Portada » Historia » Que sectores sociales apoyaron a rosas
Clasificación y naturaleza del texto: el texto propuesto es histórico circunstancial por su forma debido a que pertenece a una revista política, e histórico político por su contenido. La revista “Cuadernos para el diálogo” era una publicación española que re- presentaba, durante los años sesenta y setenta, una ideología democristiana o demócrata liberal. Uno de sus objetivos era promover el cambio hacia la democracia en España. Se trata de un texto público y una fuente primaria.
Contexto histórico: se corresponde con la última etapa de la dictadura franquista (1939-1975). El régimen franquista impone en España una dictadura autoritaria durante cuarenta años a pesar de la oposición exterior (democracias, exiliados republicanos) e interior (resistencia, organizaciones clandestinas). Va a sobrevivir en diferentes fases apo- yado en instituciones como la Iglesia, el Ejército y la Falange, también tiene el apoyo de “familias” políticas como católicos, franquistas puros, carlistas, y, por último, dando una apariencia de democracia orgánica mediante las Leyes Fundamentales. A partir de los años 60 se produjo un crecimiento económico que provocó un cambio social naciendo nuevos colectivos contrarios al régimen: jóvenes, estudiantes, sacerdotes. Además, el te- rrorismo estaba cada vez más presente. El régimen intentaba dar una imagen de refor- mista, pero no lograba silenciar a la oposición que se vio aumentada por la gran crisis económica de 1973. La reacción del Gobierno fue autoritaria contra la oposición con con- denas a muerte a terroristas que provocaron mayor oposición y aislamiento internacional. El empeoramiento de la salud del dictador, la debilidad interna del régimen y la Marcha Verde de Marruecos pusieron de manifiesto que la dictadura no tenía futuro.
El texto plantea varias ideas, pero la principal es que las últimas decisiones del gobierno de Franco no son admisibles en una sociedad que pide cambio. En 1973 los terroristas Puig Antich y Heinz Chávez, militantes anarquistas, asesinaros a varios guar- días civiles. Fueron apresados, juzgados sin garantías y condenados a muerte, sentencia que se llevó a cabo en 1974 mediante garrote vil. Por otro lado, Monseñor Añoveros fue un obispo que en una homilía defendíó la singularidad del pueblo vasco y que tenía dere- chos y libertades propios. El régimen franquista intentó desterrarlo, pero las presiones de los obispos españoles, que incluso amenazaron con la excomunión, lograron parar el pro- ceso.
El texto también plantea la necesidad de entender la política como un entendí- miento necesario. De hecho, la revista defiende como ya se producía un cambio pero que hechos como los tratados en el texto volvían a poner en tensión a la sociedad española, y eso era lo menos necesario. La revista apuesta claramente por un proceso que permita pasar de la Dictadura de Franco hacia un régimen democrático liberal, liderado por la democracia cristiana de hombres como Ruíz Jiménez. Muchos intelectuales y políticos, desde principios de los años 60, publican sus opiniones de aperturismo político en esta revista, aglutinando a muchos que apuestan por una democracia liberal y por el fin de la Dictadura. Rechazan la violencia revolucionaria y el terrorismo, pero también acciones del régimen claramente represivas y, sobre todo, la pena de muerte como forma de com- batir a la oposición, aunque esta sea violenta.
En lo que se refiere a la cuestión que se plantea cuando Franco nombró al almi- rante Carrero Blanco en Junio de 1973 como presidente del Gobierno apostaba por el sector más duro del franquismo, y dividía la jefatura del estado de la presidencia. Carrero Blanco fue asesinado por ETA en Diciembre del mismo año provocando una fuerte crisis en el régimen. Los cambios económicos y sociales de los años sesenta, provocados por el éxodo rural y el desarrollismo, provocaron que a la oposición clandestina se sumaran más sectores sociales como los jóvenes o buena parte del clero. Estos grupos pedían cambios en el régimen o la implantación un sistema democrático.
Sindicatos, asociaciones de vecinos, partidos políticos clandestinos, sectores de la Iglesia, reclamaban un cambio real y rápido. Las movilizaciones obreras y sindicatos cre- cieron mucho, en parte por la acción de los curas obreros, y reclamaban subidas salariales, mejores condiciones laborales, derecho de huelga, etc. En este mismo contexto nacíó CC. OO, pronto fue influenciada por el PCE, que organizó el 27 de Enero de 1967 la mayor manifestación de trabajadores desde 1939. La represión sobre estos movimientos será muy dura.
Los intelectuales y estudiantes que se opónían al franquismo se agrupaban en aso- ciaciones como FUE (Federación Universitaria Escolar) que actuaban en la clandestini- dad. Convocaban manifestaciones y repartían folletos exigiendo liberad y democracia. El régimen respondíó con cierres de algunas universidades y expedientado y sancionando profesores como Tierno Galván. La Iglesia, desde el Concilio Vaticano II (1962-1965), se comprometíó más con los asuntos sociales y aparecieron organizaciones religiosas