Portada » Español » Análisis de la Lírica Religiosa y el Lazarillo
Es un amor neoplatónico*, inalcanzable, más sensual que el medieval, espiritual y purificador que se inicia con el enamoramiento a través de la mirada (cada amante queda guardado en el alma del otro). Aparece como algo que se padece, ajeno a la voluntad (enfermedad). El amante no vive en sí mismo, sino en la amada (enajenación) y este amor le sirve como medio de perfeccionamiento moral, es desdeñado por la amada y esto le provoca sufrimiento. El amor es muerte voluntaria, dulce y amarga a la vez (felicidad-dolor, antítesis)
* La belleza exterior es imagen de la interior y de la de Dios. La mujer aparece idealizada y es símbolo de todas las perfecciones de la naturaleza (como muestra de la belleza divina).
El erasmismo es una corriente ideológica que critica las corrupciones acumuladas por la Iglesia y la necesidad de reforma para volver a la simplicidad del cristianismo primitivo (espiritualidad). Denuncia la corrupción del clero (vivir en función de tus intereses materiales individuales: avaricia, lujuria, falsedad…), la ignorancia de los frailes, las prácticas piadosas artificiales o supersticiosas y la vanidad de los ritos. Erasmo propone consejos morales para que los laicos vivan cristianamente, el hombre tiene la capacidad de redimirse por las buenas obras. En el Lazarillo, el cura de Maqueda representa la figura de la avaricia que tanto denuncia el erasmismo.
En el Tratado II, el Lazarillo tiene como amo al cura de Maqueda que es extremadamente avaro. El hambre que le hace pasar será su motor de aprendizaje y le obligará a ingeniar continuas tretas para mantenerse.
En el Tratado IV y V se pone al servicio de un fraile y un vendedor de bulas (documentos papeles que otorgaban ciertos privilegios), con ellos comprueba cómo el engaño se había convertido en un patrón habitual de conducta, recurren al soborno de los curas para su beneficio.
Tiene “libre albedrío” en sus aventuras con sus amos que lo llevan a sufrir penalidades y al término de sus días una aparente holgura. El antihéroe debe reunir tanto rasgos positivos como negativos, cómicos como serios… Recurre a estrategias de supervivencia que se van evidenciando conforme azarosamente se van viendo las desventuras y pruebas de la vida que tiene que afrontar. La escala de antivalores que aprende en su vida supone la degradación moral: la nueva novela.
Individualismo: cada uno actúa por sus propios intereses materiales, sirviéndose del engaño y aprovechándose de los otros. Esta visión construye el aprendizaje y la visión del mundo del protagonista.
El pragmatismo también (las cosas se valoran por su utilidad práctica).
El papel del ciego: es el ciego el que por su carácter irascible (lo escarmenta violentamente) y suspicaz le abre los ojos a Lázaro sobre la realidad y la importancia de la astucia en la vida y le priva de esa inocencia infantil que tenía.
El Lazarillo es una obra autobiográfica dirigida a “vuestra merced”. Cuando Lázaro escribe la carta, se encuentra en el mayor auge de su oficio como pregonero y le resta importancia a la infidelidad de su mujer. En la carta se explica los acontecimientos que le han llegado a ser cómo es y estar está. Paradigma del antihéroe: libertad y destino. También se explica que la libertad es solo ilusión ya que está marcado por el destino. Y él mismo piensa que no puede aspirar a más por sus orígenes humildes.