Extinción de la Evitación y Castigo Positivo

Relevancia Clínica de la Evitación

La evitación juega un papel crucial en diversos trastornos psicológicos:

• Trastornos de ansiedad: Por ejemplo, en la fobia a las arañas, se evita todo contacto con el estímulo fóbico (arañas). Esto produce un refuerzo negativo, perpetuando la evitación de situaciones donde pueda haber una araña.
• TOC: Los rituales que se realizan para reducir (o evitar) la ansiedad serían la respuesta instrumental de evitación. Es muy limitante porque dedican demasiado tiempo a estas respuestas. Los pacientes se ven influenciados por la fusión pensamiento-acción, es decir, creen que por hacer X, va a pasar Y.
• Adicciones: Consiste en la aparición de malestar ocasionado por la ausencia de la droga, que refuerza la conducta instrumental de consumo, evitando así el malestar.

Por Tanto:

Resulta disfuncional porque impide que el paciente experimente la carencia de correlación entre el estímulo temido y las posteriores consecuencias aversivas que las conductas de evitación pretenden eliminar. La evitación puede ser efectiva a corto plazo, pero no es adaptativa mantenida en el tiempo.

Extinción de la Evitación

La extinción de la conducta de evitación es difícil porque unas pocas experiencias de evitación tienen efectos muy duraderos.

Técnica: Exposición con Prevención de Respuesta

Consiste en:

• Presentar el EC en solitario (sin el EI), con el fin de extinguir el condicionamiento clásico que lo impulsa. Se romperá la asociación entre EC y EI, haciendo que la persona deje de tener miedo (perdiendo el estado emocional condicionado), ya que cuando el EC era un simple estímulo neutro, no daba miedo porque no estaba asociado al EI (que es el que biológicamente da miedo). Por ejemplo: se presenta un mueble lleno de polvo (EC), pero no ocurre el EI (enfermedad, por ejemplo).
• Prevenir la ejecución de la conducta de evitación, con el fin de romper el ritual. Ante la presentación del estímulo discriminativo (polvo) que le incita a realizar la respuesta (lavarse las manos), vamos a impedir que ejecute dicha conducta. De esta manera, terminan de romperse las asociaciones clásicas (polvo-enfermedad) e instrumentales (polvo-lavarme las manos-no enfermedad).

Castigo Positivo (Evitación Pasiva)

La conducta produce una consecuencia aversiva (el estímulo punitivo). Por tanto, el resultado es la disminución o inhibición de la respuesta castigada, con el fin de evitar sus consecuencias aversivas. Se trata, por tanto, de una evitación pasiva (ya que evitas el castigo al no emitir la conducta).

Factores que Favorecen la Eficacia del Castigo

• Intensidad de la Estimulación Aversiva y Forma de Introducción: La estimulación debe ser, al menos, moderadamente aversiva al inicio. Cuando se usa un castigo moderadamente aversivo desde un principio, aunque se produzcan reducciones posteriores en la intensidad (de la aversividad del castigo), se siguen manteniendo niveles bajos de comportamiento (el castigo sigue siendo eficaz). Niveles bajos de intensidad inicial no solo no reducen la probabilidad de conducta, sino que impiden que niveles más altos de intensidad lo hagan posteriormente. Es decir, empezar aplicando un castigo poco aversivo hace que la conducta se siga repitiendo aunque más adelante se aumente la aversividad del castigo.
• Contigüidad RC Aversiva: El resultado general de la demora en el estímulo punitivo es la menor supresión de la conducta castigada. Cuanto menor sea la demora (más inmediato sea el castigo), más eficaz será el castigo y más se reducirá la conducta castigada.
• Contingencia RC Aversiva: La supresión de la conducta es mayor si el estímulo punitivo es producido por la respuesta que si ese mismo estímulo se administra independientemente de la conducta (en este último caso, lo que se genera es indefensión aprendida). El sujeto deja de realizar las conductas porque comprende que conllevan un castigo. Si no hay contingencia (si se castiga unas veces y otras no) no podrá asociarse la respuesta con el castigo, por lo que seguirá ejecutando la conducta.
• Programas de Castigo: Importancia de administrar el estímulo punitivo de forma consistente; el sobreentrenamiento para conseguir reforzadores especialmente poderosos (drogas) puede hacer ineficaz un programa de castigo de la respuesta que conduce a la obtención de dicho reforzador. Este tipo de reforzadores son tan potentes que hacen que la conducta se automatice. La conducta va a seguir llevándose a cabo aunque sea castigada, así que el castigo resulta inútil en estos casos.
• Evitar Castigo como Señal de Disponibilidad de Refuerzo: Si la respuesta castigada es, además, la única fuente de un determinado reforzador, el castigo no va a ser eficaz.