Portada » Economía » Objetivos de Recursos Humanos: Importancia y Tipos
Estos objetivos equivalen a parámetros que permiten evaluar las acciones que se llevan a cabo. En ocasiones los objetivos se consignan por escrito, en documentos cuidadosamente preparados. En otras no se expresan de manera explícita, sino que forman parte de la cultura organizacional.
Los objetivos de la administración de RR.HH. deben tener en cuenta los desafíos que surgen en la organización, del departamento de personal mismo y de las personas participantes en el proceso.
Apoyar la labor de los dirigentes de la organización para conseguir el éxito de la empresa.
Mantener la contribución del departamento de RR.HH. a un nivel apropiado a las necesidades de la organización.
Utilizar los recursos de la organización en beneficio de la sociedad dentro de un marco ético.
Apoyar metas y aspiraciones personales de quienes comprometen la empresa.
Las organizaciones son unidades sociales que buscan alcanzar objetivos específicos: su razón de ser es servir a esos objetivos.
Un objetivo organizacional es una situación deseada que la organización intenta alcanzar. Es una imagen que la organización pretende para su futuro. Por esto, si el objetivo es alcanzado, deja de ser la imagen orientadora de la organización y es incorporado a ella como algo real y actual.
Casi todas las organizaciones poseen una unidad formal destinada a establecer los objetivos iniciales y sus modificaciones. La eficacia general de una organización está determinada por la medida en que alcance sus objetivos. La competencia de una organización se mide por la cantidad de recursos utilizados para hacer una unidad de producción. La competencia está muy ligada a los objetivos de la organización, pero no se confunde con ellos, además crece a medida que los costos disminuyen.
Funciones: Mediante la presentación de una situación futura, indican una orientación que la organización busca. De este modo, establecen guías maestras para la actividad de la organización. Constituyen una fuente de legitimidad que justifica las acciones de una organización y, en realidad, hasta su existencia. Sirven de estándares, a través de los cuales los miembros de una organización y los extraños a ella pueden evaluar el éxito de la misma, o sea, su eficiencia y su rendimiento. De manera semejante, sirven como una unidad de medida para el estudio de las organizaciones que intenta verificar y comparar su productividad.
Los objetivos son unidades simbólicas, son ideales que la organización pretende alcanzar y transformar en realidad. En este sentido, Etzioni se refiere a 2 modos de organización:
Modo de supervivencia: la organización desarrolla objetivos que le permiten simplemente existir y mantener su productividad.
Modo de eficiencia: cuando la organización desarrolla objetivos que permiten no solo existir, sino también funcionar dentro de estándares de creciente eficiencia.
Objetivos de la sociedad: cuyo punto de referencia es la sociedad en general. Por ejemplo: producir bienes y ser valorada, mantener el orden público, crear y mantener valores culturales. Buscan satisfacer las necesidades de la sociedad.
Objetivos de producción: cuyo punto de referencia es el público que entra en contacto con la organización. Por ejemplo: bienes de consumo, servicios a la empresa, educación. Se trata de tipos de producción definidos en términos de las funciones del consumidor.
Objetivos de los Sistemas: cuyo punto de referencia es la manera de funcionar de la organización, independiente % de los bienes y servicios que produce, o de los objetivos de allí resultantes. Por ejemplo: el énfasis en las utilidades, en el crecimiento y en la estabilidad de la organización. Se trata de la manera como funciona el sistema y lo que éste crea, independiente de los productos o servicios que se producen, lo cual puede volverse el objetivo para los participantes de la organización.
Objetivos de los Productos: cuyo punto de referencia son las características de los bienes y servicios producidos. Por ejemplo: el énfasis sobre la calidad o cantidad de los productos, la variedad, el estilo, la disponibilidad, la originalidad o la innovación.
Objetivos Derivados: cuyo punto de referencia son los usos que la organización hace del poder originado en la consecución de otros objetivos. Por ejemplo: las metas políticas, los servicios comunitarios, la política de inversiones y ubicación de las instalaciones, cuando afecten la economía y el futuro de comunidades específicas. Las organizaciones desarrollan un poder considerable, que puede utilizarse para influir en sus propios miembros y en el ambiente. Este poder se utiliza independiente % de los objetivos del producto o del sistema.
Los preferidos son los cambios organizacionales. Dado que las organizaciones son unidades sociales planificadas, orientadas hacia objetivos específicos, bajo un liderazgo relativamente racional y autoconsciente, presentan probablemente mayor inclinación hacia el cambio que cualquier otra unidad social. Las organizaciones pueden alterar profundamente e intempestivamente sus objetivos, en el proceso de ajuste a problemas y situaciones de emergencia e imprevistas. A su vez, tales alteraciones pueden crear nuevas necesidades de cambio, que exijan ajustes adicionales. Determinados factores internos o externos pueden provocar cambios organizacionales. Sin embargo, su estudio constituye aún un área poco desarrollada. El proceso de establecer y fijar objetivos es complejo y altamente dinámico. Una organización no busca únicamente un solo objetivo, pues necesita satisfacer una enorme cantidad de requisitos impuestos a ella por el medio ambiente y por la organización interna de los participantes. Así, en vez de un objetivo de una organización. Los objetivos tampoco son estáticos, pues están en continua evolución, modificando las relaciones de la organización con su medio. Se necesita, pues, su constante reevaluación frente a las alteraciones del medio ambiente y de la organización.