Comentario de texto periodístico ‘Visibilidad’

El documento de análisis compete a la modalidad discursiva expositiva argumentativa, recogido en el periódico de ámbito nacional de gran prestigio ‘El País’. Su autora Rosa Montero nos expone un tema de candente actualidad como es el papel de la mujer en la historia, mostrando claramente su posición ante éste e intentando, de diferentes manera, persuadir al lector para que saque sus mismas conclusiones.

Registro y función lingüística

Al ser un texto formal del ámbito periodístico escrito, concretamente un artículo de opinión, el registro es estándar, sin variedades diatópicas, propio de este tipo de texto por su carácter divulgativo, ya que la articulista se dirige a un tipo de receptor amplio. La función lingüística dominante que utiliza la ponente para transmitir su mensaje es en primer lugar la función apelativa, como todo texto de carácter argumentativo, pues su naturaleza es la de incidir en nuestras conciencias para provocar una actuación en nosotros; además también nos encontramos con la función referencial, propia de los textos expositivos, ya que expone objetivamente datos, tales como ‘…desde 1991 se manifiestan’, por último aparece la función expresiva, también propia de los textos argumentativos, ya que la emisora expresa sus sentimientos sobre el tema por ejemplo cuando dice ‘hemos escapado del encierro’.

Estructura y contenido

Desde el punto de vista estructural podemos observar como el texto responde a una estructura tipificada, dividiéndose en tres partes. En primer lugar nos encontramos con la introducción que abarca desde el inicio del texto hasta la mitad de la línea 8 ‘….femenina de la humanidad’ final del primer párrafo. En en esta primera parte Rosa Montero nos presenta el tema a tratar ‘El papel de las mujeres en la historia’. Seguida de esta nos encontramos con el cuerpo argumentativo que abarca desde ‘Por primera vez…’ en el segundo párrafo hasta el final del tercer párrafo. En estas líneas la autora va perfilando su punto de vista sobre el tema, expresando que la historia siempre la escribe el poder, pero que hay otras historias interesantes y que no han sido tan visibles como es la historia de las mujeres y que poco a poco han salido del encierro hasta llegar a lo que ella llama la línea de flotación para hacerse visibles. Por último nos encontramos con la conclusión que va desde el comienzo del cuarto párrafo hasta el cierre del escrito presentando un fuerte componente apelativo, expresando que la mujeres ademas de escribir el pasado ahora escriben el futuro. Teniendo presente la localización de la tesis ‘Además de rescribir el pasado, la mujeres ahora reescribimos el presente’, podemos decir que se trata de un texto cuya estructura recibe el nombre de inductiva sintetizante.

Aspectos morfosintácticos y léxico semánticos

A modo de resumen el texto hace referencia a la poca visibilidad que ha tenido la mujer en nuestra sociedad a lo largo de los años y como poco a poco las mujeres han ido escapando del dominio de los hombres asistiendo a un cambio que hace posible la visibilidad de su papel, no solo a lo largo de la historia, sino además en el presente. Desde el punto de vista morfosintáctico podemos ver que la emisora respeta en todo momento las normas gramaticales haciendo uso perfecto de los elementos de cohesión, aportando coherencia al texto. Destaca la presencia de adjetivos calificativos (asombroso, colosal, claro, enorme, pequeños, concretas, sexista..) que califican positivamente o negativamente los elementos según la subjetividad de la autora. También algunos sustantivos están marcados positiva o negativamente (escamoteo, encierro, avance, agresiones…). Esta subjetividad la podemos encontrar también en el uso de la primera persona del plural (hemos escapado, hemos atravesado,.), mediante el empleo de la primera persona del plural la autora hace sentir cierta cercanía al receptor con el tema que se está tratando. En cuanto al uso de los verbos cabe señalar que Rosa Montero hace uso del presente (miro, veo, está, conquistamos, sigue, embriaga, manifiestan, escribimos,.) del pasado (ha lanzado, hemos escapado, hemos atravesado, ha sido,….), ya que se trata de un tema que ha sido y sigue siendo actualidad. Destacar el uso de infinitivos (pensar, publicar, reescribir,..) y también de gerundios (editando, haciendo, escribiendo,.). La modalidad oracional predominante en el texto es la enunciativa, utilizada para dar objetividad al texto. Encontramos también anáforas que le dan cohesión al texto (‘esas realidades’, ‘esas pacifistas’, ‘esa coincidencia’), que relacionan unas partes del texto con otras. En cuanto al aspecto léxico semántico, aparece el campo semántico asociado a lo mujer (femenina, mujeres, señoras,..) y con la historia (tiempo, historia, memorias,..). Vemos relaciones de sinonimia (mujeres – señoras), de antonimia (hombres – mujeres) y de hiponimia – hiperonimia (hombres, mujeres – humanidad). En el texto podemos encontrar gran cantidad de metáforas como ‘línea de flotación’, que connota el inicio de la visibilidad de la mujer, ‘historias subterráneas’, ‘memoria sepultada’, que connotan la no visibilidad de la mujer’. Estas metáforas son un signo del nivel sociocultural de la autora.

Opinión personal

Desde mi punto de vista Rosa Montero, trata de forma perfecta el papel de las mujeres en la sociedad. Lamentablemente este tema siempre es actualidad porque las mujeres suelen ser víctimas no solo de la ocultación de sus logros, como bien refleja Rosa Montero en su artículo, sino incluso de violencia. Estoy muy de acuerdo con la autora cuando se refiere a nuestra sociedad como una sociedad machista, pero menos que hace unos años. Aunque en lo que no estoy de acuerdo es que ese cambio sea tan radical como dice ella, ‘un colapso de un sistema de poder milenario’, sino que más bien el cambio ha sido una incorporación de una parte de la sociedad, en este caso la mujer, a un mundo de hombres, yo lo entiendo como una evolución de la sociedad pero no como una revolución que ha cambiado todo. Hay muchos ejemplos claros de esta evolución, como la incorporación de la mujer a puestos de trabajo que solo antes eran ocupados por hombres, pero también vemos que no es una revolución en el sentido que muchos de los mejores puestos son ocupados por hombres y no por mujeres e incluso en ocasiones los sueldos son inferiores en las mujeres prestando el mismo servicio. Y si entramos en el tema de violencia de género, podemos observar como cada día los medios de comunicación nos sorprende con nuevas víctimas y eso no es propio de una sociedad que ha evolucionado hasta el punto del ‘colapso’ como dice Rosa Montero. Concluyendo decir, que la igualdad es muy importante, igualdad de trato y de derechos, pero es evidente que entre las mujeres y los hombres existen diferencias que hacen más fuerte nuestra sociedad, pero estas diferencias en ningún momento justifican el que la mujer se convierta en víctima, que se pueda anular o matar cuando a alguien le venga en gana. Creo que aún existe un largo camino por recorrer para que esa igualdad llegue a conseguirse y sea tan normalizada que no se tenga ni que hablar de ella.