Portada » Economía » El Rol del Estado en la Economía: Fallas de Mercado y Regulación
La acción de los gobiernos se orienta al bien común. El estado puede intervenir en la economía cuando se producen “fallas en el mercado”.
La teoría económica de la regulación se basa en la premisa de que esta es un instrumento para mejorar el bienestar de un grupo (o grupos) dentro de la sociedad y no la mejora del interés o bienestar social, que es aquel al que está llamado el regulador.
– Las dos ideas relevantes de esta teoría son:
“Cuando el Estado fracasa en su intento por mejorar la eficiencia económica”. Los agentes reguladores buscan su propio beneficio (ganar elecciones), que no siempre coincide con el interés colectivo.
Los grupos de interés buscan obtener un beneficio del estado, que toman la forma de privilegios, rentas monopólicas y otras formas de transferencia en favor de un individuo o grupo. – Esa actividad genera costos y hacen uso de recursos que tienen costos de oportunidad. – El problema se genera en el uso ineficiente de los recursos en este esfuerzo de búsqueda de rentas buscando “capturar” al proceso regulatorio.
Los mercados responden a las preferencias de los consumidores actuales sin tomar en cuenta el efecto de sus transacciones en las generaciones venideras.
Se producen cuando no existe un equilibrio competitivo en los mercados, y por tanto, una asignación eficiente de los factores productivos.
Para que los mercados funcionen bien, deben cumplirse 3 condiciones respecto al Derecho de Propiedad:
“Son aquellos que son utilizados tanto en producción y consumo y no son de propiedad de ninguna persona concreta”. ¿Cuál es el problema? La sobreexplotación de los mismos.
“Son aquellos cuyo consumo por parte de una persona no reduce, real ni potencialmente, la cantidad disponible para otra persona. Por ejemplo: Programa de radio o TV, el uso de un faro.
El hecho de que no todos los agentes en el mercado cuenten con el nivel adecuado de información, puede producir una falla de mercado.
Existe una externalidad cuando la producción o consumo de un bien afecta directamente a consumidores o empresas que no participan en su compra ni en su venta, y cuando estos efectos no se reflejan totalmente en los precios del mercado.
– La regulación será eficiente cuando los costos de la misma sean inferiores a los beneficios que se esperan lograr con la regulación.
“Sujetar una actividad a una regulación significa establecer la forma o normas conforme a las cuales debe realizarse, pero en caso alguno puede ser que bajo el pretexto de regular se llegue a impedir el ejercicio de una actividad”. La regulación puede establecer restricciones o limitaciones, pero no puede impedir el libre ejercicio del derecho o actividad.