Portada » Ciencias sociales » Definición de educación en ciencias sociales
Émile Durkheim apuesta por una concepción social de la educación, en clara oposición al espíritu individualista defendido por Kant, Herbert, Mill o Spencer. Según Durkheim, el humano se compone de:
un ser individual, que se refiere a sí mismo y a su vida privada, idéntico al de los animales y que se basa en el instinto para realizar el aprendizaje que necesita, y
un ser social, que se expresa en un sistema de ideas, de sentimientos y de costumbres no individuales, sino encuadradas en el grupo en que se vive.
La educación tiene como fin crear este nuevo ser social a partir del ser egoísta del recién nacido. Su objetivo final es conseguir que el individuo se asemeje a al ideal de hombre labrado por la sociedad.
el papel del Estado en materia educacional. Como consecuencia de la educación en sociedad, el Estado debe velar por ella, por lo que surge un conflicto entre el Estado y la familia, poseedora del niño. Durkheim, como es lógico, no defiende el liberalismo a ultranza, en el que el Estado no intervenga en nada, sino que propugna que sea el propio Estado quien realice el necesario control a los educadores.
en este aspecto de la educación como ente social. La educación no tiene sentido si no se realiza en el seno de una sociedad. También es lógico que cada sociedad presente un modelo de educación acorde con sus necesidades. Por lo tanto, el desarrollo educativo se vera beneficiado si se desarrolla en un contexto social, en lugar de un proceso individual, desde un profesor a un alumno.
Durkheim define la educación como la acción ejercida por los adultos sobre los jóvenes. En diversas ocasiones, afirma que cada palabra o cada gesto que se dedican a los jóvenes es parte de la educación que se les inculca. También afirma que la educación es la socialización de la joven generación por la generación adulta.Reconoce la influencia del grupo en el comportamiento del individuo, y asegura que una clase no se comporta como la aglomeración de individuos independientes los unos de los otros, sino que se piensa, se actúa y se siente de forma diferente a cuando se está aislado. Sin embargo, reserva el estudio de estos procesos a la psicología colectiva
Según Durkheim, los maestros poseen un enorme poder para lograr la educación de la joven generación. Este poder proviene de la sociedad, que lo deposita en el maestro como intérprete de las grandes ideas morales de su época y de su país. Para conseguir el éxito educativo, es necesario hacer un buen uso de esta autoridad.
ambién señala las carácterísticas personales de un buen educador, que son el carácter, sentir internamente la autoridad, y creer en su labor, no en su inteligencia. Por último, resuelve el posible conflicto entre libertad y autoridad, considerando que la libertad es el fruto de la autoridad bien entendida.
Según Durkheim, la pedagogía no debe comunicar al futuro educador procedimientos y fórmulas para enseñar al alumno, sino que debe darle plena conciencia de su función. Es necesario realzar la mayor dificultad de la enseñanza secundaria que la enseñanza primaria, por lo que es necesaria una mayor reflexión para trazar la línea de conducta, puesto que trata de formar mentes a través de la Historia, las Matemáticas…
El funcionalismo es una teoría sociológica que pretende explicar los fenómenos sociales por la función que ejercen las instituciones en la sociedad. Si un cambio social particular promueve un equilibrio armonioso, se considera funcional; si rompe el equilibrio, es disfuncional; y si no tiene efectos, es no funcional.
El funcionalismo caracterizado por el utilitarismo otorgado a las acciones que deben sostener el orden establecido en las sociedades, es una corriente teórica surgida en Inglaterra en los años 1930 en las ciencias sociales, especialmente en sociología y también de antropología social. La teoría está asociada a Émile Durkheim y, más recientemente, a Talcott Parsons además de a otros autores como Herbert Spencer y Robert Merton. El funcionalismo se caracteriza por un enfoque empirista que preconiza las ventajas del trabajo de campo. En este sentido, los teóricos funcionalistas identifican en sus textos comunicación con comunicación de masas porque esa es la realidad de la sociedad moderna. Hasta el Siglo XIX, la mayoría de las labores se realizaban en un gabinete, mediante relatos sesgados de viajeros. El funcionalismo abríó el camino de la antropología científica, desarrollándose luego con gran éxito en Estados Unidos. La corriente funcionalista es la escuela más extendida; se ha llegado a naturalizar y se estudia como el paradigma de las ciencias de la comunicación. Esta circunstancia se ha entendido como lógica porque es la perspectiva que mejor se identifica con la dinámica y los intereses del sistema audiovisual.
La escuela propone una serie de teorías concretas con continuidad basadas en distintas disciplinas: la teoría hipodérmica, la teoría de los efectos limitados, la teoría matemática de la comunicación y otros enfoques más particulares. Son esquemas de acción cuyo objetivo es construir un proyecto integrador que aporte conocimientos sobre cómo funciona la comunicación social y cómo debe funcionar. Bajo esta mirada, las instituciones sociales serían medios colectivamente desarrollados para la satisfacción de las necesidades biológicas y culturales; los define, por lo tanto, por el cumplimiento de una función social, y no —como se hacía generalmente— por las circunstancias históricas de su desarrollo. Enfatiza, por lo tanto, las medidas que las instituciones toman para alcanzar los fines socialmente valorados. En la escuela funcionalista americana, basada sobre todo en la obra de Talcott Parsons, se pone un énfasis particular en el mantenimiento de la estabilidad social. En el contexto estadounidense ayuda pensar que EE.UU. Es una nacíón que todavía está construyéndose a partir de inmigrantes de distintas procedencias (melting pot) y que, por tanto, era necesario la integración política.
La teoría funcionalista propone que las sociedades suponen de mecanismos propios capaces de regular los conflictos y las irregularidades, así como las normas que determinan el código de conducta de los individuos variarán en función de los medios existentes y esto es lo que rige el equilibrio social. Por lo que pasemos a entender a la sociedad como un “organismo”, un sistema articulado e interrelacionado. A su vez, cada una de estas partes tiene una función de integración y mantenimiento del propio sisma.
Según Parsons, la teoría de sistemas, se basa en la teoría funcionalista, y establece que la sociedad se organiza como un sistema social que debe resolver cuatro imperativos fundamental para subsistir:
De acuerdo al rol que asuman los subsistemas para resolver estos problemas fundamentales, actuarán como funcionales o disfuncionales. Los funcionalistas tienen una visión biologicista de la sociedad, es decir, entienden a la sociedad como una entidad orgánica cuya normalidad viene postulada por fenómenos que se repiten regular y sistemáticamente.
El pionero iniciador de la tendencia funcionalista en Latinoamérica fue Gustavo Mendoza, quien adquiríó sus conocimientos en el instituto humano-tecnológico Humboldt.1
El funcionalismo nace como reacción al evolucionismo y al particularismo histórico. Parte del hecho de que la cultura es una totalidad orgánica en las que sus diversos elementos son inseparables (holísticos) y que se hallan interconectados, teniendo cada uno de ellos una función específica en el conjunto. La religión, la economía, la producción, los rituales, etc. Forman un todo interconectado.
Sus pioneros fueron Bronislaw Malinowski y Alfred Reginald Radcliffe-Brown. El nombre de la escuela proviene del hecho que para el etnógrafo Bronislaw Malinowski (seguidor de las teorías sociológicas del francés Emilie Durkheim), las culturas se presentan todos como “integrados, funcionales y coherentes”, por lo tanto cada elemento aislado de la misma sólo puede analizarse considerando a los demás. Estudia, por ende, la cultura y demás hechos sociales, en función de cómo se organizan para satisfacer las necesidades de un grupo humano.
Las instituciones sociales serían medios colectivamente desarrollados para la satisfacción de las necesidades biológicas y culturales, se los define por lo tanto, por el cumplimiento de una función social; enfatizando las medidas que las instituciones toman para alcanzar los fines socialmente valorados. En la escuela funcionalista americana, basada sobre todo en la obra de Talcott Parson, se pone un énfasis particular en el mantenimiento de la estabilidad social.
El desarrollismo (también conocido como estructuralismo)
Es una teoría económica referida al desarrollo, y que sostiene que el deterioro de los términos de intercambio en elcomercio internacional, con un esquema centro industrial-periferia agrícola, reproduce el subdesarrollo y amplía la brecha entre países desarrollados y países subdesarrollados.
Como consecuencia de ese diagnóstico, el desarrollismo sostiene que los países no desarrollados deberían tener Estados activos, con políticas económicas que impulsen laindustrialización, para alcanzar una situación de desarrollo autónomo.