Portada » Lengua y literatura » Poesía Española del Siglo XX: Modernismo, Generación del 98, Novecentismo y Generación del 27
Los modernistas fueron escritores con impulsos estéticos y artísticos innovadores. En su obra, recreaban ambientes exquisitos y extraños mediante la evocación de todo tipo de sensaciones. Exploraban el mundo interior, a veces con una visión vitalista y sensual, y otras con tristeza, melancolía y nostalgia.
La Generación del 98 adoptó una actitud de reflexión y crítica ante la situación política, social y económica de España. El tema de España, incluyendo sus tierras, historia y preocupaciones existenciales (el sentido de la vida, el paso del tiempo y la muerte), fue central en sus obras.
En la obra de Antonio Machado se observa una evolución desde el modernismo hacia la búsqueda de una palabra sencilla y verdadera. En su etapa modernista, expresó el amor con un estilo modernista. En su etapa noventayochista, destaca Campos de Castilla, una reflexión sobre la realidad de España con una actitud crítica hacia el atraso y la pobreza. También exploró inquietudes filosóficas en diversos conjuntos poéticos.
El Novecentismo, también conocido como Generación del 14, es el movimiento cultural característico de la segunda década del siglo XX en España. El inicio de la Primera Guerra Mundial marcó a esta generación.
Juan Ramón Jiménez, Premio Nobel en 1956, realizó varias antologías de su obra. Se distinguen tres etapas:
La Generación del 27, un movimiento efímero con Ramón Gómez de la Serna como máximo representante, supuso una ruptura con la literatura anterior. Influenciados por el futurismo, cubismo, ultraísmo y surrealismo, buscaron un hombre nuevo.
Este grupo de poetas (Pedro Salinas, Jorge Guillén, Gerardo Diego, Dámaso Alonso, Federico García Lorca, Vicente Aleixandre, Rafael Alberti, Luis Cernuda, Emilio Prados y Manuel Altolaguirre) fue guiado por Juan Ramón Jiménez hacia la poesía pura hasta 1927. Desde ese año hasta la Guerra Civil, se marcó la cima y el descenso de sus ideales estéticos. Con el surrealismo, los sentimientos humanos cobraron protagonismo. Tras la Guerra Civil y la muerte de Lorca, el grupo se exilió, cada uno siguiendo su propio rumbo poético.
La poesía de Federico García Lorca (1898-1936) se divide en dos etapas:
Luis Cernuda (1902-1963), influenciado por Bécquer y el surrealismo, publicó Placeres prohibidos. En 1936, reunió su poesía en Realidad y el deseo. En 1962, incorporó El Díptico español.
Rafael Alberti pasó por tres etapas:
Durante la República, escribió poesía comprometida.
Vicente Aleixandre (1898-1984) utilizó el verso libre en su etapa surrealista. Tras la posguerra, escribió Sombra del paraíso. En su poesía de senectud, como en Poemas de la consumación, predominan la reflexión y la meditación sobre el fin de la vida.
Pedro Salinas (1891-1951) escribió La voz a ti debida, Razón de amor y Largo lamento. Su poesía, con un estilo sencillo, adquirió tintes más dramáticos en su último libro, Confianza.
1893-84 es el máximo representante de la poesía pura. Sus dos obrras mayores son: Cáticos y Clamor.Utiliza un lenguaje muy concentrado, prefiere las oraciones breves , el estilo nomianl , los infinitivos, los monosílabos y las exclamaciones Gerardo diego 1896-87 sus obras suelen clasificarse en dos grupo la poesia de creación u la poesía de expresion o tradicional en la que destaca El romancero de la novia Dámaso Alonso 1898-91 está considerado como el principal crítico de la Gen. del 27, es hijo de la ira. El poeta pregunta a Dios sobre el sentido de tanta podredumbre