Portada » Historia » Desintegración de Yugoslavia y Reunificación de Alemania
El término disolución de Yugoslavia se refiere a una serie de conflictos e irregularidades políticas que resultaron en la disolución de Yugoslavia (la República Federal Socialista de Yugoslavia, SFR Yugoslavia, o simplemente SFRY). La SFR Yugoslavia era un país que ocupó una porción de tierra que actualmente abarca desde Europa Central hasta los Balcanes, una región con un conflicto étnico histórico. El país era una conglomeración de seis repúblicas regionales y dos provincias autónomas, que estaba dividido según las etnias y que en la década de 1990 se separó en varios países independientes. Estas ocho uniones federales pasaron a ser seis repúblicas: Eslovenia, Croacia, Bosnia y Herzegovina, Macedonia, Montenegro, Serbia, y dos provincias autónomas dentro de Serbia: Kosovo y Vojvodina. Bosnia y Herzegovina no había existido como un estado mezclado étnicamente desde 1465, y además no tenía una mayoría étnica clara, con un 44% de musulmanes, 33% de serbios, 18% de croatas y otras minorías. La distribución geográfica de los grupos étnicos que componían Yugoslavia representaba el hecho de que cada nación tenía una población en cada una de las seis repúblicas. Yugoslavia pasó a ser un país con siete fronteras, seis repúblicas, cinco nacionalidades, cuatro idiomas, tres religiones, dos alfabetos y un líder.
Las repúblicas y la disolución de la Unión Soviética
Las repúblicas soviéticas jugaron un papel importante en la disolución de la Unión Soviética. Bajo la presidencia de Mijaíl Gorbachov, las políticas de glásnost y perestroika fueron diseñadas con el objeto manifiesto de modernizar el país. Sin embargo, uno de sus inmediatos efectos fue el incremento del poder hacia las repúblicas.
En primer lugar, la liberalización política permitió a los gobiernos de las repúblicas hacer proselitismo invocando el multipartidismo, el nacionalismo y otras temáticas contrarias a lo sostenido por el poder soviético. Adicionalmente, los cambios en la dirección política dieron lugar a fracturas dentro del mismo Partido Comunista, lo cual redujo el poder efectivo de la administración central. La perestroika, por su parte, llevó a una gran descentralización de la economía, que comenzó a ser privatizada y controlada por los gobiernos regionales antes que por los órganos centrales de planificación.
Las políticas de Gorbachov no siguieron el rumbo esperado y en 1991 la Unión Soviética se disolvió ante la secesión de sus repúblicas. Gorbachov llegó a proponer la creación de un nuevo Tratado de la Unión que dejaría al gobierno central sólo los asuntos de defensa y política exterior con tal de mantener unidas a las repúblicas, pero no tuvo éxito ante la negativa de los gobiernos locales. Cada una de las repúblicas se convirtió en estado independiente, aunque 12 de las 15 existentes al momento del desmembramiento de la Unión conformaron la Comunidad de Estados Independientes.
El término reunificación alemana se refiere a los cambios políticos y sociales acontecidos durante los años 1989 y 1990 en Alemania, que concluyeron en la adhesión de la antigua República Democrática Alemana (RDA) bajo la jurisdicción de la República Federal de Alemania (RFA). Este período histórico es conocido también mediante las denominaciones unificación alemana o unidad alemana.
Las reformas políticas y económicas impulsadas por el Secretario General Mijaíl Gorbachov en la Unión Soviética y la transición democrática en otros países de Europa Oriental tuvieron como consecuencia indirecta el éxodo migratorio hacia la RFA a través de Checoslovaquia y Hungría, y la posterior inestabilidad social en la RDA. Estos eventos forzaron la dimisión del Politburó del Partido Socialista Unificado de Alemania (PSUA), partido político posteriormente ilegalizado en la RDA; y la apertura de las fronteras entre ambas Alemanias, decisión que desencadenó la caída del muro de Berlín el 9 de noviembre de 1989.
Los prerrequisitos internos de la reunificación estuvieron estipulados por el Programa de los Diez Puntos, el cual perseguía la democratización y la estabilidad económica en Alemania Oriental. El convenio entre representantes de los partidos de oposición y el gobierno de la RDA concluyó tras la celebración de las primeras elecciones democráticas y pluripartidistas en este país el 18 de marzo de 1990. El Tratado de la Unión Monetaria, Económica y Social el 1 de julio fue aprobado luego de convenir con los gobiernos de la RDA, la RFA y el Bundesbank (banco central de la RFA).
Luego de una serie de acuerdos, cumbres y visitas oficiales, y el reconocimiento de la frontera germano-polaca en la línea Oder-Neisse; los gobiernos de los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y la Unión Soviética firmaron el Tratado Dos más Cuatro, el cual falló a favor del proceso de reunificación entre ambos Estados alemanes. Así mismo, convalidó el Tratado de Unificación, instrumento legal que autorizó la adhesión de la RDA en la RFA según la Ley Fundamental de Alemania el 3 de octubre de 1990. Desde 1991, el 3 de octubre se celebra en Alemania como el Día de la Unidad Alemana.
Los límites de Europa son: el cabo Norte y el casquete polar al norte; el océano Atlántico al oeste; el Mediterráneo, el mar Negro y el Cáucaso al sur; y los montes Urales y el río Ural al este.
Europa (incluyendo las tierras remotas y pequeñas islas):
Europa (excluyendo las tierras remotas y pequeñas islas):
Europa continental: