Portada » Historia » Artigas renuncia al cuerpo de blandengues
En el origen de nuestra formación social, hay un conflicto étnico, que consistió en la imposición de la civilización occidental en pueblos americanos. Hubo intensas luchas e insurrecciones de indios y negros esclavos, que resistían la dominación y fueron antecedentes importantes de la revolución independentista.
El legado de los pueblos originarios, aquellos que ocupaban el continente americano antes de la conquista europea, sobrevive en nuestra cultura. Consideramos también, el aporte social de los africanos introducidos forzosamente, y sus descendientes.
Los indios, subsisten como comunidades con su propia lengua y tradiciones. De ellos, provienen nuestras costumbres, saberes y creencias, nuestra cultura en términos generales.
Según José María Rosa, cuando los españoles se adueñaron de nuestras tierras, los mestizos eran la capa de la sociedad americana, y debajo de ella sobrevivió la masa indígena sometida, y otros pueblos bravíos que resistieron la conquista. Agrega que si bien los españoles impusieron su religión, lenguaje, costumbres, y organización política, persiste la manera de ser y pensar aborigen, y hasta los mismos españoles, adoptaron modalidades de distinto tipo, contra quienes combatían.
Podemos caracterizar y clasificar en tres áreas, donde prevalecieron las culturas indígenas más importantes:
Dominación inca, que impuso la lengua Quichua. Entre los pueblos agricultores mas avanzados estaban los Diaguitas, o calchaquíes que fueron sometidos por los españoles.
En la zona cuyana, habitaban los huarpes, y en Córdoba los comechigones.
Se difundió la encomienda, por lo cual las tribus quedaban bajo la protección del encomendero.
En el Alto Perú se aplicaba la mita, donde cada comunidad estaba obligada a suministrar temporariamente trabajadores para las minas.
Se extendía sobre esta zona la cultura Guaraní. Las misiones jesuitas los incorporaron en un conjunto de aldeas y estancias, donde se capacitaban en la elaboración de artesanías. La provincia de Las Misiones, bajo un sistema de autogobierno que impedía el ingreso de autoridades virreynales, mantuvo su identidad cultural.
Predominó la cultura de araucanos o mapuches, oriundos de Chile. En el área cordillerana los pehuenches, y en el espacio patagónico los tehuelches. Estos grupos se convirtieron en excelentes jinetes, cazadores y criadores de ganado.
El sistema de trabajo esclavista se reimplanto en America, como consecuencia de la conquista. Comenzaron esclavizando a indígenas y luego, africanos.
El rendimiento laboral de los negros, era superior al de los aborígenes, por factores culturales e inmunidad de enfermedades europeas. Se calcula que mediante el tráfico esclavista, introdujeron en América, más de 10 millones de personas de diversas etnias africanas.
Algunos lograban que su amo les de la libertad, pero el principal medio de evasión era por medio de la fuga o el cimarronaje. Los negros cimarrones eran bandas de salteadores o comunidades refugiadas.
En el continente americano, los grupos de negros esclavos y libertos, indígenas, mestizos o pardos, y españoles, experimentaron intercambios culturales. Tanto racial como cultural, el mestizaje en América alcanzo una magnitud sin precedentes.
Buenos Aires fue refundada en 1580 trayendo mestizos, que formaban el núcleo inicial de la población.
Desde tiempos de conquista los españole obtuvieron mujeres indígenas de diversas maneras: por secuestro, esclavitud, compra, regalo o prenda de amistad.
A partir de la incorporación de negros esclavos, abundo el contacto de mujeres blancas e indios, por la escasez de mujeres negras. Aunque aquellas a las que esclavizaban, debían complacer sexualmente a sus amos.
El derrumbe de la población indígena, fue provocado por el sometimiento, desarticulación de las culturas y poblaciones, y las nuevas enfermedades traídas de Europa y África. Esta serie de hechos, contribuyó el mestizaje. Además, Muchas mujeres indias, optaban por unirse con españoles, asegurando así, su descendencia.
En el siglo XVII la población indígena comenzó a recuperarse a la par de una inmigración europea. La dominación hispana fue estableciendo un régimen de castas, que INFERIORIZABA Y DIVIDIA A DIVERSOS GRUPOS ETNICOS “NO BLANCOS”.
En los países ibéricos, la condición nobiliaria se heredaba, (o se adquiría por meritos guerreros o civiles) y se vinculaba con la denominada “limpieza de sangre” que consistía en no haber ejercido profesiones viles o serviles.
Aparecieron entonces los estatutos de limpieza de sangre, y se expulso a los judíos de España y Portugal. Era requisito esencial el ser “cristiano viejo”, ya sea para acceder a profesiones, estudios, y carreras, o pertenecer a una familia distinguida. Además, era obligatorio probar la pureza de sangre mediante un expediente formal con testimonios verídicos, que aseguraran no tener mezcla de judíos, moros, gitanos, paganos ni otros “defectos” raciales o legados en su persona o generaciones. Cualquiera fuera el caso, era situarse un escalón mas arriba dentro de la jerarquía social.
La pureza de sangre, sirvió para que los sectores más numerosos, los mestizos, no ascendieran socialmente.
Existían dos categorías básicas:
El primer grupo incluía a españoles peninsulares y criollos, como así también a los mestizos legítimos. Dentro de este grupo, se destacaba la aristocracia colonial, familias españolas distinguidas, altos funcionarios, y criollos ricos, a los que se les llamaba “gente decente”.
El status legal del indígena establecía que fueran gobernados por sus propias autoridades, respetándose sus antiguas costumbres. Pagaban tributo, y realizaban trabajos forzados como en la mita. Estaban exentos del diezmo eclesiástico, alcabalas, y servicio militar. No podían usar armas de fuego ni espada, y eran considerados “gente sin razón”.
Los niños hijos de esclavas y blancos, quedaban sujetos a la esclavitud que heredaban de su madre. Aunque existían excepciones en las cuales los soldados podían comprar la libertad de sus hijos. O se concedía la libertad a los hijos nacidos de la unión de eclesiásticos y esclavas.
Se prohibía el acceso de mestizos a posiciones como protector de indios, notario público o cacique.
La iglesia necesitaba sacerdotes que hable el idioma nativo, por lo que el papa permitió la ordenación de “ilegítimos y mestizos”, pero Felipe II solo otorgo el beneficio, a aquellos mestizos que fueran LEGITIMOS.
Los MULATOS, ZAMBAS y NEGROS LIBERTOS, eran considerados de “nacimiento vil”, se les hacia pagar tributo, y estaba prohibido ingresar a gremios, andar por las calles luego de oscurecer, llevar armas, o tener sirvientes. No podían acceder a cargos públicos, solo la milicia, en unidades especiales.
LA POLITICA DE SEPARACION RACIAL CONTEMPLABA QUE CADA GRUPO HABITARA LUGARES DIFERENTES.
En el marco de la declinación del imperio español, en el siglo XVIII, ocupó el trono la casa del Borbón. En este periodo se creo el virreynato del Río de la Plata.
Las reformas borbónicas
Las reformas borbónicas trataron de revertir la decadencia del imperio español. El monopolio comercial era una traba para la evolución de las colonias. La riqueza monetaria que se obtuvo por medio de la extracción de oro y plata de posesiones americanas, fue utilizada para la importación de bienes de otros países de Europa.
Se dio importancia a fomentar la producción y liberalizar hasta cierto punto el comercio, por lo cual se debía eliminar restricciones e impuestos.
En 1767, fueron expulsados los jesuitas de España y las Indias, ya que era la única forma de eliminar el poderío económico y la influencia política e intelectual de esta orden.
Otra iniciativa fue crear el Virreynato del Río de la Plata, desmembrando el virreynato del Perú. Esto sucedió como una estrategia comercial y militar, y poder ejercer un control de lo que sucedía al sur del país, donde llegaban buques extranjeros apoderándose del territorio americano perteneciente a España, y sus recursos.
El nuevo virreynato, con capital en Buenos Aires, sustituía la ruta comercial del pacifico, por una comunicación atlántica mas directa.
Se reordeno la administración territorial, creando intendencias y gobernaciones.
En 1777, bajo el mando de Pedro Cevallos, se despacho desde España una expedición naval que ataco el sur de Francia, y demolió el puerto de colonia, instalando la capital en Buenos Aires.
El virreynato abarco 5 regiones: Intendencia de Bueno AiresParaguay Salta del TucumánAlto Perú
Buenos Aires, como puerto de entrada y salida del comercio con el alto Perú. Cevallos ordenó la liberalización parcial del monopolio comercial, aboliendo impuestos y reduciendo tasas aduaneras. En los años siguientes, el comercio se incrementó de manera notoria, y aumentaron también, las importaciones.
La ciudad creció, y el virrey Vertiz, que reemplazo a Cevallos, realizo mejoras urbanas. Facilito la circulación de periódicos, se aceleró la inmigración desde España, y se acrecentó la población porteña. Siglos anteriores el comercio estaba en manos de portugueses, pero ahora predominaban los españoles.
Este sector, era el que controlaba en gran medida el cabildo, y tenían su propia cámara gremial, el consulado, otorgada para patrocinar el progreso económico.
La rebelión de Túpac Amaru
La rebelión de Túpac Amaru, fue a causa de la reacción contra la explotación de los indígenas. Sometían a los indios a labores sobrehumanos, extenuantes, a tal punto de que solo un pequeño porcentaje volvía con vida a sus hogares.
Por este motivo, José Gabriel Condorcanqui, mayormente conocido como Túpac Amaru, organizo una gran insurrección en el cual se proclamaba un nuevo reino americano INDEPENDIENTE.
El acto inicial, fue el ahorcamiento del corregidor de la provincia de tinta, ANTONIO DE ARRIAGADA, a quien los conspiradores, habían secuestrado días antes. Contaban con una gran cantidad de mestizos, y además, solicitaron el apoyo de los españoles americanos, con el objetivo de eliminar los abusos contra los “naturales y criollos”.
Pero los ejércitos de habían mandado desde España, contaban con mayor armamento y disciplina militar, por lo que Túpac Amaru y su familia terminaron prisioneros y condenados a muerte.
El 18 de mayo de 1781, al inca, le cortaron la lengua y lo ataron a cuatro caballos para que tironearan de el y así descuartizarlo. Pero este ultimo atroz acto, no salio según lo planeado. Entonces lo asesinaron a hachazos, para luego quemarlo.
La independencia de las colonias americanas se produjo con la revolución burguesa mundial. Esta era según Eric Hobsbawm, una doble transformación,económicacon eje en Inglaterra, por la revolución industrial, y política, con centro en Francia.
Frente a la declinación de dos imperios: español y portugués, surgían como potencias Inglaterra, y Francia, que se disputaban la supremacía en el mundo occidental. Las colonias hispanoamericanas se vieron influenciadas por ideas de la revolución francesa, la libertad e igualdad, y los derechos del hombre y ciudadano. Y por parte de Inglaterra, las instituciones políticas y económicas. Los intereses económicos de las viejas y nuevas potencias, veían a las colonias americanas como una presa para la ambiciones de dominio. Inglaterra, quiso expandir su imperio utilizando una combinación de vieja y nuevas formas de colonialismo. Las invasiones inglesas, son un ejemplo del primer tipo, utilizando la violencia por medio de la conquista militar.
Gran Bretaña había practicado una política mercantilista y monopólica. Cuando ya no era útil, abandono la teoría mercantilista. A comienzos del siglo XIX, la revolución industrial de Inglaterra multiplicaba su capacidad productiva, pero se restringía el área donde podía colocar las mercaderías. Había perdido las colonias norteamericanas, y napoleón le privo de importantes mercados. Los ingleses aunque lograron destruir la flota francesa y española, napoleón tenían vastos recursos para amenazar invadir las islas británicas.
En 1806, Estados Unidos prohibió ciertas importaciones británicas y napoleón completaba el bloqueo continental, por lo cual se realizó la primera invasión inglesa al Río de la Plata.
El comodoro Popham, conocía el descontento de los patriotas sudamericanos con el dominio de la corona española. Por lo tanto, descarto la idea de conquistar toda Sudamérica, y busco puntos estratégicos para obtener ventajas comerciales. La ocupación de los puertos del plata, Buenos Aires, y Montevideo, era el modo de controlar el acceso a las minas alto peruanas, a chile y Perú.
Frente a la desorganización de la defensa militar, las tropas británicas tomaron fácilmente la ciudad de Buenos Aires. Pero el comportamiento de los ingleses defraudaría las expectativas de los criollos. Por este motivo se alzaron contra los invasores.
Tras la reconquista de Buenos Aires, la dominación por parte de la corona española quedo en tela de juicio, y a su vez, los patriotas buscaban independizarse.
En 1807, la segunda invasión logro tomar Montevideo, pero fracaso en ocupar Buenos Aires. Las milicias, mediante la ayuda de la ciudad, lograron demostrar nuevamente que no estaban dispuestos a aceptar el coloniaje Ingles. Además, se probaron a si mismos, que tenían las fuerzas suficientes para expulsar a los españoles.
A partir de entonces, la política británica, comenzó a orientarse a la penetración comercial, e influencia económica, mediante la diplomacia.
Moreno, Belgrano y Castelli, fueron los más patriotas dentro de la primera junta, que definieron los objetivos de la causa de la emancipación.
El plan de operaciones realizado por Moreno, llevaba a cabo la movilización del pueblo, por la independencia. Plantea la revolución continental y la insurrección de la banda oriental, donde Artigas y sus gauchos debían levantar a las masas rurales, y liberar a los indígenas, esclavos y mestizos, que formaban las denominadas «castas» en ese entonces.
Belgrano, descendiente por el lado materno de una mestiza, fue conmovido por los sucesos de la revolución Francesa. Con ideas de liberalismo revolucionario, se inclino por la forma monárquica y constitucional como más apropiada para gobernar a los pueblos americanos.
Fue propulsor de reformas como la distribución de tierras a los agricultores, la tecnificación de la producción, el fomento de las actividades manufactureras y comerciales, la enseñanza técnica, la organización del crédito publico, entre otras.
Explicaba las ventajas de una política industrial y proteccionista. Pensaba que la forma más ventajosa de exportar, era manufacturar las producciones. Además expresaba que la importación de mercancías extranjeras impedía el progreso, llevaba a la ruina la Nación y esto finaliza en una perdida para el estado.
A causa de la revolución, Belgrano tomo el papel de jefe militar y procuro llevar a cabo sus ideas de progreso social. Incorporo a los guaraníes en su ejército, y dicto un reglamento para los pueblos de las Misiones que les reconocía la igualdad civil y política, les eximia de tributos, prohibía castigos y mandaba distribuirle tierras gratuitamente y construir escuelas.
Su entrada en Paraguay fue rechazada y sufrió una derrota militar. Pero los jefes criollos dieron en 1811 su propio golpe contra el gobernador realista, declarándose independientes de la metrópoli e integrándose con las demás provincias del Río de la Plata.
Belgrano volvió entonces como diplomático y luego se hizo cargo del ejército del Norte donde venció a los Realistas en Tucumán y en Salta.
En 1816 se sanciono la independencia de las Provincias Unidas de Sud America. Belgrano propuso como forma de gobierno una monarquía atemperada que restableciera la dinastía Incaica. La mayoría de los diputados accedieron.
Belgrano alego la importancia de ganar a las masas indígenas para la causa. La soberanía de un descendiente de los incas, el más calificado, Juan Bautista Tupac Amaru, hermano del jefe de la rebelión. Seria acompañado por un régimen representativo, con una asamblea electiva y una regencia como poder ejecutivo.
San Martín apoyo la iniciativa, pero los representantes porteños buscaban posponer el debate. Podían aceptar una monarquía constitucional pero no bajo un rey indio.
No querían ampliar la base social de la revolución.
Artigas aprovecho sus conocimientos de baqueano y su experiencia como gendarme rural para organizar las guerrillas patriotas. Como líder de la banda oriental levanto un programa de confederación y fundo el movimiento popular del federalismo que se extendió por el interior de las provincias unidas.
El artiguismo fue una expresión radical de la revolución, apoyada en la movilización de milicias montoneras. Si estas, según vio Sarmiento, representaban la insumisión de la campaña ante la ciudad, frente al poder de las elites que anteponían sus intereses al proyecto independentista proclamado como causa común.
Artigas, héroe legendario entre los gauchos e indios de la banda oriental. Dedicado al contrabando de ganado en Brasil, burlando el régimen español, defendía el medio de vida tradicional de los paisanos y las tribus. Después de frustrados intentos de combatirlo, las autoridades virreinales optaron por ofrecerle un indulto para que ocupara un cargo de vigilancia en una región.
Artigas, entonces, estaba disconforme con los ataques a los indios que emprendieron algunos jefes españoles.
En 1811 viajo a Buenos Aires para ponerse a las órdenes de la junta, y volvió con el grado de Teniente Coronel. El primer foco revolucionario en la Banda Oriental fue promovido en Mercedes, adaptándose a distintos sujetos que eran propuestos en el plan de operaciones. A partir de allí se organizaron las primeras Montoneras.
En las fuerzas de Artigas se destacaron algunos miembros de su familia. Artigas fue ascendido a Coronel cuando derroto a los españoles en Las Piedras junto a su millar de jinetes. Pero en el sitio a Montevideo quedo subordinado a Rondeau ya que sostenía mayor confianza con los dirigentes porteños. Allí comenzaron los desacuerdos que terminaron por enfrentarlo al Gobierno de Buenos Aires, cuando el triunvirato Rivadavia no se adhiere a la lucha independentista junto con los realistas, los portugueses y las potencias europeas.
Artigas obtuvo éxito en partidas guerrilleras. A fines de 1811 convoco también a los indios bravos. Entonces varios grupos Charruas acompañaron su ejército o actuaron como aliados. Sirvieron como espías, lo auxiliaron para obtener abastecimientos, hostilizaron la invasión de los portugueses e incluso reforzaron el sistema de combate. Artigas ataco en Belen, con una fuerza mixta de 500 blandengues y 450 indios.
Durante el sitio de Montevideo, Artigas se enfrento con Manuel de Sarratea, quien al mando de las fuerzas porteñas maniobro para desplazarlo, incluso atentando contra su vida. Artigas comenzó por cortar a Sarratea los auxilios de Buenos Aires, le hizo escasear los abastecimientos y además le sustrajo caballos y bueyes, dejándolo inmovilizado frente a la ciudad de Montevideo. Es así como se manejaba. Primero hacia propaganda, segundo alejaba las haciendas de donde se situaba su enemigo y luego lo despojaba de las caballadas. Artigas establece una alianza con varios gobiernos provinciales, por lo que se sitúo en un campamento junto a tribus indígenas, en la que los visitantes se asombraban del predominio de las costumbres de los gauchos.
Dada la escasez de recursos hubo episodios de bandolerismo. Llegaron protestas de que faenaban ganado con y sin dueño por lo que reclamaban mayor control en el comercio montevideano. Los saqueos y confiscaciones habían iniciado años atrás por las autoridades españolas contra los patriotas, las continuaron los invasores portugueses y las fuerzas de Buenos Aires, diezmando los ganados y destruyendo estancias y poblaciones.
Las acciones de las montoneras eran de lucha social y de revancha contra la clase alta. En 1815, el cabildo imputo al “Pardo” Encarnación por haber distribuido ganado y tierras a su arbitrio. Artigas defendía a los paisanos que ocupaban las estancias de una familia contrarrevolucionaria. El cabildo amenazó con desalojarlo y Encarnación pidió el clamor general. Prevalecían entonces los enemigos del sistema frente a los que perdieron todo lo que tenían y dieron sus vidas por defender la patria.
Andrés Guacurarí, un guarani adoptado por Artigas fue su brazo armado en la zona de Misiones disputada por los portugueses, paraguayos y rioplatenses. Estos indios constituían otro sector marginado de sus poblados. En 1818 el protector envío a Guacurarí a sofocar Corrientes, donde aplasto a las tropas que lo enfrentaron y tomo la capital. Esto se transformó en un escándalo ya que fueron los aborígenes los que intervinieron a solucionar problemas públicos locales, y no la clase principal porteña. Luego de este episodio, los indígenas recuperaron indios esclavos y apresaron a los hijos de las familias que estos estaban sirviendo donde los retuvieron durante una semana para que las madres que clamaban por ellos sientan lo que habían sufrido madres guaraníes.
El proyecto de Artigas surgió como consecuencia de los desencuentros con los gobiernos porteños y la desconfianza hacia los dirigentes de Buenos Aires, que tendieron a entenderse con los españoles y portugueses.
El artiguismo asumía los principios liberales y republicanos de la enmacipación. Buscaban la libertad de los gauchos y la orientación democrática de la revolución. Artigas se intereso por el sistema federal norteamericano. Su programa era organizar el poder político basado en los derechos de la representación de los individuos y de las regiones, todos en pie de igualdad.
En1813, se proyectó una constitución provincial y se eligieron diputados a la asamblea constituyente. Artigas les exigía la independencia de la corona española y familia de los Borbones, y establecer un régimen republicano y federalista.
La asamblea rechazó los planteos federalistas por lo que esto condujo a la formación de la Liga Federal con las provincias de: Entre Ríos, Corrientes, Santa Fe, Córdoba, la Banda Oriental y las Misiones bajo el protectorado de Artigas.
Elaboraron un segundo proyecto para la provincia oriental donde se declaraban los derechos esenciales de las personas y se establecía que el pueblo tenía derecho a alterar el gobierno para tomar medidas. Establecía además la educación pública, universal como responsabilidad del estado y obligación de los padres, y que lo ciudadanos tengan acceso a la justicia y a la elección de funcionarios de gobierno ya que el poder reside en pueblo.
Existía una gran preocupación por parte de Artigas por el impartir justicia con un sentido igualitario. Los pueblos indios tenían como principal derecho la elección de administradores y no debían ser excluidos por ser indios.
Estos principios igualitarios se reflejan en todas las acciones de Artigas. Existía la necesidad de repoblar y poner en producción los campos destruidos por la guerra motivo por el cual dictó el reglamento de tierras de 1815 el que establecía un nuevo orden rural, se buscaba recuperar la ganadería, poblar y distribuir la propiedad con el criterio de que “los más infelices sean los más privilegiados”. Las tierras no ocupadas y las confiscadas a “los malos europeos y peores americanos”. Se debían repartir como donación privilegiando a los negros libres, zambos, indios y criollos pobres. Además, se preveía la adhesión de “vagos” al servicio de las armas. La obligación de trabajar conllevaba consigo la posibilidad de adquirir una tierra. La aplicación de este reglamento afectaba a gran cantidad de personas y fue conflictiva. La independencia se tornaba amenazante para los grupos dirigentes. En Buenos Aires, el directorio de Pueyrredón optó por consentir la invasión portuguesa a la banda Oriental para liquidar ese peligro. Artigas fue traicionado por sus subordinados y en 1820 se refugio en Paraguay donde el gobernador era adversario del centralismo porteño. Pero por su desconfianza se negó a ver a Artigas y le impuso que se aislara. Finalmente, se le brindó el reconocimiento que merecía, allí, como en el Uruguay y hasta su muerte se rehusó a volver a su tierra natal.
San Martín se empeñó en alcanzar la liberación de todos los pueblos sudamericanos. Combatió las discriminaciones de castas, buscando integrar a los indios, a los negros y a los gauchos en la causa revolucionaria. La guerra emancipadora tenía como propósito final abatir el bastión realista peruano. San Martín venció a los españoles en Chile, mientras Simon Bolívar culminaba su campaña emancipadora de la gran Colombia. Los libertadores se aproximaban al mismo escenario donde debieron ponerse de acuerdo para lograr la victoria.
San Martín era hijo de madre guaraní, era esta su motivación intima de su regreso al país. El manifestaba que también era indio y que formaba parte del partido americano, cuando los caciques pehuenches se comprometieron a ayudarlo a cruzar los andes.
La Logia Lautaro, el partido secreto de San Martín marchaba al Perú mientras San Martín comunicaba a los pueblos incaicos el proyecto liberador de restituirles los derechos que les habían negado los opresores de su suelo.
Nombrado gobernador de Cuyo, San Martín se ocupo de organizar su ejército libertador, reclutando e informando como soldados a los paisanos, gauchos y esclavos negros. Estos últimos al ser incorporados ganaban la libertad por sus servicios militares. El gobierno provincial dirigió todos los recursos de la economía para proveer al ejército. En Chile, la junta patriota fue desplazada dictatorialmente por José Miguel Carrera. Las tropas realistas recuperaron el control del país. San Martín tuvo un enfrentamiento con Carrera, quien se había refugiado en Mendoza y lo expulsó.
En 1817, el ejército traspuso la cordillera, y San Martín logró derrotar a los realistas. Los españoles sorprendieron a los patriotas en Cancha Rayada, pero estos vencieron finalmente en Maipú.
La situación estaba dominada. San Martín no aceptó el poder político, para dedicarse a sus objetivos militares, por lo tanto, O`Higgins ejerció el cargo del director supremo confiscando bienes a los realistas y decretando la igualdad de derechos de los indios. Gobernó junto a aristócratas que imposibilitaron sus reformas igualitarias, y resistieron el financiamiento de la expedición al Perú.
En 1819, el directorio de Buenos Aires ordenó a San Martín regresar con sus tropas para enfrentar la rebelión, pero el desobedeció y procuró mediar ante a Artigas. No estaba de acuerdo con lo que podía causar un sistema federalista. Cuando el directorio fue derrotado y disuelto por los artiguistas del litoral, San Martín reunió a sus oficiales y se convirtió en comandante del ejército de Los Andes. El ejército libertador se embarcó hacia Perú. Se anunciaba el propósito de unir a Argentina, Chile y Perú, y restituir los derechos de los indios.
San Martín logró una negociación con los jefes realistas en la que le permitió ocupar la capital sin dar batalla. Declaró entonces la independencia del Perú y asumió el cargo de protector.
Para vencer a los realistas había que movilizar a los pueblos y en Perú, las circunstancias eran más difíciles. Los patriotas no tenían la misma fuerza que en otras regiones.
El campesinado indígena soportaba la explotación del tributo y los servicios personales.
Entre otras reformas, el protectorado de San Martín clausuró la inquisición, suprimió los tributos y servicios forzados y abolió la denominación de “indio”, trató de extender la educación pública respetando las culturas indígenas, y protegió los monumentos arqueológicos.
Las victorias de Simon Bolívar permitieron organizar la República de la gran Colombia. Entonces, se firmo un pacto de “unión, liga y confederación” entre Colombia y Perú.
Desde Lima, San Martín envió a su emisario Gutiérrez de la Fuente a pedir auxilio a las provincias unidas del Río de la Plata. Los caudillos federales respondieron afirmativamente, pero el gobierno de Buenos Aires, se rehusó a respaldar el ejército de Los Andes. La independencia que juraron el grupo dirigente de Lima no era sostenida y capaz de fundar la república ni de construir una nación por los abismos de castas. La independencia requería de la “clase principal” criolla pero estos tenían ideas europeas.
El marqués de Torre Tagle, es quien San Martín delegó el gobierno durante meses, era un ex realista, que luego volvería a cambiar de bando. José de la Riva Agüero repudiaba a San Martín a quien los hacendados le temían ya que los obligaba a mantener a los esclavos y el ganado que les había quitado para el ejército. Conspiraban contra San Martín, por lo que los oficiales no entendían su negociación con los jefes españoles liberales y le reprochaban indecisión. En medio del caos económico y con el ejército inactivo el tiempo también conspiraba en su contra.
Simon Bolívar había logrado la independencia de las provincias del ex virreinato de Nueva Granada. La revolución iniciada en 1810 tuvo como resultado grandes costos humanos y sufrió graves derrotas cuando los españoles reconquistaron aquellos territorios. Bolívar había tenido que refugiarse en Haití, y en su regreso se comprometió a liberar y ganar para la causa a los esclavos negros, e incorporó también a sus fuerzas a los llaneros venezolanos. Su campaña culminó con la victoria de Boyacá, luego fue designado presidente de la república de la gran Colombia.
En 1821, Bolívar obtenía el triunfo en Carabobo expulsando a los realistas del territorio venezolano.
San Martín y Bolívar eran del “partido americano”, por la liberación y la unión continental. San Martín veía desgastado su poder en Lima al no derrotar a los realistas sin el aporte de Bolívar. La conjunción de un ejército comandada por estos dos era una problemática, por lo que era necesario dejar a cargo a Bolívar en la guerra contra los realistas.
Riva Agüero en Lima expulsó del gobierno a Monteagudo. Este sería poco después presidente del Perú. Monteagudo colaboraría con Bolívar pero terminó asesinado en Lima.
En 1822, San Martín presento la renuncia para que los peruanos resolvieran. Pero la república no iba a alterar el predominio de la aristocracia terrateniente sólo progresarían, aparentemente, difundiendo la propiedad privada perjudicando a los indios.
Bolívar entró en Lima asumiendo dictatorialmente. Sus fuerzas derrotaron a los españoles y proclamaron la república de Bolivia, separándose de las provincias del Plata.
El plan de Bolívar de unir a las ex colonias hispánicas no fue aceptado por los gobiernos de Buenos Aires. México, Centroamérica, Perú y Colombia aprobaron el proyecto de confederación pero luego no fue ratificado por los gobiernos.
Bolívar hizo abolir la constitución y gobernó dictatorialmente en Bogotá, la oposición conspiró para asesinarlo. En 1830 renunció y se retiró enfermo.