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Hay 2 tipos:
Una parte del P asimilable del suelo está disuelto en agua y el resto está formando parte en el complejo húmico-arcilloso (la mayoría del P). La proporción del P en cada suelo se mantiene constante de manera que si la planta absorbe P de la solución del suelo el P que está en el complejo h-a pasa a la solución y se reestablece el equilibrio. El contenido de P en la solución del suelo es muy pequeño de forma que para cubrir las necesidades de la planta durante su ciclo vegetativo es preciso reponer el P de la solución del suelo de 100-500 veces.
Una buena parte de este P se encuentra en forma de fosfatos insolubles. Estos fosfatos lentamente pueden pasar a formar parte de la solución del suelo volvíéndose solubles. El P que existe en el suelo procede de los siguientes lugares:
Se deben a:
El P tiene muy poca movilidad en el suelo así que tras muchos años no se mueve más que unos pocos centímetros, entonces tenemos que abonar una sola vez en cada cultivo anual puesto que se almacena en el suelo y la planta lo va tomando a medida de sus necesidades. La asimilación del P se hace por las raíces por lo que es conveniente enterrar el abonado. Su eficacia es baja ya que es soluble en agua y el ácido cítrico, se asimila soluble en agua por lo tanto tiene mas eficacia en agua que en ácido cítrico.
Para que sea rápida la absorción el 50% del P ha de estar soluble en agua.
La carencia de K se manifiesta en las hojas más viejas, ya que con falta de K este va a las hojas más jóvenes. Si se aprecia esta falta, es difícil su recuperación.
Se encuentra de 3 formas:
La mayor parte se encuentra formando parte de los minerales y solo podrá ser asimilable cuando estos se descompongan.
Se encuentra en la solución del suelo y en el complejo h-a. El 10% en la solución y el 90% en el complejo h-a.
En determinadas circunstancias el complejo h-a retiene el K con tal fuerza que este no puede ser asimilado por las plantas. Ocurre en suelos pobres en K con poca materia orgánica.
El K en el suelo procede de 3 fuentes:
El aporte de abono potásico puede hacerse de una sola vez en cada cultivo puesto que se almacena en el suelo h-a. Los suelos arenosos con poca m.O.
y poca retención de agua necesitará mas potasio, es recomendable que se haga en varias veces el abonado. La presencia de m.O.
favorece la permanencia del K en el suelo. Hay 2 tipos simples:
Con una pureza del 60%.
Con riqueza del 50%.