Portada » Lengua y literatura » Evolución de la Poesía Española: Del Modernismo a las Últimas Tendencias
Los siglos XX y XXI han sido testigos de un período muy intenso de importantes acontecimientos que han impactado profundamente en la cultura y el arte. La influencia de la tecnología, la globalización a través de internet y la televisión, y la mercantilización de la literatura y el arte, convirtiéndolos en productos de consumo, han marcado esta época. Además, el eclecticismo ha permitido que diferentes movimientos y tendencias artísticas se superpongan y convivan, generando una evolución constante y una notable abstracción en el arte.
El Modernismo surge durante la crisis de finales del siglo XIX y principios del XX. En España, este período se caracterizó por una situación de atraso debido a las pérdidas coloniales. Los rasgos principales del Modernismo incluyen una obsesión por las formas, la búsqueda de una belleza sensual y exquisita, la evasión hacia temas exóticos y una concepción musical y sonora del verso. Este movimiento llegó a España desde Hispanoamérica, de la mano del poeta nicaragüense Rubén Darío, su máximo exponente.
Los poetas españoles más significativos de este período son los hermanos Manuel y Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez.
El género preferido por los modernistas fue la lírica, destacando por su musicalidad y expresión. En cuanto a la métrica, se emplearon sonetos, silvas, romances, eneasílabos, dodecasílabos y alejandrinos. El ritmo, marcado por los acentos y el uso de pies anfíbracos (átona-tónica-átona), junto con la rima alternativa, monorrima y rima interna, aportaba un efecto musical. Los modernistas buscaban la musicalidad, la sonoridad y el colorismo a través de un léxico exquisito, adjetivación, sinestesias, hipérbatos, aliteraciones, metáforas e imágenes.
Antonio Machado y sus seguidores, conocidos como la Generación del 98, optaron por una lírica más sencilla y austera desde el punto de vista formal. Se centraron en el paisaje castellano, que amaban y criticaban a la vez, y en temas íntimos y existenciales.
Juan Ramón Jiménez es una figura difícil de encuadrar en un estilo concreto. Su obra se caracteriza por la búsqueda de la perfección formal y la pureza. Se distinguen tres etapas en su poesía:
Su obra influyó notablemente en las generaciones posteriores y en la forma de entender la poesía.
Las Vanguardias surgen en plena decadencia del Modernismo, a partir de los años veinte. Estos movimientos artísticos buscaban romper radicalmente con el concepto clásico de belleza, experimentando con nuevas formas y técnicas. Mostraban fascinación por la tecnología y una nueva concepción de la realidad, con una vocación universal.
En España, los movimientos vanguardistas más destacados fueron el Surrealismo, el Creacionismo y el Ultraísmo. Ramón Gómez de la Serna destacó por sus greguerías, que combinaban metáforas y humor.
La Guerra Civil, la dictadura y la importante población agraria marcaron profundamente a la Generación del 27, el grupo de poetas más relevante del siglo XX. Se distinguieron por su afán vanguardista y su interés en la tradición literaria española, tanto culta como popular. Lograron una síntesis entre tradición y modernidad, relacionándose con las Vanguardias a través de dos líneas: la tradicional y la renovadora.
Entre los autores más destacados del grupo se encuentran Federico García Lorca, Rafael Alberti, Vicente Aleixandre, Gerardo Diego, Jorge Guillén, Dámaso Alonso y Pedro Salinas.
La dictadura franquista y la posguerra influyeron en la poesía de posguerra, que se divide en tres etapas:
La transición hacia la democracia influyó en la poesía contemporánea, caracterizada por un gran eclecticismo. Se diferencian al menos tres etapas: