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12.2 ISABEL II: LAS REGENCIAS
Al morir Fernando VII, Francisco Cea Bermúdez presidió el gobierno El queria mantener una política dura para introducción de reformas poco a poco y poder aumentar número de partidarios del carlismo. Pero , durante su gobierno, se realizaron algunas reformas administrativas y en concreto el ministro Javier de Burgos, dividió España en las actuales provincias que quedaron bajo la autoridad del “Gobernador civil provincial”. Sin embargo el bando Isabelino, necesitaba el apoyo de los liberales para poder derrotar a los carlistas, de ahí, que algunos generales como (Gaumet o Genaro de Quesada), presionasen sobre la reina para que encargase el gobierno, al liberal Francisco Martínez de la Rosa.
*Francisco Martínez de la Rosa: intentó establecer una monarquía constitucional pero debido a las dificultades que entrañaba hacerlo en medio de guerra civil, se decidió por elaborar en 1834 el Estatuto Real. El Estatuto Real puede definir una carta otorgada. Las cortes quedaron divididas en 2 cámaras. La cámara del estamento de los procedes del reino y la cámara del estamento de los procuradores del reino.
*El rey: Sigue disponiendo de amplísimos poderes y se reserva toda la iniciativa legal.
*En cuanto a las Cortes: su misión es la de asesorar al rey y aprobar la legislación a estancias de lo propuesto por el rey. Además tiene el derecho exclusivo de aprobar los impuestos.
En verano de 1836 se multiplicaron los motines y sublevaciones de la milicia nacional por diferentes provincias. También se sublevaron los sargentos de la Granja de la Reina, y presionada por estos nombró un nuevo gobierno y presionado por Calatrava reconoció la constitución de 1812 que volvió a entrar en vigor. El nuevo gobierno también volvió a poner en vigor antiguas leyes aprobadas por los liberales durante el trienio constitucional, como la ley de libertad de imprenta, la ley de la milicia nacional o la ley de ayuntamientos. El gobierno de Calatrava continuó con la política anticlerical desarrollada en los años anteriores.
*El anticleralismo: se vio reforzado por el hecho de que una parte importante de los frailes apoyaban la causa del carlismo. Así en 1835 el Conde de Toreno “José María Queipo Arellano” expulsó a los jesuitas. En 1836 Mendizábal aprobó el decreto de desamortización de los bienes eclesiásticos. En 1837 Calatrava aprobó otro decreto suprimiendo el diezmo y cerrando nuevos conventos.
El gobierno de Calatrava también intentó solucionar el problema constitucional aprobando una nueva constitución que trató de estabilizar la vida política muy alterada por los constantes enfrentamientos entre el partido moderado y el partido progresista, así esta constitución tiene un carácter eclético, acogiendo algunos de los postulados ideológicos del partido moderado y otros del partido progresista.
*La constitución establece: que la figura del rey es inviolable e irresponsable políticamente, siendo responsable los ministros, a quienes el monarca nombra y separa. Además el rey tiene iniciativa legal junto con las cortes, al residir la soberanía en el rey y las cortes. También por concesión hacia los moderados se estableció un parlamento bicameral, estando constituido por un congreso y un senado cuyas funciones son las de legislar con el rey, controlar al gobierno, etc.
–El congreso: se elige por sufragio censitario directo, de acuerdo con una futura ley electoral que establece los requisitos económicos para votar y ser elegido.
–El senado: se elige por sufragio censitario indirecto, y se renueva parcialmente en cada elección para encontrar una solución de compromiso entre los moderados que defienden el carácter vitalicio del cargo y los progresistas que defienden su reelección. Así el senado es permanente pero el cargo de senador no. La constitución también recoge que la soberanía reside en la nación. Además reconoce la milicia nacional y defiende una serie de derechos individuales como la libertad de expresión y los jurados para los delitos de imprenta. Igualmente se establece en cuanto a la administración local que las diputaciones y los ayuntamientos sean elegidos por sufragio censitario directo de acuerdo a una futura ley.
El gobierno de Calatrava no consiguió acabar con la guerra carlista. En 1837 Espartero entró con sus tropas en Madrid e impulso un cambio de gobierno (Pronunciamiento de Pozuelo de Alarcón) desde entonces la inestabilidad política se acentuó sucediéndose en poco tiempo varios gobiernos. Esta inestabilidad entre el partido progresista y el partido moderado. Al final la reina nombro a Modesto Cortaza presidente del gobierno, estallando inmediatamente una sublevación, sin embargo Espartero se negó y a la vez publicó un manifiesto en el que criticaba el favoritismo de la regencia por el partido moderado. Además le recomendaba que disolviese las cortes, cambiase el gobierno y derogase la ley de ayuntamientos recientemente aprobada. Esta ley de acuerdo con el ideario político de los moderados, establecía que solo los concejales fuesen elegidos mientras que los alcaldes serian designados por el gobierno. Por el contrario el partido progresista defendía que tantos los alcaldes serían designados por el gobierno. Por el contrario el partido progresista defendía que tantos los alcaldes como los concejales fuesen elegidos. Tras la sublevación la Reina se vio obligada a nombrar a Espartero presidente del gobierno.
Este presentó su programa político a María Cristina y renunciar a su cargo de regente y se marchó a Francia quedando espartero como regente de Isabel II.
*LA REGENCIA DE ESPARTERO (1840-1843)
Como regente Espartero actuó de acuerdo a los principios ideológicos del partido progresista, al igual que Mª Cristina, ya que lo hizo de acuerdo a los principios ideológicos del partido moderado. Espartero en un principio tuvo un enorme respaldo popular por haber conseguido poner fin a la guerra civil carlista. Además también contó con el respaldo del partido progresista.
A lo largo de 1842 comenzó a declinar su prestigio: 1º se enfrentó con la burguesía catalana al aprobar algunas concesiones aduaneras a favor de los tejidos ingleses. Además influyó en su caída los ataques que comenzó a recibir por parte de algunos dirigentes de su propio partido “El progresista” por su autoritarismo.
Espartero, para consolidar su posición disolvió las cortes y convocó elecciones. En las nuevas cortes los progresistas protestaron por los fraudes electorales. Como consecuencia de ello comenzó a formarse una coalición que tenía como objetivo la destitución de Espartero. En un principio en la iniciativa correspondió a los progresistas. En 1843 se sublevó la milicia nacional de Málaga. Desde allí la sublevación comenzó a extenderse por el resto de España. Más tarde intervino el partido moderado. El General Narváez se sublevó en Valencia y desde allí se dirigió a Madrid. En Torrejón de Ardoz se produjo un simulacro de combate. Tras el simulacro Narváez entro triunfante en Madrid y Espartero se retiró a Cádiz y desde allí se exilió a Inglaterra.
Durante los últimos meses de 1843 y primeros meses de 1844 se sucedieron varios gobiernos, aunque el poder estaba de hecho en manos de Narváez. En eses periodo, lo más destacado fue el adelantamiento de la mayoría de edad de Isabel II para no tener que nombrar a otro regente.