Portada » Biología » Biología: Fotosíntesis, Meiosis, Reinos y Mitosis
La fotosíntesis es el proceso fundamental por el cual las plantas fabrican su propio alimento. Se basa en la capacidad de los vegetales para transformar la energía del sol en energía química, la cual almacenan en los enlaces de determinadas moléculas. Gracias a este proceso, son posibles los distintos tipos de vida que observamos en la Tierra.
Este proceso se realiza en los seres que poseen el pigmento clorofila, localizado en orgánulos celulares destinados a este fin. Los seres poseedores de clorofila son los vegetales verdes y algunas bacterias. En los vegetales verdes, estos orgánulos son los cloroplastos, estructuras laminares que existen en muchas células vegetales. En las bacterias que la poseen, la clorofila está localizada en gránulos muy pequeños llamados cromatóforos.
La energía luminosa es captada por una molécula de clorofila, que queda enriquecida en energía. Esta molécula «excitada» se encuentra en un estado inestable y, para volver al estado de menor energía, que sí es estable, necesita desprenderse de la energía que le proporcionó la luz. Esta energía, que ahora desprende, no es luminosa, sino química.
La reacción química que se produce en la planta es la formación de una sustancia muy rica en energía, importante para los seres vivos, que contiene ácido fosfórico en su molécula. Las principales consecuencias de esta formación para el vegetal y el medio ambiente son:
La meiosis es un proceso de división del núcleo celular que tiene por objeto formar núcleos hijos con la mitad de cromosomas de la célula madre. El número de cromosomas que posee la célula madre antes de la meiosis se denomina diploide, mientras que el número de cromosomas de las células hijas se denomina haploide.
Los cromosomas se espiralizan, haciéndose visibles. Después, desaparece la membrana nuclear y se organiza el huso acromático.
Los cromosomas se colocan en el ecuador del huso. Previamente, se han apareado; es decir, se han adosado estrechamente los dos cromosomas homólogos de cada pareja.
Los cromosomas apareados se separan y los componentes de cada pareja emigran hacia un polo distinto de la célula. Los dos grupos de cromosomas que se reúnen en cada polo tienen un número haploide, y cada uno de estos cromosomas está formado por dos cromátidas.
Se forma una membrana nuclear alrededor de cada uno de los grupos de cromosomas, formándose así los dos núcleos hijos.
Suele ser muy corta, ya que la segunda división sucede inmediatamente a la primera y los cromosomas suelen estar ya espiralizados. Se organizan dos husos acromáticos, perpendiculares al que presidió la primera división, desapareciendo la membrana nuclear, que a veces ni llega a formarse.
Los cromosomas de ambos núcleos se disponen en el ecuador de los husos respectivos.
Se separan las dos cromátidas de cada uno de los cromosomas, que se dirigen a los polos opuestos de los husos. El resultado es la formación de cuatro grupos de cromátidas con un número haploide cada uno.
Se forma una membrana alrededor de cada grupo de cromátidas, de manera que quedan constituidos cuatro núcleos hijos. El balance final de la meiosis ha sido formar, a expensas de una célula madre diploide, cuatro células haploides.
Este reino incluye a todos los seres vivos de organización procariótica; es decir, de estructura citoplasmática muy sencilla, con carencia de todos los orgánulos excepto los ribosomas y, lo que es más característico, la ausencia de una membrana nuclear que envuelva al material hereditario. Su división, por tanto, no es mitótica. Son seres muy primitivos, microscópicos y muy abundantes. A este reino pertenecen las bacterias y las cianobacterias (algas verde-azuladas).
En este reino se incluyen organismos muy variados, tanto de apariencia vegetal como animal, unicelulares o pluricelulares, pero sin diferenciación celular ni tejidos. Los protoctistas son organismos eucariotas y aerobios. Se incluyen en este reino las algas y los protozoos.
En este reino se incluyen organismos eucariotas unicelulares o pluricelulares con apariencia de vegetales, pero de nutrición heterótrofa mediante la absorción de alimento previamente digerido en el exterior de las células, gracias a la secreción de potentes enzimas.
Las metafitas o plantas son organismos eucariotas, fotosintéticos y pluricelulares, primordialmente terrestres. Tienen diferentes grados de diferenciación celular, que va desde la existencia de una capa celular externa parecida a la epidermis hasta la diversificación de tejidos que aparecen en las plantas superiores.
Comprende a todos los organismos pluricelulares con características típicamente animales. Son eucariontes, no realizan la fotosíntesis (siendo, por lo tanto, heterótrofos), y sus células especializadas se asocian en grupos formando tejidos, los cuales, a su vez, forman órganos, cuya agrupación da lugar a los aparatos y sistemas presentes en los más evolucionados.
La reproducción celular es un proceso previo a la reproducción de los organismos, que permite que, a partir de una célula madre, se formen dos o más células hijas idénticas a la progenitora.
Es la fase previa a la profase y posterior a la telofase, ya que el proceso es continuo.
Es la fase más importante y larga de la mitosis. Los dos centriolos se separan, formándose entre ellos el huso mitótico. El nucléolo y la membrana nuclear comienzan a desintegrarse y desaparecen al final de esta fase. La cromatina del núcleo, que en la interfase presenta un aspecto grumoso, va cambiando y se transforma en unos filamentos dobles que cada vez se hacen más patentes al acortarse y engrosarse.
Los filamentos se encuentran espiralizados, muy cortos y gruesos, formando los cromosomas. Éstos están divididos en dos partes idénticas llamadas cromátidas, idénticas en forma e información. Los cromosomas se colocan en el ecuador de la célula, formando un conjunto plano que recibe el nombre de placa ecuatorial.
En esta fase se separan las cromátidas, una a cada polo de la célula, consiguiendo al final una cromátida de cada cromosoma en cada polo.
Las cromátidas llegan a los polos de la célula y, alrededor de cada grupo de cromátidas, se forma una membrana nuclear y aparecen los nucléolos. El huso mitótico empieza a desaparecer y cada centriolo se duplica.