ortografía, que se publicó en 1743. Se mantuvo sin cambios hasta la primera mitad del siglo XX, cuando por influencia de la Generación del 27, se incorpora un gusto neoclásico a sus escritos que violentaron un poco el orden sintáctico establecido. Hoy en día la Real Academia española se pone de acuerdo con todas las demás, academias del idioma. Lo más destacable de esta etapa es la sustitución de muchos tiempos verbales por perífrasis (voy a ir) aportando pequeños matices semánticos. Otro cambio importante han sido los neologismos relacionados con las innovaciones técnicas y los avances científicos, excepto los neologismos anteriores a la primera mitad del siglo XX, que contienen raíces clásicas del latín o del griego, tienen tendencia a ser poco castellanizadas; a ser calcos del inglés. Además, también se utilizan de forma excesiva las siglas. Un reto que tiene el español es la difusión de cualquier descubrimiento o investigación que se realice por el mundo hispanohablante, se difunda en español, y no en inglés, como se hace actualmente. Somos la tercera lengua en número de hablantes, y la segunda en números de publicaciones científicas, por detrás del inglés.
Existen varios tipos determinados de variaciones de la lengua:
Variedades diatópicas: Que son todas aquellas que relacionan al hablante con su origen territorial.
Variedades diastráticas: Son las relacionadas con la distribución y estratificación social de los hablantes. También son llamadas sociolectos, y están motivadas por una variedad de factores:
1 -> Hábitat. Cabe distinguir entre hábitat rural y urbano. EL rural es mucho más relajado en la entonación se cuida menos en la pronunciación, y es mucho más conservador en el léxico. El urbano se caracteriza por ser más renovador y estandarizador.
2 -> La edad. No hablan igual los mayores que los jóvenes.
3 -> El sexo. No es que hombres y mujeres hablemos de formas distintas sino que la sociedad ha establecido unos léxicos más que otros. Los hombres saben más palabras de deportes y las mujeres más de sentimientos.
4 -> La profesión. Las distintas profesiones contribuyen a diferenciar el uso de la lengua especialmente en los niveles léxicos y semánticos.
5 -> El nivel sociocultural del hablante es el factor que más contribuye a un uso distinto de la lengua.
Variedades diafásicas: Tienen que ver con el individuo y por lo tanto son el uso individual que el hablante hace de su lengua según las circunstancias adoptando por uno u otro registro lingüístico. Estas variedades vienen determinados por otros factores:
1 -> Canal utilizado. El emisor no se expresa igual de forma oral que de forma escrita.
2 -> Tema de discurso. No es lo mismo la exposición de un contenido poético o filosófico, que habla de una noticia deportiva.
3 -> La relación entre el emisor y el receptor también determina el registro lingüístico que se va a utilizar. Habrá un registro formal cuando la relación entre el emisor y receptor sea de respeto y habrá un registro informal cuando la relación sea de confianza.
4 -> La personalidad del hablante; su formación, y su cultura favorece o entorpece la lección de un registro idiomático. Hay que tener en cuenta que sólo las personas con un dominio aceptable del código son capaces de cambiar de registro idiomático.
Niveles del lenguaje
Nivel culto: En este nivel, pueden expresar cualquier contenido con corrección, vocalización precisa, entonación correcta. Coherencia en su discurso y riqueza en su vocabulario. Es el registro culto el que permite dar unidad y uniformidad del idioma.
Nivel estándar: Es una variante del código culto, respeta las normas con corrección, pero puede transgredir a veces el código. P. Ej. No todos saben los gentilicios… las transgresiones son leves.
Nivel vulgar: Se utiliza cuando el hablante debido a una deficiente escolarización incurre en la transgresión del código o no es capaz de cambiar el registro. Suele coincidir con una clase social baja o población rural. Las características peculiares de este nivel son los vulgarismos, las oraciones cortas, y una pobreza de vocabulario general.