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4. LA ESTRUCTURA DEL NUEVO ESTADO
4.1. Las Leyes Fundamentales
Son unas leyes políticas básicas que organizaban jurídicamente el Estado franquista. Se inició en plena Guerra Civil y concluyó en la promulgación de la Ley Orgánica del Estado.Cuando el Caudillo designó su primer gobierno el primer rasgo de este fue la concentración de poderes. Franco era jefe del Estado, del partido y Generalísimo de los tres ejércitos. También era el jefe de gobierno. En 1938 también se estableció el Fuero del Trabajo, una primera Ley Fundamental de clara inspiración fascista y basada en la Carta del Lavoro italiana.En 1945, Franco se vio forzado a promulgar nuevas Leyes Fundamentales que le congraciasen con los aliados. Se instauró el Fuero de los Españoles que podía quitarla cuando quisiera y que pretendía aparentar que en la España de Franco también los ciudadanos gozaban de unas ciertas libertades políticas y la Ley de Referéndum Nacional.En 1947, la Ley de Sucesión permitió a Franco designar a su sucesor a título de Rey. En 1958, se promulgó la Ley de Principios del Movimiento Nacional, que reafirmó al Movimiento Nacional como único partido e instituyó que todos los cargos civiles o militares pasarían a ser miembros del Movimiento.
4.2. La democracia orgánica
El franquismo rechazaba el sistema democrático. Para la construcción del nuevo Estado se inspiró en el Estado corporativismo que organizaba la participación popular a partir de: la familia, el municipio y el sindicato. El sistema fue denominado democracia orgánica.La representación popular se reguló a partir de la Ley Constitutiva de las Cortes. Todos sus representantes, llamados procuradores eran designados por el poder y entre ellos se encontraban los ministros, los miembros del Consejo Nacional del Movimiento y de la Organización Sindical.También había procuradores por razón de su cargo, los alcaldes de las mayores ciudades, los rectores de las universidades y los representantes de la jerarquía eclesiástica. Se trataba de una representación corporativa por tercios. A partir de la Ley Orgánica surgieron los procuradores por el tercio familiar.Estas Cortes franquista no resultaban elegidas democráticamente ya que el gobierno decidía que proyectos de ley podían asar a las Cortes y cuáles eran directamente aprobados por él (decreto-ley). Se trataba tan solo de un órgano de colaboración con la jefatura del Estado.En el plano territorial, el poder del gobierno se transmitía mediante la institución de los gobernadores civiles. Estos eran jefes provinciales del Movimiento. En cada provincia se instituyó un gobernador militar y se restableció la estructura militar de las Capitanías Generales que había sido suprimida durante la República. En los ayuntamientos, los alcaldes, que eran también jefes locales del Movimiento, eran elegidos directamente por el gobernador civil.Otro poder del Estado fueron los Sindicatos Verticales. Destaca también la Ley de Unidad Sindical que establecía que empresarios y trabajadores se integrarían en un mismo sindicato por ramas de producción.El Estado ejercía una férrea tutela sobre la clase obrera y dictaba las condiciones laborales anulando toda posibilidad de negociación colectiva e ilegalizando la huelga.
5. AUTORQUÍA Y RACIONAMIENTO
5.1. La autarquía y sus efectos
Uno de los principales objetivos de la primera etapa del franquismo fue conseguir la autosuficiencia económica (autarquía).
La política autárquica tuvo tres grandes ámbitos de actuación. El primero fue la reglamentación del comercio exterior. Las importancias y las exportaciones pasaron a estar completamente controladas por el Estado y era necesaria una autorización administrativa para realizarlas. Con esta medida se limitaban los intercambios con el exterior, reduciendo las importaciones. El resultado de esto fue el encarecimiento de los productos y una gran escasez de bienes de consumo. El desabastecimiento también afectó a las materias primas y a la producción industrial.El segundo ámbito de actuación fue el fomento de la industria con el fin de asegurar la independencia militar y política del nuevo Estado. Una serie de leyes y medidas favorecieron la creación de empresas públicas. También se fomentó el desarrollo de las industrias de bienes de equipo, que recibieron una considerable ayuda política. Se nacionalizaron todas las compañías de ferrocarriles y se creó la Red Nacional de Ferrocarriles Españoles (RENFE). En 1945 se procedió a la nacionalización de la Compañía Telefónica Nacional de España.Más adelante se fundó el Instituto Nacional de Industrial, destinado a promover la nueva política industrial. También impulsó la creación de empresas públicas cuyo objetivo era producir los bienes que el sector privado no fabricaba.El tercer ámbito del intervencionismo afectó al sector agrario, que vio como el Estado regulaba la producción, la comercialización, los precios y el consumo de la mayoría de sus productos. Los bajos precios oficiales provocaron un descenso de la producción. También disminuyó la productividad.El resultado de la política autárquica fue un profundo estancamiento económico caracterizo por el colapso del comercio exterior. Además supuso un freno a las tendencias modernizadoras de la economía española.
5.2. Racionamiento y mercado negro
La rígida reglamentación de la economía autárquica conllevaba el control del mercado por parte del Estado. Los productores agrícolas estaban obligados a entregar toda la producción a un precio de tasa y la Administración se encargaba de vender los productos al consumidor a un precio también regulado. El resultado fue el desabastecimiento generalizado de alimentos y el racionamiento de los productos considerados de primera necesidad, que se distribuían mediante una cartilla de racionamiento.La tasación de los precios de los alimentos por debajo de su valor comportó que muchos productores prefiriesen esconder la producción para venderla en el mercado negro, del cual obtenían unas ganancias más elevadas. Este afectaba a los alimentos, a las materias primas y a los productos industriales.
5.3. Unas duras condiciones de vida
Durante esta etapa el incremento de vida se incrementó más del 500% respecto a los precios anteriores a la guerra.El nivel de vida de la población disminuyó como consecuencia de la inflación y los bajos salarios. Más adelante se calcula que la renta por cápita real de los españoles descendió el poder adquisitivo de un trabajador.El hambre afectó a una parte significativa de la población y destaca la carencia de viviendas dignas. Se dice esto ya que se provocó un aumento del chabolismo.Se extendieron un conjunto de enfermedades ya erradicadas en décadas anteriores como la tuberculosis y la tasa de mortalidad alcanza un nivel alto. En estos años, el crecimiento vegetativo y la esperanza de vida se sitúo en 1945 en 47 años para los hombres y 53 años para las mujeres.
6. LA OPOSICIÓN: EXILIO Y RESISTENCIA
6.1. La trayectoria del exilio
En la fase final de la Guerra Civil, más de cuatrocientas mil personas comprometidas con la República abandonaron España y llegaron a Francia o huyeron hacia l norte de África. La inmensa mayoría fueron internadas en campos de refugiados o de concentración que las autoridades francesas habían improvisado en el sur de Francia para acogerla. Una buena parte de los refugiados regresó a España cuando el régimen prometió no proceder contra quienes hubiesen cometido delito, pero no se cumplió. Sin embargo alrededor de doscientas mil personas permanecieron el exilio o solo regresaron a España tras la muerte de Franco. El exilio supuso la pérdida de personalidades a nivel intelectual, científico y artístico.En Francia se estableció una importante colonia de emigrados españoles. Su situación se hizo más difícil durante la ocupación alemana de Francia, que implicó la persecución de los emigrados españoles, entonces, muchos optaron por emigrar a Gran Bretaña y América. Muchos exiliados que partieron hacia la América hispana se instalaron en México, Argentina o Cuba.En el exilio se desarrolló una parte muy importante de la oposición política al franquismo. Las instituciones políticas de la República siguieron funcionando en el exilio.La mayoría de las organizaciones políticas mantuvieron su organización en el exilio, aunque se caracterizaron por las divisiones internas y por el progresivo alejamiento de la realidad social en España. Así pues mientras algunas fuerzas defendían la necesidad de crear un frente único y desarrollar una labor diplomática para forzar la caída del franquismo, otras defendían la lucha guerrillera.
6.2. La evolución de la oposición
Al finalizar la guerra, los partidos y sindicatos opositores a Franco habían quedado desmantelados. Su reconstrucción fue lenta y dificultosa y tuvo que hacerse en la clandestinidad sorteado la implacable represión policial que desarticulaba su organización y encarcelaba a sus dirigentes.A grandes rasgos se puede dividir la actuación de la oposición durante el primer franquismo en tres etapas diferenciadas. La primera estuvo caracterizada por la limitada actuación de la resistencia interior. Lo más significativo fue la persistencia de una actividad guerrillera (maquis) protagonizada por un número de combatientes republicanos que no se resignaban a la derrota y mantuvieron focos de resistencia armada.La segunda fase estuvo profundamente condicionada por la victoria de los aliados, que creó unas condiciones internacionales favorable a una caída del régimen franquista. La posible intervención aliada en España provocó la creación de plataformas unitarias entre distintas fuerzas opositoras. Los sectores monárquicos más democráticas se organizaron alrededor de Juan de Borbón. Esta apuesta provocó la creación de la Alianza Nacional de Fuerzas Democráticas.Otras organizaciones apostaron por el intento de sublevación armada para acabar con el franquismo. Desde Francia organizaron partidos de guerrilleros y actuaron en zonas rurales y de montaña. La acción más espectacular fue la invasión del valle de Arán.Finalmente, se produjo una recomposición del movimiento opositor debido a la desmoralización que provocó la consolidación de la dictadura de Franco. A finales de 1948, ninguna potencia estaba dispuesta a colaborar en una estrategia para derribar a Franco, ni parecía posible que la guerrilla acabase con la dictadura. Como culminación de la crisis general del antifranquismo aparecía también el hecho de que el mundo político del exilio estuviera cada vez más distante de la realidad política española.
6.3. El resurgimiento de la conflictividad social
A finales de 1940 empezó a resurgir en España un tímido movimiento de protesta popular, protagonizado por las clases trabajadoras, contra las precarias condiciones de vida y trabajo. Estas primeras actuaciones obreras eran fruto de la incipiente reorganización de la izquierda. Por un lado el PCE abandono la lucha armada y se centró en la acción política clandestina, por otro lado, sectores obreros católico como la HOAC.Hubo conflictos laborales en el sector textil, el metalúrgico, el químico y el naval. Se llevó a cabo una primera huelga general en Manresa y una huelga general en el País Vasco. La acción reivindicativa de mayor trascendencia popular fue quizá la huelga de tranvías. El incremento de 20 céntimas en el precio del billete de tranvía provocó un boicot generalizado de la población. Destacó también la aparición de las primeras revueltas estudiantiles.