FINALIZACIÓN NORMAL DEL PROCESO

I. LAS CONCLUSIONES DEFINITIVAS.

1. CONCEPTO, NATURALEZA Y NOTAS ESENCIALES.

Son actos de postulación mediante los cuales las partes deducen definitivamente sus respectivas pretensiones sin que puedan modificar su contenido esencial. Una vez practicada la totalidad de la prueba en el juicio oral, y viendo el resultado, las partes pueden modificar las conclusiones de los escritos de calificación.

• Corresponden a las partes, nunca al Tribunal.
• Su contenido: deducir de modo definitivo la pretensión.
• Al ser la última oportunidad de interposición de la pretensión, son las que definen el objeto procesal y crean los límites de la congruencia penal. El Tribunal habrá de decidir conforme a ellas.
• No pueden extenderse a hechos que no han sido objeto de calificación provisional.
• Tampoco puede extenderse a títulos de condena que conlleven alteraciones de la competencia objetiva o procedimiento aplicable.
• La forma ha de ser escrita en el proceso común y oral en el abreviado, levantando el secretario acta de su contenido.

2. LA TESIS DEL JUZGADO O TRIBUNAL.

A. Conclusiones definitivas y art. 733.

Practicadas las diligencias de la prueba, las partes podrán modificar las conclusiones de los escritos de calificación.

Podrán ser elevadas a definitivas o modificarse, siempre que no constituyan mutación esencial del objeto procesal, debiendo consistir en alteraciones en la petición de la pena o en el título de condena, pero nunca puede extenderse a nuevos hechos punibles, que no hayan sido objeto de calificación provisional y de actividad probatoria.

• Han de plasmarse por escrito, aunque el TS admite la forma verbal si la modificación fuera de escasa importancia, debiendo recogerse en el acta.

3. INFORMES Y ÚLTIMA PALABRA

Formalizadas las conclusiones, el presidente concederá la palabra a las partes para que oralmente realicen sus informes.

• En primer lugar el MF y los acusadores, públicos y privados.
• A continuación el actor civil, si lo hubiese, y
• Por último los defensores de los acusados y de los RRCC.

• Cada una de las partes fundamentará oralmente sus pretensiones, determinando:
  • Los hechos probados.
  • La calificación legal y
  • La participación del procesado.
  • Si se hubiera acumulado la acción civil, habrá de concretarse la cosa que deba ser restituida o la cuantía de los daños y perjuicios.

• Concluido el trámite, el presidente preguntará a los procesados si tienen algo que manifestar. Éstos son dueños de ejercitar el derecho al silencio o a la última palabra, cuidando el Presidente de que no ofendan la moral, el respeto al tribunal, ni el honor o fama de cualquiera, pudiendo retirarles la palabra. Lo que no debe hacer es omitir este trámite.
• A continuación el Presidente declarará concluso el juicio para sentencia, que redactará por escrito en el plazo de tres días. La sentencia habrá de ser de fondo, no cabe el sobreseimiento, motivada y congruente con todo lo planteado por las partes,
  • incluidas las faltas incidentales, la RC y el destino de las piezas de convicción.

• Contra las sentencias de las Audiencias provinciales en el procedimiento común ordinario cabe recurso de casación.

PROCESO POR SENTENCIA.

1. CONCEPTO DE SENTENCIA.

La sentencia penal es el acto jurisdiccional que pone fin al proceso resolviendo definitivamente la cuestión criminal (art. 141 LECrim).

La expresión es indicativa de dos fundamentos del proceso penal:

• Abierto el juicio oral, no existe otra forma de terminar el proceso que no sea la de sentencia; Solo con la resolución judicial en forma de sentencia se resuelve el objeto procesal penal, condenando o absolviendo al acusado.

2. LA GÉNESIS LÓGICA DE LA SENTENCIA: EL JUICIO HISTÓRICO Y JURÍDICO. SUS LÍMITES.

Para determinar si el acusado es o no responsable penalmente, el juzgador debe realizar un doble juicio:

• Un juicio histórico para determinar si un concreto hecho o conjunto de hechos ha existido realmente antes del proceso. Si obtiene un resultado negativo, no es necesario realizar el juicio jurídico.
• Un juicio jurídico para determinar si el hecho histórico es penalmente ilícito y merece la imposición de una pena.

A. Juicio histórico.

• El juicio histórico recae solo sobre los hechos acusados.

En esta primera fase del juicio penal, el órgano judicial se debe limitar a determinar si esos hechos se dieron o no en el pasado.

• Las pruebas y su posterior valoración son los instrumentos con que cuenta el órgano decisor para llevar a cabo su enjuiciamiento histórico. El problema se produce cuando:
  • Existe carencia absoluta de pruebas:

El resultado es la negación histórica del hecho acusado:

• • • se absuelve porque no están fijados históricamente los hechos que podrían ser objeto de calificación penal.

• • Las pruebas realizadas ponen en duda al juez.

El resultado es el mismo que en el caso de la falta de pruebas: no se puede hacer juicio jurídico penal, (in dubio pro reo).

• El órgano judicial apreciará las pruebas practicadas según su conciencia, ello es expresión exacta de lo que es un juicio histórico; la apreciación en conciencia no significa en ningún caso irracionalidad o falta de lógica o sentido común.