Portada » Latín » Panorama de la Literatura Romana: Teatro, Lírica y Oratoria
Las farsas son pequeñas representaciones basadas en la vida cotidiana, en la que aparecen actores no profesionales cubiertos por máscaras.
El mimo era representaciones en que hombres y mujeres sin máscaras daban vida a escenas de la vida diaria.
Las primeras representaciones se deben a Livio Andronico, a quien se le encargó la puesta en escena de una tragedia y una comedia, para celebrar los Ludi Romani.
La Fábula Palliata se inspira en la Comedia Nueva ateniense. Los máximos representantes de esta comedia nueva son Difilo, Filemón y Menandro. Reflejaba la vida privada de las clases acomodadas. La acción gira en torno a la vida y costumbres de una serie de tipos fijos. Las situaciones eran atemporales.
Fue el autor más popular. Nació en Sarsina. En su juventud trabajó en compañías dramáticas, para adquirir conocimiento sobre aspectos técnicos y del repertorio tanto griego como romano. Posteriormente se dedicó al comercio pero fracasó, por lo que se vio forzado a trabajar como esclavo. Escribe tres obras que obtienen un rápido éxito y que lo convierten en el ídolo de los espectadores. En Plauto no encontramos alusión alguna al momento político. Sus obras están llenas de alegría de vivir y del espíritu burlón de su autor. Se le atribuyen unas ciento treinta comedias, de las que sabemos que son suyas sin lugar a dudas 21.
Su vida está marcada por dos factores determinantes: por un lado, su brevedad, por otro su estrechísima relación con la aristocracia filohelénica, que es un factor imprescindible para entender las comedias de Terencio.
Nació en Cartago. Siendo todavía adolescente llegó a Roma como esclavo del Senador Terencio Lucano, le dio una esmerada educación y le concedió la libertad.
La mayor parte de sus comedias siguen originales de Menandro. El éxito de público no fue para Terencio algo inmediato, hasta que estrenó Eunuchus. También tuvo que enfrentarse a la crítica de otros poetas dramáticos y literatos.
La tragedia no alcanzó nunca en Roma la popularidad que lograron la comedia y otras formas escénicas, pero los romanos sí apreciaban a Ennio, Pacuvio y Accio.
Durante los primeros años del principado de Augusto se confirma la tendencia a la desaparición de la tragedia. El paso del tiempo había dado lugar a cambios tanto en el estilo como en los gustos literarios, lo que hacía que las obras parecieran cada vez más arcaicas y rudas. La tragedia se convierte en un ejercicio literario dedicado exclusivamente al recitado y la lectura en círculos literarios e intelectuales.
La lírica latina comienza en Roma mucho más tarde que la épica o el teatro. Las características de esta nueva poesía siguen siendo semejantes a las de la lírica griega. Afloró en primer lugar el círculo de Catulo y sus célebres epigramas eróticos, precedente de los neotéricos, verdaderos artífices de toda una renovación literaria y estética.
Renovadores cultos de la poesía latina del momento. Insisten en nuevo tratamiento poético que gira en torno a la forma perfecta y a la introducción de una temática. Algunos de sus autores más cualificados: Helvio Cina, su obra Zmyrna, Valerio Catón, autor de Lydia y Dictynna, Licino Calvo, poema elegíaco a su esposa muerta Quintilia, Cornificio, Furio Bibáculo…
Tuvo una vida breve, pero intensa. Su familia, provinciana, pudo dotarle de una excelente educación y facilitarle un trato social elevado. Su padre se preciaba de la amistad con César, sentimiento que Catulo no compartía. Su filosofía de vida se inclinó hacia el epicureísmo. Sus obras se dividen en tres partes.
Catulo escribió dos modos de poesía: poemas yámbicos o mélicos y epigramas en dísticos elegíacos; y poemas en total. Se alzó como la figura más destacada entre los poetas jóvenes y con una sólida entereza, aún creciendo en medio de un mundo con crispaciones. Su lengua surge del habla familiar y nos sumerge en la sociedad romana de la época.
Nació en Venusia, hijo de un liberto que ejercía el cargo de recaudador de impuestos. Con gran sacrificio recibió una esmerada educación. A su vuelta de la guerra, empezó a escribir con amargura sus Epodos y Sátiras. Se dedicó por completo a su actividad literaria.
17 poemas cortos, tono violento y agresivo de temas diversos. Fue defensor del Beatus Ille.
Composiciones líricas agrupadas en cuatro libros, intenta crear una poesía lírica que rivalice con la griega. Temática variada.
La lírica de Horacio no es otra cosa que una meditación en torno a la muerte.
La posición señera de Horacio se basa en la perfección formal que muestra su poesía y en la profundidad y detalle de su propio retrato.
Espíritu libre y personaje económicamente independiente. Su destierro a Tomis significó su consagración como poeta elegíaco. El motivo del destierro pudo ser la publicación de su obra Ars Amandi. Murió en el destierro.
Su obra, rica en formas y facetas, está centrada sobre un tema único: Eros.
Sus obras se dividen en:
El arte de utilizar la palabra en público con corrección y belleza, para agradar y persuadir, tuvo en Roma un uso temprano y prolongado. Favorecía su desarrollo el sistema político de la República. Una vez que se imponen formas de gobierno basadas en el poder personal, la oratoria languidece y se transforma en retórica. Es este un momento apasionante en la historia política y cultural de Roma, que van a desembocar en las guerras civiles. Es la época de los Escipiones, de Catón y de los Gracos, lo que supone un contraste de opiniones que estimula el desarrollo tanto de la elocuencia como de la retórica.
La retórica convierte la práctica de la oratoria en un arte reglado, cuyos principales principios son:
Se distinguen tres escuelas:
Los dos últimos siglos de la República, conocen el desarrollo de la oratoria. Con el agotamiento del sistema republicano, la oratoria desaparece.
Hombre de acción, pero simultáneamente de reflexión. Fue un hombre de cultura, que intentó superar los antagonismos entre lo griego y lo romano. Buen conocedor y admirador de la cultura griega, pero profundamente romano en sus sentimientos, recoge las ideas del helenismo y las adecua a la tradición romana. Nació en Arpino y perteneció a una familia de agricultores, de buena situación económica. Fue un hombre conservador y se vio obligado a vencer la resistencia que la nobleza romana ponía al desempeño de las máximas magistraturas por alguien ajeno a ella.
Su familia se esmeró en su educación y lo envió a Roma, donde comenzó a intervenir con éxito como abogado. Siguió desempeñando magistraturas hasta alcanzar el consulado. Cicerón tuvo que soportar la conjura de Catilina y la petición de exilio por parte del triunvirato. Cuando volvió, se empezó la guerra civil entre César y Pompeyo, él tomó partido por Pompeyo. Tras el triunfo de César se vio obligado a dejar la vida pública, aunque tras su muerte vuelve a la vida política e intentó restaurar la República. Su mayor obstáculo fue Marco Antonio que cuando se formó el segundo triunvirato, mandó asesinar a Cicerón.
Nació en Calagurris. Estudió en Roma y allí, ejerció como abogado y profesor. Se retiró a escribir y adquirió fama con Institutio Oratoria, que trata la educación elemental tal y como se organizaba en la Roma de su tiempo. También estudia los métodos para la formación básica en el campo de la retórica.