Portada » Otras materias » Caracteristicas de microfonos y altavoces
Introducción(Micrófonos)
Realmente si hay un punto importante a la hora de estudiar el sonido, es el de su captación. Normalmente hoy en día la mayoría de los Técnicos dedicados al sonido realizan la mayor parte de su trabajo realizando tomas de sonido, bien sea para grabar un disco, como para un reportaje de noticias, la banda sonora de una película, una actuación en directo, o simplemente para la realización de una biblioteca sonora.
Para poder captar los sonidos que nos rodean en nuestra vida diaria, necesitamos de algún sistema que nos permita transformar las variaciones de presión en el aire (ondas sonoras), en ondas eléctricas, de manera que estas las podamos manipular y almacenar sobre algún soporte bien sea en formato analógico o digital.
Los micrófonos cumplen este cometido. El micrófono es un transductor que nos permite realizar esta conversión entre las variaciones de presión y variaciones de nivel en una corriente eléctrica. En realidad esta conversión se realiza en dos etapas. En una primera se realiza una conversión Acústica-Mecánica, a través de un transductor acústico-mecánico (TAM) (generalmente una membrana o diafragma), que convierte la variaciones de presión en movimiento del diafragma.
En una segunda etapa, esos movimientos del diafragma son convertidos mediante un transductor mecánico-eléctrico (TME) en señal eléctrica. La forma en que se realice esta conversión dará lugar a los distintos tipos de micrófonos.
A la hora de estudiar los diferentes tipos de micrófonos, podemos hacerlo, bien sea por su tipo de funcionamiento, o bien por la forma en que recoge el sonido, dado que no presentan la misma sensibilidad en todos los ángulos con respecto a la fuente sonora, forma que se representa por medio de un diagrama polar.
En primer lugar vamos a ver lo que es cada parámetro en relación a un micrófono, y
posteriormente veremos los diferentes tipos de funcionamiento y sus aplicaciones prácticas.
Características de los Micrófonos
Fidelidad Como se ha introducido anteriormente la función del micrófono es convertir las variaciones de presión atmosférica que constituyen la onda sonora en variaciones de señal eléctrica. Se determina la fidelidad del micro como el grado de correlación existente entre las características de la onda sonora en cuanto a frecuencia, fase, amplitud y forma y la onda eléctrica resultante.
Sensibilidad Se define como el nivel de tensión eléctrica (dBV) a la salida del micrófono. Es un parámetro fundamental que da idea de la capacidad del micrófono para captar sonidos débiles. También pude venir expresada en dB de presión sonora; en este cálculo se toma como referencia 1 voltio por μbar de presión (1V/μbar). De esta forma, los valores de sensibilidad son negativos, por ejemplo -60dB. Cuanto menos negativo sea el valor de sensibilidad, más sensible es el micrófono. La sensibilidad puede variar en función de la frecuencia, por este motivo los fabricantes suelen dar la sensibilidad a unas frecuencias determinadas: 250Hz, 500Hz y 1000Hz.
La sensibilidad de un micrófono es la relación entre la tensión de salida obtenida en el mismo y la tensión de referencia que provoca dicha salida en el micrófono. Normalmente se mide en decibelios referenciados a 1 voltio con una presión de 1 dina/cm2 y la señal de referencia usada es un tono de 1000 Hz a 74 dB SPL. Como es lógico cuanto mayor sea la sensibilidad de un micrófono, mejor.
La sensibilidad del micrófono no influye en su calidad sonora, ni en su respuesta en frecuencia, únicamente es importante a la hora de su uso ya que un micrófono de baja sensibilidad nos fuerza, al utilizar un preamplificador para el micrófono, a utilizar un nivel mayor de ganancia de entrada para dicho micrófono, aumentando de esta manera el ruido de fondo que produce la electrónica de los preamplificadores. Para las mismas condiciones si tenemos un micrófono con una sensibilidad mayor, necesitaremos menos ganancia en la entrada del preamplificador con lo que reduciremos el nivel de ruido de fondo. Puede parecer que esto no tiene excesiva importancia, y puede que no la tenga cuando únicamente se utiliza un micrófono y lo que se trata de grabar o amplificar no es muy importante.
Cuanto menor sea la sensibilidad del micrófono, mayor dificultad tendrá la mesa de mezcla (como receptora de la señal), para mantener una relación señal ruido aceptable. Es decir, la mesa de mezcla tiene un nivel de ruido de fondo, si la señal microfónica es muy débil (tiene poco voltaje), estarán más próximas en lo que a nivel se refiere. Esta relación señal de micrófono a ruido no se podrá mejorar más que dando a la señal del micrófono más nivel. Sin embargo cuando se utilizan muchos micrófonos, caso muy típico en grabaciones y actuaciones en directo, el nivel de ruido de fondo producido en cada canal se va sumando y el resultado puede ser realmente problemático, sobre todo cuando grabamos en soporte digital.
Respuesta en Frecuencia La respuesta en frecuencia de un micrófono indica la sensibilidad del mismo a cada frecuencia. Como hemos visto al principio al hablar de los diagramas polares, los micrófonos no tienen la misma sensibilidad para cada ángulo de incidencia ni para cada frecuencia, por tanto es difícil conseguir una respuesta uniforme en todo el espectro. Como es lógico hay que observar que la longitud de un sonido influye o tiene una relación en el comportamiento del diafragma según la relación de tamaño que haya entre ambos.
Con todos los micrófonos se entrega una hoja con la curva de respuesta en frecuencia del micrófono, teniendo en un eje (x) la frecuencia de 20 Hz a 20 Khz y en el otro eje (y) los decibelios. Ver grafico siguiente. Como es lógico depende lo que deseemos grabar buscaremos el micrófono que sea mas plano en la zona del espectro que estemos tratando de grabar. De un modo general, si lo que buscamos es la fidelidad en la reproducción del sonido, es deseable que la curva de respuesta sea lo más plana posible en las altas y bajas frecuencias. Si bien es cierto que en algunos tipos de micros, según cual sea su función y propósito, la curva es alterada de forma planificada para conseguir ciertos efectos o corrección de problemas (dependiendo de cada toma o circunstancia).
Cuando se habla de margen de frecuencia plano, se entiende aquella zona de la respuesta en frecuencia en el cual el micrófono reproduce con el mismo nivel, con una variación máxima de ±3 dB. Debido al pequeño tamaño de los diafragmas de los micrófonos y su pequeña masa, la mayoría de los micrófonos tienen un amplio margen de frecuencia en el espectro de audio (20Hz – 20KHz). Lo contrario ocurre con los altavoces, donde es necesario emplear varios para cubrir todo el espectro de audio.
Directividad. Diagrama Polar El diagrama polar de un micrófono refleja la sensibilidad con que es capaz de captar un sonido según el ángulo con que le incida este. El diagrama polar de un micrófono nos da la información necesaria para saber de que forma se va a comportar el micrófono con los sonidos dependiendo de donde le vengan estos. Los diagramas polares se pueden dividir básicamente en tres, el omnidireccional, el bidireccional y el unidirecional (estos a su vez se dividen en cardioides, supercardioides e hipercadioides).
El micrófono unidireccional se puede clasificar como aquel que tiene una mayor sensibilidad a los sonido que el vienen de frente a la cápsula con un ángulo relativamente amplio. Este tipo de diagrama polar, se puede subdividir en tres que son, el cardiode, el supercadioide y el hipercardioide. Cada uno de ellos va presentando un diagrama polar cada vez mas estrecho y por tanto se van haciendo más insensibles a los sonidos que les llegan desde la parte posterior así como del lateral. Ver Gráfico 2.
Gráfico 2
En el caso del diagrama polar omnidireccional, tal y como su nombre lo indica, este recibe prácticamente con la misma sensibilidad cualquier sonido independientemente del punto donde proceda el mismo, su diagrama es por tanto circular. El bidireccional presenta una gran sensibilidad en el frente, con un ángulo amplio, y una imagen simétrica en la parte posterior, o sea que es menos sensible a los sonido que le llegan desde los laterales y mas sensible a los que le llegan desde el frente y la parte posterior. Un factor importante es que el micrófono, con un diagrama polar determinado, lo mantenga los más igualado posible en todas las frecuencias, dado que si no, se presentan coloraciones en el sonido debido al acercamiento o separación desde o hacia la fuente sonora. Si tenemos unos diagramas polares uniformes para diferentes frecuencias, sabremos que la respuesta en frecuencia del micrófono no variara en exceso según los ángulos de incidencia del sonido. Una vez visto lo que es el diagrama polar del micrófono y los diferentes tipos que hay, vamos a ver para que podemos utilizar cada uno de ellos. Los micrófonos omnidireccionales son recomendables cuando se necesite alguno o varios de los siguientes usos: – captación del sonido en todas las direcciones.- – captación de reverberaciones en locales, cámaras etc.- – Exclusión máxima del ruido mecánico generado por viento etc. – Respuesta amplia en las frecuencias más bajas, sobre todo con micrófonos de condensador.
Los micrófonos direccionales (Cardioides, SuperCardioides e HiperCardioides) los usaremos en los siguientes casos:
– Rechazar al máximo la acústica que tenga el recinto donde se realiza la toma.
– Rechazar el ruido de fondo.
– Utilizar técnicas especiales de grabación con parejas de micrófonos (estéreo coincidente)
– captación de sonidos lejanos.
El diagrama polar de un micrófono cambia con la frecuencia. Un diagrama polar de un
micrófono real se suele representar para distintas frecuencias. A continuación se muestra un diagrama polar de un micrófono real, con las distintas respuestas según la frecuencia.
Efecto de Proximidad
Este es un defecto más que una característica, común a todos los micrófonos. Consiste en un aumento considerable de la respuesta en baja frecuencia cuando el micrófono se sitúa cerca de la fuente de sonido. Este efecto es más acusado en los micrófonos de gradiente de presión como los de cinta. A continuación se muestran las diferentes respuestas en baja frecuencia en función de la distancia de un micrófono real. Efecto proximidad en los modelos 4011 y 4012 de la marca DPA Microphones.
Cualquier micrófono direccional (da igual que sea de condensador o dinámico) presenta el denominado efecto de proximidad. Este efecto consiste en un aumento de la respuesta en las frecuencias graves conforme se acerca la fuente al micrófono. La distancia a la que este efecto empieza a evidenciarse depende del micrófono en sí. En algunos casos pueden ser varios centímetros, y en otros, pensados para uso cercano, ya se tuvo en cuenta este efecto en el diseño y precisamente se aprecia una carencia de graves si la fuente no está muy cerca del micro (como en el Shure SM58).
De nuevo, este efecto no tiene por qué ser negativo. Simplemente hay que saber que existe, y aprovecharse de él. Un ejemplo típico consiste en colocar a un cantante con una voz “delgada” más cerca del micro que a un cantante con una voz más grave, o variar esa distancia a lo largo de una interpretación para obtener distintas texturas de voz. En cualquier caso, si el efecto de proximidad se convierte en un problema, muchos micros incorporan un interruptor que habilita un filtro paso alto para eliminar el exceso de graves.
Enlazando con el tema de los patrones polares, si un micrófono no cuenta con filtro paso alto se puede usar un patrón ominidireccional y hacer que el efecto de proximidad desaparezca, pero de nuevo hay que tener en cuenta que con este patrón se captará más sonido de sala.
Ruido y Distorsión. Relación señal a Ruido Cualquier aparato electrónico tiene un nivel de ruido propio, llamado ruido eléctrico. Los micrófonos producen ruido en ausencia de perturbación externa que mueva el diafragma. El origen son las moléculas de aire que chocan contra la membrana debido al movimiento térmico. En los micrófonos de bobina, por el movimiento de los electrones en la resistencia de la bobina móvil.
Gráfica del nivel de la señal (verde) respecto al nivel de ruido (rojo).
El ruido propio de un micrófono es el que produce cuando no hay ninguna señal externa que excite el micrófono. Esta medida se realiza normalmente en una cámara anecoica y se especifica como una medida de presión sonora y por tanto en dB SPL, equivalente a una fuente sonora que hubiese generado la misma tensión de salida que el ruido producido por el micrófono. El nivel de ruido indicado en dB SPL se especifican con la ponderación A incluida, de forma que se adapta a la curva de nuestro oído ajustando las frecuencias mas graves y mas agudas. Se puede considerar como excelente un nivel de ruido de 20 dBA SPL, como valor bueno sobre unos 30 dBA SPL, y como malo 40 dBA SPL. A la hora de comparar varios micrófonos es importante tener en cuenta este valor de ruido propio. Cuanto menos ruido tengamos mejor. Hay que acordase que después, en la practica no usaremos un micrófono solo, usaremos varios y los niveles de ruido se van sumando.
Relación Señal/Ruido (S/R) La relación señal ruido (S/R) representa realmente la diferencia entre el nivel SPL y el ruido propio del micrófono. Cuanto mayor sea la SPL y menor el ruido mejor será la relación señal ruido, y por contra si el nivel de SPL es menor y el ruido propio aumenta, la relación será menor y por tanto peor. Cuanto mayor sea la relación señal ruido mejor. Nos indica que porcentaje de la señal SPL esta por encima del ruido de fondo. Si tenemos una SPL de 100 dB y un ruido propio en el micrófono de 30 dB, la relación señal/ruido será de 70 dB. Para una señal de 100 dB una relación señal/ruido de 80 dB es muy buena y 70 dB es buena.
Distorsión. Limite de Saturación La distorsión que provoca un micro no es más que toda la suma de señales que nos aparecen en la salida, que no estaban en la entrada, que nos ensucian el sonido y entorpecen la definición. Para evitar las distorsiones podemos utilizar filtros «antichoque», soportes antivibración provistos de elásticos que amortiguan las vibraciones (al situarlos en el instrumento) y todas las medidas que estén en nuestra mano para aislar el micro de señales de entrada no deseadas. Todos los micrófonos distorsionan totalmente la señal si el nivel de presión de ésta es demasiado elevado. Esta condición se conoce como saturación. Dependiendo de la construcción del micrófono, podrá soportar mayores o menores niveles de presión sin distorsionar la señal. El límite de saturación no es un dato que se encuentre en todas las hojas de características de los micrófonos. Los micrófonos de bobina móvil o dinámicos, o los micrófonos de condensador no son tan vulnerables ante la distorsión como los micrófonos de cinta. Los micrófonos dinámicos pueden soportar grandes niveles de presión sonora sin sufrir daños internos permanentes, sin embargo, los micrófonos de cinta corren riesgo de rotura si se usan en ambientes con elevado
nivel.
Los micrófonos de condensador, aun sin generar distorsión en el diafragma, pueden producir niveles de señal muy elevados que luego sobrepasan los niveles del pre-amplificador generándose ahí la distorsión. Para evitar esto algunos vienen dotados de un control en el preamplificador que permite atenuar varios decibelios la señal para prevenir la distorsión.
La Impedancia de Salida La impedancia en un micrófono es la propiedad de limitar el paso de la corriente, como ya sabemos se mide en Ohmios. Normalmente en los micrófonos se mide sobre una frecuencia de 1Khz y en micrófonos de baja impedancia, suele valer 200 Ohmios. Los micrófonos más habituales son los de baja impedancia, considerados hasta unos 600 Ohmios. También existen los de alta impedancia que suelen tener un valor tipo de 3000 Ohmios y más. La diferencia entre uno y otro radica en que a la hora de conectar un cable para unirlo a la mesa de mezclas o al amplificador, los de baja impedancia al oponer poca resistencia a la corriente que circula, permiten utilizar cables de longitud muy grande mientras que los de alta impedancia al restringir de forma mayor el paso de la corriente, solo se pueden usar con cables de corta distancia. Hoy en día prácticamente nadie usa micrófonos de alta impedancia salvo en gamas muy baratas de precio o en casos específicos.
Clasificación de los Micrófonos
Los micros se pueden clasificar según el transductor acústico mecánico en función de cómo actúa la presión sonora sobre el diafragma:
De presión (omnidireccional).Caracterizado por que (especialmente en micrófonos de diafragma pequeño) su respuesta será la misma independientemente de la dirección de donde provenga la onda.
De gradiente (bidireccional). Llamados de gradiente por que la onda acústica recibida es sometida a un proceso por el que el diafragma la recibe con una diferencia o gradiente de presión. Este tipo de micros presentan mayor efecto de proximidad, que dificultan su uso en tomas a poca distancia, potencian los graves (generalmente suelen ir provistos de un selector filtro de graves). Una segunda clasificación puede establecerse en función del principio de funcionamiento del transductor mecánico-eléctrico. Atendiendo a esta clasificación nos podemos encontrar dos tipos principales, los electromagnéticos, en los cuales las variaciones de corriente eléctrica se consiguen mediante inducción magnética de un conductor inmerso en un campo magnético. Corresponden a este tipo de micrófonos, que también son llamados dinámicos, los de bobina móvil y los de cinta. El otro tipo fundamental son los electrostáticos, llamados así porque las variaciones de corriente eléctrica se consiguen variando las condiciones del campo eléctrico formado en bornas de un condensador. Pertenecen a este tipo los de condensador variable y los “electret”.
Existen otros tipos de micrófonos en función del transductor mecánico-eléctrico que no serán tratados por estar en desuso en el campo del audio profesional.
MICRÓFONOS DINÁMICOS DE BOBINA MÓVIL Se basan en el principio de inducción electromagnética, según el cual, si un hilo conductor se mueve dentro de un campo magnético, en el conductor se inducirá un voltaje mayor cuanto mayor sea la densidad de flujo magnético, la longitud del conductor y la velocidad del movimiento.
Son micrófonos muy utilizados por su resistencia, fiabilidad y buena respuesta en frecuencia. Este tipo de micros, es el más utilizado sobre todo en sonorización, debido entre otras cosas a su robustez, fiabilidad, precio, etc. Está constituido por un diafragma solidario a una bobina móvil (de ahí su denominación), que se encuentra inmersa en el campo magnético de un imán permanente. Por naturaleza, son de baja impedancia (entre 150 y 600 omnios).
La vida útil de uno de estos micros dinámicos, tratado adecuadamente, puede tranquilamente sobrepasar la vida profesional de su usuario, sin apenas merma de sus cualidades intrínsecas. La longevidad de estos micros, estriba principalmente en la intensidad del campo magnético de su imán, (generalmente constituidos por tierras raras), que resulta reducido con el paso del tiempo, aumentando a su vez algo el ruido propio del micrófono; claro que para llegar a notar esto, han de transcurrir unas cuantas decenas de años. Un ejemplo típico de este tipo de micrófonos es el SM-58 para voces (todo un clásico), y el otro; el SM-75 para la caja en una batería (este prácticamente indiscutible), ambos de la firma Shure Incorporated. Los Sennheiser 441-U (supercardiode muy bueno y ampliamente conocido; de calidad próxima a un micro de condensador, soporta alto SPL), y el cardioide 421-II (bueno tanto en estudio como en directo, especialmente en locuciones).
Micrófonos de Cinta Este tipo de micrófono, también trabaja bajo el principio de inducción magnética y responde a la diferencia de presión sonora entre los dos lados de una cinta. Por eso recibe también el nombre de micrófono de gradiente de presión. Debido a que responde a la diferencia de presión, este micrófono tiene una respuesta polar con un máximo en el eje perpendicular a la lámina, mientras que no responde a los sonidos laterales. Correspondería a un patrón bidireccional.
El principio de funcionamiento de este tipo de micrófonos es bastante similar al de los micros dinámicos, con la salvedad de que en estos el elemento que corta las líneas de campo magnético del imán no es una bobina, sino un diafragma en forma de cinta metálica corrugada; con lo que se consigue mayor superficie en menos espacio, a la vez que facilita su movimiento, al poseer mejor efecto diafragmático.
Los micrófonos de cinta siguen el principio de velocidad de onda o gradiente de presión, (diferencia de presión entre dos puntos cercanos separados por el diafragma). Si la presión de sonido alcanza sus caras al unísono no se obtendrá ninguna señal en sus terminales de salida; por lo que se le encapsula para que esto no ocurra, y procurarle a la vez el patrón direccional que sea requerido, ya que por naturaleza son bidireccionales. Son además muy sensibles a las bajas frecuencias y poseen bastante efecto de proximidad (ensalzamiento de graves a corta distancia del micro), por lo que suelen utilizarse a cierta distancia del foco de emisión sonora (1 metro mínimo). Son de los más apreciados en aplicaciones de estudio debido a su alta calidad y sensibilidad. Sin embargo son muy delicados; una ráfaga de aire fuerte o un soplido en el mismo pueden fácilmente dañar la cinta y, en consecuencia, inutilizar el micro; por lo que resulta rara su aplicación en directo.
MICRÓFONOS ELECTROESTÁTICOS MICRÓFONOS DE CONDENSADOR Recordemos que un condensador almacena carga cuando se le suministra un potencial eléctrico. La ecuación que describe el fenómeno es: Q=CV donde: Q = carga, en Culombios. C = capacidad, en Faradios. V = potencial, en voltios. En un micrófono de condensador, la placa posterior está fija y alimentada con una tensión, mientras que la placa anterior, el diafragma, se desplaza al recibir variaciones de presión, ya que el interior del micrófono está a un presión constante igual a la presión atmosférica. La variación de la capacitancia, al cambiar la distancia entre las placas, producirá una variación de voltaje. Este tipo de micrófono produce la mejor respuesta de frecuencia por lo cual son los más utilizados en grabaciones profesionales. Debido a que responde a variaciones de presión se clasifican en los micrófonos de presión, y como consecuencia de ello tienen una respuesta omnidireccional.
El principio de funcionamiento de un micrófono a condensador, se basa en el efecto de la capacidad variable (y como consecuencia de ello una variación de la tensión en sus bornes), en presencia de vibraciones sonoras. Este tipo de micrófonos precisan de una alimentación externa (comprendida entre 9 y 48 V), que se encarga de polarizar su elemento capacitor; es por ello que a estos micrófonos también se les conoce como capacitivos. La tensión necesaria para su funcionamiento, es suministrada habitualmente, por el mismo cable que transporta sus señales; esta peculiar manera de suministrar tensión remota a los micrófonos capacitivos, se denomina alimentación fantasma (Phanton Power). Son de uso tanto en directo como en estudio. Su calidad de sonido, es muy buena, y por ello son más apreciados que los dinámicos, en aplicaciones de grabación. Al tener un diafragma de baja masa, estos micrófonos, además de responder óptimamente a transitorios de nivel (impulsos sonoros súbitos de gran amplitud y con una velocidad de ataque muy rápida) poseen buena respuesta en altas frecuencias (agudos), y bajo ruido mecánico (de manipulación y transmisión a través de su cuerpo); Por otro lado, su respuesta en bajos también resulta excelente; no en vano todos los micrófonos calibrados que se utilizan en mediciones acústicas son capacitivos; eso sí, para estas aplicaciones es obligado el uso de micros cuyo patrón polar sea omnidireccional.
Sus principales inconvenientes son por un lado, el de resultar sensibles a la humedad, cosa que perturba a su dieléctrico (aire entre sus placas), y por otro, el hecho de precisar de una tensión de alimentación tanto para la polarización de sus placas, como para su preamplificador interno. Puesto que estos micros son de alta impedancia y bajo nivel, se hace preciso el uso del mencionado preamplificador, que además cumple con la doble función de adaptación a baja impedancia.
La alimentación fantasma (Phanton Power) Resulta ineludible conocer esta cuestión de la alimentación fantasma cuando se usan micrófonos de condensador. Mediante esta técnica, se suministra un voltaje en corriente continua a los micros capacitivos, utilizando como soporte el mismo cable que transporta las señales de audio. Teniendo bien presente, que el cable de conexión entre micro y previo/mesa, a de ser obligatoriamente balanceado, o lo que viene a ser lo mismo, simétrico; ya que la fuente phanton, proporciona una tensión CC (DC) positiva, del mismo valor, a través de los dos hilos de señal, utilizando para el negativo o retorno, el conductor de apantallamiento del cable. La Phanton, normalmente se obtiene de la misma mesa de mezclas, o de un alimentador separado e intercalado entre la entrada del preamplificador y el micro; aunque también hay algunos micros a condensador que la obtienen de una batería interna; es decir, una pila.
Micrófonos Electret. Hay micrófonos electrostáticos que tienen un diafragma plástico con una carga permanente y que por ello no necesitan alimentación externa para funcionar, sin embargo el preamplificador que sigue siendo necesario si que los necesita. Esto a veces se resuelve con una pequeña pila incluida en el mismo micrófono, así se evitan utilizar la alimentación Phantom o Fantasma. El diafragma de estos micrófonos es mucho más sensible y por tanto son capaces de recoger sonidos muy tenues sin ningún problema.
Hay muchos otros tipos de micrófonos específicos. Resaltamos el Lavalier (de chaqueta o corbata), de amplia difusión como se puede apreciar en TV, normalmente ecualizado para compensar la absorción de la ropa (realce entre 2 Khz y 3 Khz), así como la resonancia añadida por la caja torácica (atenuación sobre 700 Hz), etc.
En Resumen A nivel de estudio de grabación, los micrófonos se clasifican en dos tipos: DINÁMICOS Y DE CONDENSADOR.
Los micrófonos dinámicos trabajan en el principio electromagnético. No necesitan energía externa para funcionar y son muy sencillos de fabricar y relativamente baratos. Los dinámicos vienen en dos variedades: Bobina móvil y de cinta. Los de bobina móvil usan un imán, una bobina envuelta con hilo muy fino y un diafragma que se sienta encima de los dos. La ondas sonoras chocan con el diafragma y mueven la bobina a través del imán. Esto crea una tensión de algunos milivoltios que salen al exterior por el cable.
El de cinta, es un poco diferente. En vez de una bobina y un diafragma, una cinta de un delgado metal corrugado, es extendido a través del campo magnético. Las ondas sonoras chocan con la cinta y la mueve a través del imán.
Los micrófonos de condensador son generalmente más caros y tienen una respuesta de frecuencia más plana que los dinámicos. También operan en un modo totalmente diferente. Por esta causa, necesitan energía para funcionar, la cual se la proporciona la llamada «phantom power», que suele ser de + 48Vdc. Esta alimentación viene de la consola de mezclas y se envía a través del cable hasta el micrófono. La carga se mantiene en la placa posterior del condensador. Frente a esta placa, se encuentra el diafragma. Cuando el diafragma se mueve, crea una variación de tensión muy débil que debe ser amplificada antes que llegue al mezclador. Como podemos observar, tenemos tipos de micrófonos para todos los gustos y necesidades. Tan sólo nos queda elegir la mejor opción para nuestras necesidades. Micrófonos de corbata, de estudio, unidireccionales (tipo espía) y todos sus accesorios como jirafas, antivientos, anti Pes, grúas y, sobre todo, las conexiones.