Portada » Psicología y Sociología » Exploración de los Trastornos del Pensamiento, Sueño y Alimentación
El pensamiento es una actividad mental no rutinaria que requiere esfuerzo. Podríamos definirlo como la capacidad de anticipar las consecuencias de la conducta sin realizarla. El pensamiento implica una actividad global del sistema cognitivo con intervención de los mecanismos de memoria, atención, procesos de comprensión, aprendizaje, etc. Es una experiencia interna. El pensamiento tiene una serie de características particulares, que lo diferencian de otros procesos, como por ejemplo, que no necesita de la presencia de las cosas para que éstas existan, pero la más importante es su función de resolver problemas y razonar. Es un término genérico con el que se designa a un proceso cognoscitivo que consta de un conjunto de actividades mentales (razonamiento, abstracción, generalización…) cuya finalidad es, entre otras, la resolución de problemas, adopción de decisiones y representación de la realidad externa.
LENGUAJE
PENSAMIENTO
Pensamientos que predominan sobre los demás por su tonalidad afectiva y que duran largo tiempo. Los temas que predominan son el honor, la afirmación social, el amor, la venganza (ej: fanatismo, enamorarse…)
Aparecen reiteradamente, son de carácter molesto y escapan al control del Yo. Determinan la búsqueda de estrategias para luchar contra ellas, pero sin éxito, ya que torturan al paciente con su presencia. Son ideas erróneas, absurdas para el propio sujeto, aunque se siente obligado a pensarlas repetitivamente y se acompañan de gran angustia. Se expresan como dudas, vacilaciones, escrúpulos, temores irracionales (TOC, esquizofrenia y en cuadros orgánicos).
Ideas falsas. Irrebatibles a toda argumentación lógica. Establecidas por vía patológica (diferenciándose de las creencias mágico-religiosas en las que priman factores socio-culturales). No derivadas de otras manifestaciones psicopatológicas, no tienen conexión con nada, ni comprensibilidad psicológica.
Tienen las características de las ideas primarias, pero siempre se derivan de otras manifestaciones psicopatológicas, por ejemplo, a partir de un fenómeno alucinatorio o de un estado de ánimo depresivo o eufórico (psicosis, trastornos afectivos). Tienen, por tanto, comprensibilidad psicológica porque el sujeto da una explicación o excusa al delirio.
Lo fundamental de una experiencia delirante primaria es que aparece un significado nuevo asociado a algún otro suceso psicológico.
Humor delirante o trema: Estado de ánimo caracterizado por la actitud de perplejidad y expectación ante la realidad exterior, que conlleva la vivencia de que las cosas suelen perder su significado habitual, sin llegar el paciente a captar qué pueden significar, pero con la certeza de que está en relación con él mismo (autorreferencialidad). Este estado se manifiesta por los «presentimientos» (algo importante y grave va a ocurrir), «ideas de vaga significación» (las cosas significan «algo» en relación con el paciente), «oscuras sospechas» y «vivencias de lo puesto» (los objetos son colocados y puestos para indicar «algo» al paciente).
Percepción delirante: Atribución de un significado nuevo, generalmente autorreferencial, a un objeto normalmente percibido. El paciente al percibir el objeto lo vincula con un significado descontextualizado (por ejemplo: un perro significa que el fin del mundo es inminente, o un cochecito de niño significa que lo van a matar). No existe ningún proceso de elaboración del significado del objeto percibido (lo que sería una interpretación), sino que la vinculación objeto-significado absurda se da en el instante de la percepción.
Ocurrencia delirante: Certeza súbita de carácter delirante, sin que medie percepción alguna. El fenómeno se produce en el pensamiento sin intervención de la percepción (ej: va a atropellar un coche, lo sé).
Interpretación delirante: Valoración delirante de hechos, actuaciones, ideas u otros fenómenos psíquicos correctos (por ejemplo: una persona que coge el autobús cada día a la misma hora y con la misma gente; un día una persona no le saluda cuando cada día lo hace; el paciente puede interpretar, por ejemplo, que hay un complot en su contra). Se establecen conexiones entre varios acontecimientos presentes y pasados, por lo que supone un trabajo de elaboración más complejo que en el caso de la ocurrencia o la percepción delirante.
Representación delirante o recuerdo delirante: Consiste en dar un significado nuevo a un recuerdo, de forma que el paciente interpreta el pasado con una configuración delirante (ejemplo: estuve ingresado el año pasado de manera ilegal, me obligaron mis padres cuando vieron que no podían envenenarme).
Delirio depresivo o ideas depresivas
La somnolencia diurna excesiva puede definirse como la somnolencia diurna e indeseada durante las fases de vigilia. Estos episodios puede presentarlos cualquier persona sin que ello signifique que existe una patología asociada.
Concepto: Trastornos en los que se incluyen desde hechos fisiológicos que se presentan fuera del estado de vigilia, hasta condiciones clínicas exacerbadas por el sueño y que afectan al sueño, a sus fases o la vigilia parcial.
La instauración de un tratamiento farmacológico racional del insomnio, especialmente cuando éste es crónico, debería guiarse por cinco principios fundamentales: