Portada » Religión » La Iglesia Católica: Transformación y Presencia en el Mundo Moderno
La luz eléctrica llega a todos los hogares, se generaliza el uso de los automóviles, la telegrafía sin hilos, el avión, la penicilina, los ordenadores. Se desarrolla el cine y aparece la televisión.
El Siglo XX fue una de las épocas más trágicas de la historia de la humanidad, con millones de muertos en conflictos bélicos.
Este concilio se planteó con objetivos claros:
Fue un concilio diferente por varias razones:
Las aportaciones del Concilio Vaticano II supusieron un cambio profundo para la vida interna de la Iglesia:
Él no solo acoge al pecador, sino que, y esto es lo más novedoso, va en busca de él y perdona sus pecados.
La actitud de Jesús en relación con los pecadores no tiene paralelo en aquel tiempo; es algo único y escandaloso: se relaciona con ellos, perdona sus pecados y llega a decir a los intransigentes que los publicanos y las prostitutas serán los primeros en el Reino de Dios.
Durante todo su pontificado, Juan Pablo II promovió una presencia activa y significativa de la Iglesia en el mundo.
Pretendía que la Iglesia fuera un referente ético y moral, y que su mensaje pudiera hacerse oír en todo el mundo.
Un pilar de su pontificado fue la defensa del derecho a la vida y del valor de la familia.
Otro de los ámbitos en el que Juan Pablo II orientó la acción y la presencia de la Iglesia fue en el del encuentro con las demás religiones.
En el año 1986, convocó en la ciudad de Asís a los líderes de las principales religiones del mundo para orar por la paz.
En torno al cambio de milenio, en toda la Iglesia se relanzó el compromiso por la evangelización.
Se destacaron especialmente los esfuerzos por la evangelización de la juventud.
El cristianismo ha perdido relevancia social en los últimos siglos.
Aparece la idea de que la Iglesia está en un periodo de recesión.
La religión parece quedarse reducida a un asunto meramente privado de elección y uso personal.
En el año 1970, los que se declaraban católicos practicantes en España eran el 87%; hoy lo hace el 32% de la población.
A estos datos hay que añadir aquellos que afirman practicar el cristianismo de manera esporádica, un 31%.
Esto configura la realidad de España de los tres tercios: un tercio practicante, otro practicante esporádico, y un último tercio que se declara ateo o agnóstico.
Afortunadamente, ser cristiano ya no es una cuestión de obligación política o familiar.
Se es cristiano por opción personal en un mundo que favorece más bien el culto a la superficialidad, el consumismo y la indiferencia.
Ser cristiano hoy implica vivir una experiencia:
Pronto surgieron diferentes géneros. En muchas ocasiones, el cine ha tratado temas religiosos y especialmente se ha centrado en la figura de Jesús.
En la actualidad, un tipo de cómic, el manga japonés, tiene un gran auge. Se trata de un cómic de lenguaje directo, con unos personajes caracterizados por ojos grandes, impreso en blanco y negro, destinado a todos los públicos, pero especialmente a los más jóvenes.
También este ha sido un modo de presentar el mensaje religioso. Así, el dibujante nigeriano-británico Ajibayo Akinsiku, conocido como Siku, es el autor de la Biblia Manga y de Jesús Manga.
«Cristo es mi héroe, mi superhéroe.»
Su origen procede de la caricatura y el chiste gráfico.
Internet es otro medio relevante.
En la actualidad, el cartel con temática religiosa está presente en la vida de la comunidad cristiana y así su presencia es cotidiana en la presentación de los tiempos litúrgicos, de las Campañas de Manos Unidas y Cáritas, visitas del Papa, etc.