Adiós, cordera:

Rosa, Pinín y Cordera siempre estaban juntos aunque pinín y rosa estaban muy unidos, vivían en el prao somonte, allí Cordera era feliz aunque no le gustaba mucho el palo de hierro que iba de Oviedo a Gijón, a Pinín le gustaba subirse arriba del telégrafo para intentar escuchar alguna conversación aunque nunca llegaba a subir hasta el final, sin embargo rosa se sentaba algunos minutos el interés de rosa simplemente estaba en escuchar los ruidos sin embargo Cordera era mas formal y mas madura ya que era una vaca que había vivido mucho, para ella el telégrafo no era otra cosa que algo desconocido y algo a lo que no le daba ni la mas mínima importancia ella solo quería gozar de la vida que le quedaba para ella ya había pasado el tiempo en que la emparejaban con el toro(xatu)En la inauguración del ferrocarril la primera vez en que cordera lo vio pasar lo miro con desconfianza por el contrario los gemelos lo miraban con alegría y euforia, todo aquello del telégrafo, el ferrocarril para ellos era un mundo desconocido y totalmente distinto al que ellos conocían.
Pinín y Rosa eran hijos de Antón de chinta, los gemelos solían jugar alrededor de Cordera, les serbia como almohada, de escondite y muchas veces pinín saltaba sobre el lomo de la vaca.
Antón de chinta no siempre había tenido el prao somonte eso era un regalo reciente, tiempo atrás Cordera tenia que pasear por los pastos, en el establo faltaba el heno y pinín y Rosa le hacían mas suave la miseria por la que pasaban.
Antón de chinta quería cumplir su sueño de tener al menos dos yuntas, todo empezó al comprar la primera vaca y cuando iba a comprar la segunda no pudo hacerlo ya que tenía que pagar al casero, chinta había muerto poco después de haber comprado a Cordera , por eso aquella vaca era para Pinín y Rosa como una madre, por eso cuando chinta murió les dijo que cuidaran bien de ella que era su mayor sustento, desde entonces los gemelos cuidaban continuamente de cordera .Un día Antón se fue a Gijón llevando a Cordera mientras pinín y rosa dormían, cuando Antón y la cordera volvieron , los niños no dijeron nada adivinaron que había ido a venderla y que ninguno la había querido por que ninguna oferta llegaba a lo que Antón quería, volvíó a emprender el camino por la carretera de Candás , y en el cruce de dos caminos un vecino de Carrió que le había echo ya varias ofertas y al final pudo venderle a la vaca, aunque le costo el tenia que terminar de pagar los gastos así que no tubo otra opción que aceptar lo que el vecino le ofrecía , a los pocos días un encargado del vecino de corríó fue a por la Cordera mientras se la llevaban los niños corrían detrás de ella el padre intentaba calmarlos desde casa, mientras la vaca y aquel seños se desvanecían en la oscuridad los niños gritaban ¡adiós, cordera!, al día siguiente pinín y rosa fueron al prao somonte aquello no era lo mismo sin cordera, vieron pasar el ferrocarril y se imaginaron que cordera iba alii y gritaron ¡adiós, cordera!.
Pasaron los años los gemelos se hicieron mayores y pinín se había ido a la guerra una tarde rosa esperaba el correo para saber de su hermano, cuando el ferrocarril paso estaba lleno de gente entre aquella gente vio a su hermano, rosa alcanzo a oír ¡adiós, cordera ¡ ¡adiós, rosa!
Mientras rosa veía alegarse a su hermano pensaba: que légano y desconocido aquel mundo
EL TREN EXPRESO: Todo empieza cuando el protagonista se sube a un tren y ve a una hermosa muchacha que le impresiona mucho, era su compañera de vagón, ella era francesa y el español al principio comenzaron a hablar de lo bonito que era su país pero luego se quedaron callados durante un tiempo el la veía no podía parar de mirarla era hermosa, rubia, alta delgada y muy graciosa. El para sacar un poco de conversación le dijo que si iba muy legos, ella le respondíó que que si el sitio preguntando la siguiente pregunta era que si le había gustado la ciudad (París) y ella con un tono tristón le contesto: yo vine a París y halle casado a un hombre ingrato a quien ame soltero, el respondíó yo fui por no ver en Madrid cierta ingrata. Después se volvieron a quedar callados ella abrí su trozo de ventanilla y mientras el tren corría hacia frio mucho frio y el joven cogíó su manta zamorana y se la hecho por encima, ella descansaba y el protagonista no podía pegar ojo de tanta hermosura, por mucho que lo intentara no podía dormir, a la salida de la aurora sonaba una campana en el tren y este entro en la estación, pero ninguno de los dos se bajaron en la parada. El le pregunto que hacia donde se dirigía, ella le dijo que a donde fuese para olvidar el engaño, que duraría más o menos un año. El ciego ya por tanta belleza y sin aguantarse más le preguntó ¿seria en vano que amaros pretendiera? Ella un poco distraída le contesto que no lo sabia que iba ha hacer más adelante ella le respondíó que se llamaba Constanza y que era constante, después disimulo que se distraía, cuando volvíó en sí le contesto que con tanto celo un poco de valor para el engaño y que estaría allí dentro de un año, él se quedo mudo con la contestación.
Pronto llegaron a su lugar de destino cuando se despidieron alzaron la mano y saludaron con la cabeza, él solo tendría que esperar hasta el año siguiente a encontrarla en el mismo tren.
Ya después de un año, hacia Francia, en una estación que no quiere nombrar pero seria siendo todo igual; solo que había pasado un año más. En el vagón una tos y un llanto sonó a su lado era una hechicera que le traía una carta de constancia decía que había vivido pero que ahora estaba bajo unas flores; es decir constancia había muerto de tuberculosis, ella le explico en la carta que lo amaba siguió diciéndole que rezara para que Dios le abriera el cielo y que ella le estaría esperando allí donde podrían continuar su historia de amor, le dijo que mientras el viva que llore que eso servía de consuelo , según el la carta la había leído ya mas veces que pelos tenia en la cabeza ,abríó muchas veces la ventana decidido a tirarse pero no lo izo continuo su viaje hasta París en el tren expreso.