Portada » Español » La narrativa española contemporánea
Tras la muerte del general Francisco Franco comienza la Transición democrática. Se inició así un proceso de legalización de los partidos políticos que condujo a la celebración de elecciones libres en 1977 y a la promulgación en 1978 de la Constitución, por la que España quedó configurada como una monarquía parlamentaria.
En el plano internacional destaca el fin de la Guerra Fría con la caída del muro de Berlín en 1989 y la disolución de la Unión Soviética.
En la literatura actual el género más destacado es la novela. La narrativa de este periodo se caracteriza por la vuelta a los patrones narrativos clásicos: el interés por el argumento, que cobra peso frente a la estructura, y el desarrollo lineal de la historia, en la que destaca la voz única del narrador.
Eduardo Mendoza (1943)
La publicación en 1975 de La verdad sobre el caso Savolta, de Eduardo Mendoza, puede considerarse el punto de partida de la narrativa actual. En obras posteriores, Mendoza ha mostrado su excepcional capacidad paródica: El misterio de la cripta embrujada, El laberinto de las aceitunas y Sin noticias de Gurb. La ciudad de los prodigios es la más ambiciosa de sus obras y probablemente la más lograda; en ella se recrea la evolución histórica y social de la ciudad de Barcelona en el periodo comprendido entre las exposiciones universales de 1888 y 1929, tomando como hilo conductor la progresión social del protagonista.
La posmodernidad
El pensamiento posmoderno se caracteriza por rechazar las ideologías y las escuelas estéticas y por practicar una mezcla de lenguajes de diferentes disciplinas: la literatura, la música, el cine…
En literatura, el pensamiento posmoderno se refleja en aspectos como el gusto por la fusión de géneros, que permite incluir en un texto literario elementos propios del cine, del cómic o de la publicidad.
No resulta fácil discernir unas corrientes definidas en una narrativa que aún sigue en evolución: sin embargo, es posible identificar ciertas tendencias temáticas:
• La novela policíaca, cuyo argumento gira en torno a la investigación de un caso. Destacan las novelas del detective Pepe Carvalho, de Manuel Vázquez Montalbán; las obras de Juan Madrid, o más recientemente, la serie Bevilacqua y Chamorro escrita por Lorenzo Silva.
Entre muchos otros, los poetas que destacan a partir de 1975 son estos:
• Luis Garcia Montero (1958) defiende una lírica más próxima a la realidad frente a las ensoñaciones culturalistas de épocas precedentes. En su obra destacan los poemarios El jardín extranjero, Habitaciones separadas y La intimidad de la serpiente.
• Felipe Benitez Reyes (1960) encarna la visión lúcida y desencantada de la existencia. Con un lenguaje brillante y preciso, el autor contempla la realidad con ironía y propósito desmitificador. Algunos de sus poemarios destacados son Los vanos mundos, La mala compañía o Sombras particulares
• Luis Alberto de Cuenca (1950) cultiva una poesía de carácter intimista y narrativo en la que los motivos del mundo cotidiano se tratan, a menudo, con ironía y elegancia. Destacan sus libros La caja de plata y Los mundos y los días. Poesía 1972-1998, que recoge una antología de su obra
• Olvido Garcia Valdés (1950) desarrolla una poesía de carácter reflexivo,metaliterario y hermético. Entre sus poemarios cabe mencionar Ella, los pájaros. Y todos estábamos vivos y Esa polilla que delante de mí revolotea (poesía reunida 1982-2008).
• Blanca Andreu (1959) muestra una influencia surrealista en su libro De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall, que fue merecedor del Premio Adonais en 1980. Más adelante, la autora se alejará de ese movimiento, hecho que se refleja en poemarios como Báculo de Babel o la tierra transparente
Pese a la gran diversidad de corrientes de la poesía española actual, existen elementos comunes en la obra de los poetas que se dan a conocer después de 1975: presencia de motivos urbanos, experiencias cotidianas y referencias culturales como el cine, la publicidad o la música: empleo de un lenguaje coloquial en el que se utilizan neologismos, extranjerismos, términos de jergas marginales…; una actitud escéptica que se manifiesta en el uso del humor y de la ironía; inclusión de diálogos o monólogos, lo que produce un efecto casi teatral en el texto; y cierta preocupación por los aspectos formales del poema.
La poesía de la experiencia
Entre todas las tendencias poéticas destaca la llamada poesía de la experien cia, que se caracteriza por la expresión de las vivencias personales, en un tono objetivo y desengañado, usando un lenguaje coloquial. Es notable en los autores de esta tendencia el magisterio de Jaime Gil de Biedma. Se sobresalen entre ellos Luis García Montero y Felipe Benitez Reyes.