Portada » Magisterio » ACO t 2
Autodeterminación. Capacidad y derecho de una persona para actuar libremente y tomar sus propias decisiones, asumiendo los riesgos derivados de ello.
1. ¿Qué dos grandes grupos de recursos pueden usarse para mejorar la competencia comunicativa de las personas en situación de dependencia?
– Estrategias comunicativas convencionales, adecuándolas a las necesidades y carácterísticas perceptivas, de comprensión o de emisión de la persona usuaria.
– Sistemas aumentativos y alternativos de comunicación (SAAC). En algunos casos, la persona presenta necesidades especiales de comunicación que deben compensarse con apoyos que complementen el lenguaje hablado o que lo sustituyan.
Porque el respeto hacia la persona usuaria es una condición ineludible. En este sentido, es una persona que necesita ciertos apoyos para poder relacionarse con el entorno y participar en la comunidad, no inferior.
– Proporcionar a la persona usuaria apoyos necesarios para que interactúe con mayor eficacia.
-Pueden tomar sus propias decisiones.
-Participar de manera más activa en la sociedad.
-Proporcionarle una ayuda personal e individualizada.
-Diseñar la intervención en un contexto de respeto, comprensión y atención, y ofrecer calidad profesional.
5. ¿En qué consisten las medidas de reestructuración ambiental? Explica qué importancia tienen en entornos institucionalizados para mejorar la comunicación con las personas usuarias y da un ejemplo para cada una de las dimensiones que deben tenerse en cuenta.
El entorno físico es un elemento de la intervención que contribuye a mejorar la capacidad funcional de las personas usuarias. Por esto, y especialmente en contextos institucionalizados, es importante adoptar estrategias de reestructuración ambiental para crear entornos motivadores, accesibles, seguros y que faciliten la comunicación y la relación entre las personas, simbolizando la realización de tareas y acontecimientos importantes o la señalización de los espacios o itinerarios. Las medidas adoptadas deben tener en cuenta una dimensión multisensorial:
Dimensión visual. Por ejemplo, una señal que indique la dirección para ir al baño o un semáforo o una señal de peligro.
Dimensión sonora. Por ejemplo, una alarma de incendio o fuego.
Dimensión táctil. Por ejemplo, un cuento con una página de dibujos y en la otra página, la explicación de lo que sucede en esa página en braille.
¡TENLO EN CUENTA!
El respeto hacia las personas se manifiesta de manera especial en el uso que hacemos del lenguaje. Al referirse a las personas usuarias no utilices términos peyorativos (minusválido, discapacitada, etc.) ni antepongas la discapacidad a la persona. Di, por ejemplo “una mujer sorda” y no simplemente “una sorda” . De todas maneras, no todas las personas prefieren el mismo tratamiento. Si tienes dudas sobre qué terminología usar, pregunta a la persona usuaria por su preferencia.
Crear un mensaje estructurado. Pensar lo que se va a decir, ordenar las ideas y pautar el texto para que se pueda interpretar fácilmente.
Procurar un mensaje sencillo. Frases breves y claras, con palabras precisas y comprensibles.
Usar un lenguaje correcto y adecuado a la situación comunicativa. Usar un lenguaje variado, correcto gramaticalmente y adecuado al contexto en el que se emiten.
Adaptarse al nivel de la persona usuaria. El registro utilizado debe estar en sintonía con la capacidad cognitiva y lingüística de la persona.
Mensaje verbal. La emisión debe ser fluida, usando un volumen adaptado a la capacidad auditiva de la persona, tono de voz cálido.
Expresión facial. Se debe buscar la complicidad de la persona usuaria mirándola a los ojos a su misma altura, regulando la interacción.
Gestualidad. Los movimientos corporales y la postura deben transmitir la idea que se quiere comunicar, acompañando al mensaje verbal o sustituyéndolo.
Proxemia. Debemos colocarnos a una distancia adecuada para que la persona usuaria acceda por vía sensorial a la información que le proporcionamos y se sienta cómoda emocionalmente.
Comunicación táctil. En algunas situaciones, acciones como presionarles la mano, acariciarlas o darles un beso tienen un gran componente comunicativo.
Mostrar predisposición para la comunicación y buscar las condiciones para que se produzca.
Establecer un proceso comunicativo auténtico. Hay que buscar la participación de la persona.
Procurar no anticiparse a las demandas de la persona usuaria.
Recurrir de forma habitual al abanico de los recursos comunicativos no verbales.
La escucha activa es la capacidad de escuchar con una actitud abierta con la voluntad de entender realmente lo que la otra persona quiere comunicar.
La empatía es la capacidad de reconocer, comprender y apreciar sus sentimientos.
Esto se consigue:
Observando su lenguaje corporal.
Concentrándonos en lo que dice sin interrumpir.
Mostrando interés mientras mantenemos un contacto visual cómodo.
– Avisar, con gestos o señales, a la persona cuando tengamos que hablar con ella.
– Colocarse cerca de la persona, de frente y a su misma altura, para que pueda ver claramente la vocalización y las expresiones faciales.
– Procurar hablar de manera natural y fluida, pero un poco más despacio de lo habitual.
– Emplear un lenguaje directo, claro y preciso, con frases completas y gramaticalmente correctas y siguiendo un orden lógico.
– Llamar a la persona por su nombre, para que tenga claro que nos dirigimos a ella.
– Colocarnos frente a ella y utilizar un volumen normal.
– Utilizar un vocabulario rico y variado, pero acorde a la capacidad mística de la persona.
– Informar a la persona si vamos a abandonar el lugar.
– Tocar el brazo de la persona para indicarle que estamos allí e informarla si tenemos que irnos en algún momento.
– Identificarnos deletreando en su palma a nuestro nombre o signándole el signo (nombre mímico) por el que nos conoce.
– Elegir el método de comunicación, según las necesidades particulares de la persona.
– Situarnos frente a la persona usuaria para ver mejor su boca y su expresión facial.
– Mantener la mirada en la persona y esforzarnos en comprender qué nos quiere decir.
– Adaptarnos al ritmo de la persona
– Elegir entornos con los que la persona esté familiarizada para interactuar con ella.
– Tratar a la persona de acuerdo con su edad, evitando infantilizarla, pero adaptándonos a su capacidad de comprensión.
– Dar mensajes o instrucciones muy claras, acompañándolos, si es necesario, de apoyos adicionales.
– Asegurarnos de que el mensaje sea comprendido y verificar que la interpretación ha sido la correcta.
– Estrategias para facilitar la expresión
– Escuchar activamente y con empatía, mostrando interés, por lo que dice o siente.
– Estrategias para facilitar la comprensión
– Hablar despacio y claramente, con un tono de voz, algo bajo para transmitir calma.
– Estrategias comunicativas con personas con afasias.
– No infantilizar a la persona usuaria o tratarla como si no entendiese nada.
– Darle la opción y el tiempo para comunicarse.
Un sistema alternativo o aumentativo de comunicación (SAAC) Es un conjunto estructurado de códigos y estrategias, que permiten que personas con graves dificultades o imposibilidad de utilizar el lenguaje hablado se comuniquen.
– Finalidad. El objetivo es proporcionar un medio de comunicación a una persona con imposibilidad para utilizar el habla o que tenga dificultades para ello.
– Contenido. Formado por un conjunto de signos expresados mediante canales no vocales (gestos, signos) y de reglas para utilizarlos y combinarlos.
– Implantación. Para instaurar un SAAC es necesaria una intervención planificada e individualizada, acorde con las necesidades y potencialidades de la persona usuaria.
– Aprendizaje. Los signos y las reglas se deben aprender e interiorizar.
Según la finalidad
– Sistemas alternativos de comunicación Es una forma de comunicación diferente al habla y que se emplea en contextos en los que el emisor y el receptor están cara cara.
Ejemplos utilizados por personas que no pueden hablar: el sistema morse, los signos manuales y gráficos y la escritura.
– Sistemas aumentativos de comunicación Es una forma de comunicación utilizada para aumentar y mejorar la capacidad comunicativa existente. Por ejemplo, los símbolos pictográficos y los ciclos de la lengua de signos.
Según el uso de recursos materiales
– Sistemas de comunicación con ayuda Es aquel que necesitamos un soporte físico para elaborar, emitir o captar los mensajes.
Como los ordenadores, los audífonos y los comunicadores o tableros de comunicación. Estos sistemas presentan una serie de carácterísticas:
No requieren una destreza motriz especial.
La capacidad y la riqueza comunicativas dependen de las destrezas y las habilidades cognitivas de la persona usuaria.
Garantizan y facilitan a las personas interlocutoras la comprensión de los actos comunicativos de la persona usuaria.
No hay eficacia ni inmadurez comunicativa porque los actos comunicativos se producen demasiado lentamente.
Ejemplos: signos tangibles, signos gráficos (imágenes y pictografías) y la escritura ortográfica.
– Sistemas de comunicación sin ayuda Es aquel en el que la persona usuaria produce y recibe los mensajes con su cuerpo, sin intervención de soportes externos.
Carácterísticas:
Destrezas motrices.
El aprendizaje del sistema es difícil.
La capacidad y la riqueza comunicativas dependen del conocimiento y dominio del código empleado.
La comunicación es rápida, eficaz y fluida.
Los modos de comunicación usados favorecen el desarrollo comunicativo y lingüístico.
Entre los sistemas de comunicación sin ayuda, pueden citarse los gestos, los códigos gestuales y los lenguajes de signos manuales (el lenguaje bimodal “signos+lenguaje”).
Según la dependencia de otras personas
– Sistemas de comunicación dependiente Es aquel en el que la persona usuaria necesita que otra persona construya el mensaje o interprete, lo que quiere decir foto. Ejemplos: comunicación mediante tableros con letras simples, con palabras o con signos gráficos.
– Sistemas de comunicación independiente
Es aquel en el que la persona usuaria no necesita apoyo de ninguna otra persona, los actos comunicativos.
Podemos diferenciar:
Para personas con deficiencias auditivas. Lengua de signos, alfabeto dactilológico, palabra complementada, y sistema bimodal.
Sistemas para personas con deficiencias visuales. Son táctiles: Braille y alfabeto en Palma.
Sistemas para personas con dificultades motrices, cognitivas o del lenguaje. Utilizan símbolos que permiten generar mensajes significativos y se conocen como sistemas gráficos no vocales. Sistema Bliss, sistema de símbolos pictográficos para la comunicación, sistema Rebús.
Algunas medidas de prevención y seguridad son:
Asegurar una buena iluminación.
Reducir el nivel del ruido ambiental.
Usar periféricos.
Mantener una buena postura corporal.
Llevar a cabo pausas y cambiar de postura cada cierto tiempo.
Seguir las instrucciones y recomendaciones del fabricante del SAAC.
Contra el Estado y la limpieza del SAAC antes de usarlo.