Portada » Lengua y literatura » Narrativa Española del Siglo XX: Evolución y Vanguardias
La narrativa del último tercio del siglo XIX está presidida por un realismo analítico que se acerca a la realidad desde una perspectiva burguesa, la cual le impide enfocar y enjuiciar convenientemente lo social en todas sus dimensiones, dejando al margen la masa proletaria. Junto al realismo se desarrolla también la corriente narrativa del naturalismo que abre horizontes a la temática social, si bien con las limitaciones de la herencia y el ambiente, en las que se basa esta corriente.
Frente a esta narrativa de corte realista y naturalista, encarnada por escritores como Concha Espina y, sobre todo, Blasco Ibáñez con novelas naturalistas de tono social como La barraca (1899), aparece una corriente innovadora en la forma de entender y construir la novela, representada por los escritores del 98. La generación del 98 rechaza el realismo intentando una interpretación subjetiva e individualista de la realidad, basándose en la aceptación colectiva de la incapacidad de la razón para dar respuesta tanto a las preocupaciones individuales como sociales. La estructura de esta novela consiste en presentar un personaje central concebido ideológicamente que se enfrenta a unas situaciones de prueba y a unos interlocutores cuidadosamente seleccionados, ideados para explorar y tratar de solucionar sus dificultades. El resultado suele quedarse en un diagnóstico de la enfermedad individual y nacional, sin encontrar ninguna terapéutica adecuada. Se trata de una novela que se queda a medio camino entre la novela de tesis y la novela psicológica, y cuyas características son:
En torno a 1910 comienza a gestarse una nueva corriente antirromántica y antirrealista, presidida por el intelectualismo y el ideal de un arte puro, deshumanizado. Esta corriente, denominada novecentista, viene a suplir el agotamiento de la novela filosófica del 98, cediendo el paso a lo intelectual y a lo lírico para proporcionar el goce artístico puro. Más adelante, en la década de los 20, además de continuar la novela lírico-intelectual de raíz novecentista, aparece la novela humorística, de influencia vanguardista. Finalmente, hacia 1930 toma impulso una nueva corriente de rehumanización del arte, con una narrativa que plantea la confrontación entre las masas y el poder establecido, dando lugar a una novela social. Esta narrativa de reivindicación social sufrió un retroceso a raíz de la guerra civil, recuperándose en parte durante la década del 40 con novelas consideradas como parasociales; hasta que a mediados de los 50 vuelve a resurgir con fuerza el denominado realismo social.
Nacido en Bilbao en 1864, estudió Filosofía y Letras en Madrid y en 1901 consiguió la cátedra de griego en la Universidad de Salamanca, en la que desempeñó el cargo de Rector. En su juventud defendió las ideas socialistas, pero más adelante adoptó posturas más irracionalistas y espirituales. Renovó el género narrativo con la creación de la nivola. Se trata de un modelo narrativo entendido como método de conocimiento aplicado a la búsqueda de soluciones frente al ansia de inmortalidad, y caracterizado por:
Esta técnica unamuniana comienza con la novela Niebla, en la que aparece el monólogo interior, y cuyo contenido se basa en el conflicto existencial entre el ser y el existir; le siguen otras como La tía Tula, sobre la maternidad y San Manuel Bueno, mártir, en la que plantea el conflicto entre razón y fe. Anteriormente había escrito otras novelas como Paz en la guerra, análisis intrahistórico de las guerras carlistas; seguida de Amor y pedagogía, sátira contra la educación cientificista.
Nacido en San Sebastián en 1872, estudió Medicina en Madrid pero abandonó pronto la práctica médica para dedicarse al periodismo y la literatura. De carácter independiente e inconformista, comenzó defendiendo las ideas regeneracionistas y anarquistas y acabó en el pesimismo y el escepticismo. Considerado como el novelista más importante de su época, concibe la novela como el género en el que cabe todo: reflexión filosófica, confesiones políticas, aventuras, humorismo, crítica social, etc. Otras características de su técnica narrativa son:
Su novelística es muy extensa, pudiéndose distinguir cronológicamente tres etapas: 1ª.- De 1900-1912: Son las novelas que reflejan mejor, tanto su personalidad, como el espíritu del 98, con personajes en conflicto consigo mismo y con el medio. La primera fue Camino de perfección, seguida de la trilogía La lucha por la vida, El árbol de la ciencia, Zalacaín el aventurero y Las inquietudes de Santi Andía. 2ª.- De 1913-1936. Etapa de menor creatividad en la que destaca la serie de Memorias de un hombre de acción, en torno a las aventuras de Eugenio Aviraneta, conspirador y guerrillero del S. XIX. 3ª.- De 1937-1956. De esta época destacan sus memorias, bajo el título Desde la última vuelta del camino, que constituyen un documento clave tanto para el conocimiento de su personalidad como para el conocimiento de la época.
Conocido por el seudónimo de Azorín y nacido en Monóvar (Alicante) en 1873, estudió Derecho en Valencia, marchándose posteriormente a Madrid para dedicarse al periodismo y la literatura. En su juventud mantuvo una postura ideológica radical cercana al anarquismo, pero más tarde evolucionó hacia posiciones conservadoras y tradicionalistas. En el género narrativo propugna una novela evocadora de la realidad fugitiva mediante descripciones impresionistas sin enlace cronológico. Los rasgos más destacados de su novela son:
Su obra novelesca puede agruparse en cuatro bloques: a) Autobiográfico, representado por obras como: La voluntad, Antonio Azorín y Las confesiones de un pequeño filósofo; centradas en las impresiones suscitadas por el paisaje. b) Existencial, representado por obras como: Don Juan y Doña Inés, centradas en la obsesión por el tiempo y el destino. c) Vanguardista, representada por obras como: Superrealismo y Pueblo. d) Esteticista, representado por obras como: El escritor y La isla sin aurora, centradas en reflexiones sobre el arte literario.
Nacido en Vilanova de Arousa (Pontevedra) en 1866, estudió Derecho en Santiago de Compostela, pero no llegó a terminarlo, trasladándose a Madrid para trabajar como periodista. Aunque estuvo dos temporadas en México, terminó por instalarse definitivamente en Madrid, si bien, al final de su vida, regresó a Santiago de Compostela donde murió. Su carácter bohemio, rebelde y crítico evolucionó desde posturas tradicionales hacia una ideología revolucionaria.
Aunque escribió poesía y novela, destacó en el género teatral, evolucionando desde la estética modernista hasta el esperpento (visión deformada y grotesca de la realidad). En el terreno de la novela podemos distinguir dos etapas:a) La novela modernista, sensual y musical, representada por las Sonatas, relatos autobiográficos centrados en las aventuras amorosas del Marqués de Bradomín, símbolo de un mundo aristocrático y decadente enmarcado en un paisaje gallego primitivo.b) La novela histórica, representada inicialmente por la trilogía La guerra carlista, que tiene también como protagonista al Marqués de Bradomín, enmarcado en un ambiente gallego mítico y supersticioso, evolucionando estéticamente hacia un lenguaje más crítico. A partir de los años 20 sigue con la novela histórica, pero cambiando a una estética esperpéntica, en obras como la trilogía El ruedo ibérico (sátira sobre la corrupción de costumbres en la corte de Isabel II) y Tirano Banderas (sátira contra la tiranía del caudillo sudamericano Santos Banderas. 2.2) La narrativa novecentista2.2.1) Ramón Pérez de Ayala (1880-1962)Nacido en Oviedo, estudió Derecho, si bien se dedicó al periodismo y a laliteratura, llegando a ser miembro de la Real Academia Española.Aunque escribió poesía y ensayo, su obra más representativa corresponde al campo de la narrativa, que suele dividirse en dos etapas:a) Realismo pesimistaExpresa una visión pesimista de España en obras como AMDG, sátira contra el sistema educativo de los jesuitas,con los que se educó, y Troteras y Danzaderas, en la quecritica la vida literaria de su época.b)Simbolismo caricaturescoPlantea temas intelectuales centrados en conflictosexistenciales como la soledad y las relaciones amorosas, enobras como Belarmino y Apolonio, donde analiza el tema dela lucha transcendental en un alma profundamente religiosa; yTigre Juan, que aborda el tema de la honra y el donjuanismoEn general, sus relatos destacan por elintelectualismo y el humor irónico, y suestilo presenta un lenguaje cuidado, con un léxico rico que mezcla lo culto y lo popular.2.2.2) Gabriel Miró (1879-1930)Nacido en Alicante, ocupó diferentes puestos administrativos en Madridy Barcelona, que alternó con la literatura y con colaboraciones en diversos periódicos.Sus novelas, calificadas de líricas, se caracterizan por la expresión desentimientos y la descripción minuciosa de sensaciones, con ausencia de acción,estructurándose en escenas dispersas, unidas a través de la reflexión y el recuerdo.Su obra suele dividirse en dos etapas:a) Modernista-decadentistaPresenta personajes y ambientes decadentistas yneorrománticos mediante un lenguaje brillante y sonoro, enobras como Las cerezas del cementerio, en la que aparecenunos personajes muy sensibles que se ven abocados al fracaso,ante su inadaptación entre la realidad y la imaginación.b) NovecentistaAdopta una actitud más crítica, presentando una mínimaacción que sirve de base a unas minuciosas descripcionesllenas de sensaciones y ambientes, en obras como Nuestropadre San Daniel y El obispo leproso, en las que narra lahistoria de la represión que el poder eclesiástico ejerce sobrela familia Egea y la ciudad de Oleza.2.3) La narrativa de la década de los 20:La narrativa que surge en esta época viene marcada por una actitud antirrealista y por un afán experimental de influencia vanguardista, tomando elementos de los
descubrimientos científicos tecnológicos y artísticos de la época.
Entre sus rasgos se puede destacar:- Ruptura con la disposición lineal del tiempo y cambio de perspectiva narrativa
– La imaginación y la fantasía como fuentes fundamentales de
la creación artística- La sátira y la parodia como elementos esenciales de laestructura novelescaSe pueden distinguir dos vertientes novelescas:a) La novela lírico intelectual.la narración se estructura líricamente, de modo que más que unacadena de hechos novelados, se trata de una orquestación desensaciones, apoyada en elementos integradores como el mito o elarquetipo literario.Representantes de este tipo de novela son:a.1) Benjamín Jarnés, que analiza la realidad desde un punto de vistasensorial, influenciado por Gabriel Miró; al mismo tiempo que tomaelementos de las vanguardias como la técnica pictórica del cubismo,las metáforas humorísticas de Gómez de la Serna y las surrealistas, lautilización libre del tiempo o la superposición de espacios. Su novelaevoluciona desde un máximo de preocupación por el estilo, como en El convidado de papel (1928) hasta un máximo de preocupación porla construcción, como en Locura y muerte de nadie (1929). a.2) Francisco Ayala, que en su primera etapa novelesca entre 1925 y1930 se centra en lo puramente imaginativo y estetizante, resultadode la aplicación de técnicas cinematográficas al arte narrativo,dándonos los diferentes aspectos de un objeto contemplado desdeángulos distintos; no obstante podemos distinguir dos estilosdiferentes:- Empleo de la técnica narrativa tradicional heredada de la novelaespañola tradicional, especialmente de los Siglos de Oro, en obras como Tragicomedia de un hombre sin espíritu (1925).- Empleo de técnicas vanguardistas, en obras como El boxeador y un ángel (1929), con un atrevido empleo de la imagen, rindiendo culto al Ultraísmo. b) La novela humorísticaSe trata de una narrativa influenciada por el humorismo vanguardista extravagante y llamativo, con exuberante imaginería, de Ramón Gómez de la Serna; así como por las teorías de Ortega y Gasset queconsidera al arte como intrascendente, como puro juego.Entre sus recursos destaca la preferencia por tipos o situaciones inverosímiles, así como la tendencia a elegir motivos y efectos grotescos, usando piruetas metafóricas y paradojas brillantes. Representantes de esta novela son: b.1) Ramón Gómez de la Serna, que dirigió la revista Prometeo, en la que aparecieron los primeros manifiestos vanguardistas, y fundó las tertulias literarias del Café Pombo, difundiendo el arte nuevo con la invención de la greguería que definió como humorismo + metáfora (El platillo es el sol de la orquesta, Un tumulto es un bulto que le suele salir a las multitudes). Su carácter sarcástico y crítico se ve reflejado en novelas como El chalet de las rosas (1923), en la que analiza la psicología criminal, El torero Caracho (1926), que presenta una visión grotesca del ambiente taurino, El caballero del hongo gris (1928), donde describe el mundo de la vana apariencia y la superficialidad, y La nardo (1930), encarnación de la sensualidad castiza madrileña. b.2) Jardiel Poncela, que presenta protagonistas absurdos y grotescos dentro de una acción desligada de toda conexión lógica o previsible, en obras como Amor se escribe sin hache (1929), cuyo tema dominante es el erotismo tratado humorísticamente con el fin de desmitificarlo. b.3) Edgar Neville, que presenta un humor más fino y depurado, conuna carga de humanidad y cordialidad, parodiando algunos esquemasnarrativos, tales como el de la novela rosa o el de la novela deaventuras. De entre sus novelas destaca Don Clorato de Potasa(1929), que representa la encarnación máxima del tipo disparatado yaudaz, poniendo en tela de juicio la vertiente ridícula y convencionaldel cursi mundo contemporáneo.