Portada » Geología » Estructura Interna de la Tierra: Capas y Métodos de Estudio
Capas de la tierra: Litosfera: Capa exterior mixta (formada por corteza y manto), sólida y rígida, que llega hasta los 100 km de profundidad en las zonas continentales y 50 km en las oceánicas. Se distinguen 2 clases de litosfera:
La litosfera está fragmentada en placas litosféricas que descansan en la Astenosfera.
La astenosfera es la zona del manto que está inmediatamente debajo de la litosfera, aproximadamente entre 100 y 240 kilómetros por debajo de la superficie de la Tierra. En la astenosfera existen lentos movimientos de convección que explican la deriva continental. Además, el basalto de la astenosfera fluye por extrusión a lo largo de las dorsales oceánicas, lo cual hace que se renueve constantemente el fondo del océano. El borde opuesto, cuando se enfrenta con el obstáculo representado por un continente, se hunde bajo este, volviendo así la materia del fondo a asumirse en la astenosfera, fenómeno conocido como subducción. Hay 3 tipos de placas según su composición:
Casi toda la superficie terrestre está ocupada por 7 grandes placas mixtas: Norteamericana, Suramericana, Africana, Euroasiática, Pacífica, Antártica y Australiana.
Hay también fragmentos pequeños de litosfera que se mueven empujados por las placas mucho más grandes que los rodean. Es el caso de las Baleares. Reciben el nombre de microplacas o litosferoclastos; es decir, fragmentos de placas.
El resto del manto superior situado bajo la litosfera está sometido a temperaturas y presiones tan altas que puede fluir lentamente como un líquido extremadamente viscoso.
Manto: El manto es una capa rocosa situada bajo la corteza y que llega hasta la superficie del núcleo, a 2900 km de profundidad. Está compuesto casi únicamente por peridotita, una roca cuyo mineral componente es el olivino. Tiene dos partes: Manto superior (hasta 1000 km), Manto inferior (hasta 2900 km). A los 670 km de profundidad, la presión es suficiente para producir la compactación de los minerales de la peridotita, que adquiere así una densidad mayor, haciendo que el manto inferior sea más denso que el superior.
Núcleo La composición del núcleo es metálica. Se calcula que tiene 85 % de hierro, 5 % de níquel y un 10 % de elementos no metálicos, fundamentalmente silicio, oxígeno y carbono. El núcleo tiene dos partes con la misma composición pero con diferente estado físico: Núcleo exterior (hasta 5100 km). Se encuentra en estado líquido. Su fluidez es similar a la del agua, y está agitado por violentas corrientes de convección. Estas corrientes son las que originan el campo magnético terrestre. Núcleo interior (hasta 6371 km). Se encuentra en estado sólido.
Discontinuidades sísmicas. Se reconocen algunas como:
Wegener El meteorólogo Alfred Wegener escribió en su libro “El origen de los continentes y océanos” una teoría revolucionaria que afirmaba que los continentes podían desplazarse, y que hacía 300 millones de años habían estado unidos formando una masa continental única a la que llamó Pangea. Pensaba que los continentes se movían resbalando sobre los fondos oceánicos, pero no podía explicar qué fuerza era capaz de empujarlos. Wegener aportó pruebas para defender su teoría, pero era demasiado increíble lo que él decía para creerlo, por lo que su teoría de la deriva continental cayó en el descrédito.
Métodos del estudio del interior de la Tierra.
MÉTODOS DIRECTOS
Prospecciones. Desventajas: incremento de temperatura con la profundidad, dificultades para maniobrar.
Estudio del magma. Toma de muestras no consolidadas de magma en el momento de la erupción y enfriadas rápidamente para el estudio de su composición mineralógica.
MÉTODOS INDIRECTOS
Estudio de los meteoritos. Los meteoritos ayudan a estudiar la composición y estructura de los planetas.
Gravimétricos:
Geotérmicos. La temperatura aumenta con la profundidad. Este gradiente geotérmico en su superficie es de 3º C cada 100 metros. El calor del planeta tiene su origen principalmente en la desintegración de materiales radiactivos de su núcleo exterior. El calor se transmite del interior al exterior por radiación y convección. El gradiente no es igual en todos los sitios: en zonas volcánicas es más alto y en zonas antiguas más bajo. El gradiente es válido solo para los primeros kilómetros, luego aumenta más lentamente hasta los 6.600 ºC en el mismo centro de la Tierra.
Magnetométricos. Registro del campo magnético registrado en las rocas volcánicas, por la alta presencia de minerales de hierro. Con este método se hacen mapas con las anomalías magnéticas del fondo marino.
El campo magnético de la Tierra es inestable y su polaridad se invierte cada cierto tiempo de forma que el polo sur magnético pasa a ocupar el polo norte magnético, y viceversa. Actualmente, el polo norte magnético está en la Antártida (polo sur geográfico), y el polo sur magn
ético está en el Océano Glacial Ártico (polo norte geográfico). // Estas inversiones ocurren a un ritmo irregular. En los últimos 5mm de años se han sucedido más de 20. // Estas inversiones quedan registradas en las rocas volcánicas que contienen minerales como la magnetita.
Cuando la lava se consolida, los cristales de magnetita quedan orientados en la dirección en que el campo magnético terrestre se encuentre en esa época. // Los geólogos F. Vine y D. Matthews publicaron los resultados de las medidas del magnetismo remanente de las muestras de basaltos recogidas en los fondos oceánicos. Las dorsales oceánicas presentan una intensa actividad volcánica y sísmica, como corresponde a zonas de fractura de la litosfera. La simetría en las bandas de magnetismo remanente de las rocas es una prueba de que en las dorsales se crea litosfera que es empujada hacia los lados a medida que va surgiendo más material por la dorsal.
Sísmicos. Consiste en el estudio del comportamiento de las ondas sísmicas al atravesar las distintas capas de la Tierra después de un seísmo. Es el método más importante. La distribución de volcanes y terremotos coincide con los bordes de las placas litosféricas. El “cinturón de fuego” del Pacífico es una zona de intenso vulcanismo y sismicidad que bordea los márgenes de este océano, donde la litosfera oceánica se hunde bajo los continentes que lo rodean. En estas zonas se forman cadenas montañosas e islas de origen volcánico.