Portada » Economía » Análisis de Ratios Financieros: Liquidez, Solvencia y Endeudamiento
Mide la capacidad de la empresa para hacer frente a las deudas a corto plazo con el efectivo disponible (caja y bancos). Relaciona el efectivo con el pasivo corriente. Se debe tener en efectivo, entre un 0,1 (10%) y un 0,5 (50%) del total de deudas a corto plazo.
Comentario: Si se encuentra por encima del intervalo, sobrepasa el 0,5, significa que tiene exceso de liquidez y puede llegar a tener recursos ociosos (no invertidos). Si está por debajo del intervalo, menor que 0,1, diremos que tiene problemas de liquidez en la tesorería y no podrá hacer frente a un pago inmediato. Si está dentro del intervalo, tiene liquidez suficiente para ir pagando deudas a su vencimiento.
Mide la solvencia de la empresa, es decir, su capacidad para generar los suficientes medios líquidos que le permitan hacer frente a sus obligaciones de pago a corto plazo. Relaciona el activo corriente (cuentas de efectivo, existencias y todos los deudores comerciales) con el pasivo corriente. Debe ser mayor que 1, es decir, disponer de una cantidad mayor que la que tiene que pagar, y hasta el doble de ella.
Comentario: Si es igual a la unidad, es una situación peligrosa, porque está en el límite y puede tener problemas puntuales de liquidez para enfrentar deudas, si algún cliente se demora en el pago o no vende existencias. Si es inferior a la unidad, los activos corrientes no pueden hacer frente a las deudas contraídas y hay riesgo de caer en suspensión de pagos. Si supera el doble (2), puede haber recursos ociosos o no productivos. En este caso, se suele optar por disminuir tesorería y/o existencias.
Se refiere a la capacidad de los activos de la empresa para hacer frente a la totalidad de las obligaciones contraídas, es decir, mide la seguridad que tienen los acreedores de cobrar sus deudas, tanto a corto como a largo plazo. Se recomiendan valores entre 1 y 2,5.
Comentario: Si está por debajo de 1, la empresa está en quiebra técnica, es decir, ni vendiendo los activos (inmovilizados y corrientes) podría enfrentar sus deudas. Si se encuentra dentro del intervalo, podremos decir que la empresa puede hacer frente a la totalidad de sus deudas y si se encuentra por encima del intervalo (poseer en activos más del doble de lo que se debe), podremos decir que la empresa podría tener exceso de activos.
Mide la dependencia que tiene la empresa de los recursos ajenos. Se aconseja un cierto grado de endeudamiento, siempre que esté entre un 0,5 (50%) y 0,6 (60%) del pasivo total.
Comentario: Si está por encima del 60% (pocos fondos propios – poca autonomía – endeudada), no se recomienda más endeudamiento y se deben aumentar los fondos propios; si está por debajo (autonomía – poco endeudamiento), se recomienda no depender tanto de los fondos propios y se permite más endeudamiento, si fuera necesario. Si está en el intervalo, guarda una proporción de recursos propios, respecto a los ajenos, adecuada; por tanto, está endeudada en su justa medida.
Fondo de Maniobra = Activo Corriente – Pasivo Corriente (normalmente mayor que 0)
El equilibrio financiero existe cuando una empresa puede hacer frente a todos sus compromisos de pago cuando éstos vencen.
Se produce normalmente en el momento de creación de la empresa, de forma que el activo coincide con los fondos propios. El FM es positivo, quizás excesivo (FM = AC > 0).
Por propia operatividad, ningún suministro, ni de materias primas ni de otro tipo, se paga al contado. Por pequeño que sea el plazo, ya habremos generado un exigible a corto plazo.
Ha de endeudarse moderadamente para utilizar capitales ajenos y aumentar así la rentabilidad.
Para que el equilibrio financiero se mantenga siempre, debe tenerse en cuenta que el activo corriente debe superar al pasivo corriente. FM = AC – PC; como AC > PC, entonces FM > 0 (positivo).
La dimensión del FM está en función de las necesidades de la empresa y de las características del sector de actividad (y de los plazos de pagos y cobros). Solo tiene que vigilar que el FM sea el necesario para la actividad.
Esta situación se produce cuando el pasivo corriente supera al activo corriente (PC > AC) y pasa a financiar parte del inmovilizado. FM = AC – PC; como AC < PC, entonces FM < 0 (negativo).
Una empresa en situación de suspensión de pagos tiene problemas de liquidez a corto plazo. Puede salir de esta situación mediante un incremento de la financiación permanente (recursos propios) o a largo plazo (pasivo no corriente), hasta que recupere su capacidad de pago a corto plazo. Debe ampliar el plazo de pago a sus proveedores, planificar mejor su tesorería y renegociar las deudas con los acreedores.