Portada » Español » La Poesía Española del Siglo XX: Del Novecentismo a la Generación del 27
Período entre 1914 y 1936, en que se produce la disolución de la Generación del 27 como consecuencia de la Guerra Civil. Coinciden dos movimientos renovadores de la poesía española: el Novecentismo, representado por Juan Ramón Jiménez, y la Generación del 27, que incorporan a la poesía española algunas de las características de los movimientos de vanguardia europeos.
La Generación del 14 o Novecentismo incluye autores que están entre el Modernismo y el 98 y la Generación del 27. Sus características son:
José Ortega y Gasset en ensayo, los narradores Ramón Pérez de Ayala y Gabriel Miró; el poeta Juan Ramón Jiménez y el dramaturgo Jacinto Grau.
Poesía pura: poesía de la inteligencia, que anhela la perfección formal.
Movimientos artísticos que surgen en Europa en los años anteriores a la 1ª Guerra Mundial y triunfan a partir de 1918. Rompen con las estéticas anteriores cambiando el modo de comunicarse artísticamente.
A través de Manifiestos llegan movimientos “ismos”, de vida efímera, pero algunos dejaron una huella imborrable. Son muy diversos: la ruptura con la realidad y la lógica y la búsqueda y la exploración continuas de formas nuevas y sorprendentes.
Antirrealismo: realidad no imitativa. Reflejan el interior del artista.
Primitivismo: Rechazan el presente y mitifican el hombre primitivo.
Irracionalismo: como reacción al fracaso de la razón y ciencia.
Vocación minoritaria.
Se crean nuevas técnicas como el cadáver exquisito, el collage o el caligrama.
Las principales vanguardias europeas son:
Ramón Gómez de la Serna, principal difusor. Crea la greguería, apuntes breves que encierran una metáfora insólita o una pirueta conceptual. Él mismo define la greguería como “Humor + Metáfora”.
El Creacionismo: Vicente Huidobro, propone tomar motivos de la vida y transformarlos para crear una realidad nueva; se basa en la imagen, la metáfora sin sentidos ocultos, y la ausencia de nexos y signos de puntuación.
El Ultraísmo: vanguardia específico español que surge con Guillermo de Torre. Busca captar sensaciones, la exaltación de la juventud, los caligramas y la ausencia de nexos.
Generación literaria española que publica sus obras en la década de 1930. Es la época dorada de la literatura española. El nombre del grupo proviene del homenaje a Luis de Góngora celebrado en Sevilla en 1927.
También recibieron la influencia de vanguardistas extranjeros.
Sus temas preferidos son el amor, la muerte, el paraíso perdido, el choque entre deseo y realidad.
Métrica: Combinan formas tradicionales y clásicas con el verso libre y el versículo. Utilizan el soneto, el romance, la silva y la décima. También incorporan elementos de las vanguardias como el creacionismo, el surrealismo o las greguerías.
Las innovaciones formales son importantes: lenguaje cuidado y elaborado, pretenden una poesía intelectual y cultivan la metáfora y otros recursos literarios.
En los años 20 combinan neopopularismo, creacionismo y poesía pura.
Neopopularismo: corriente que busca recuperar la poesía española desde el primitivismo característico de las vanguardias. Las obras que más destacan son:
Poesía pura: influenciados por Juan Ramón Jiménez, influirá en Salinas y Guillén. Busca una realidad esencial. Elimina lo anecdótico y el lenguaje poético se depura. La voz a ti debida, y Razón de amor de Salinas y Cántico, de Guillén.
Algunos poetas del 27 reciben la influencia del surrealismo, más directa y angustiada, que se refleja en los conflictos íntimos y en la rebeldía frente a las convenciones sociales (rehumanización).
La Guerra Civil marca un punto de inflexión. La mayoría de los autores se ven obligados a exiliarse. Lorca es fusilado; Miguel Hernández muere en las cárceles franquistas. El dolor, la angustia y la nostalgia se convierten en temas centrales. El tema de España se aborda desde dos perspectivas: La evocación nostálgica o La visión crítica o desdeñosa.
Dos poemarios de posguerra son Clamor, de Jorge Guillén, que aborda temas como la deshumanización o la Guerra Civil, y Desolación de la quimera, de Luis Cernuda.