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Para educar, hay que resolver la cuestión de qué es la verdad y cómo puede conocerse. Parte de la oposición de su maestro (Sócrates) al relativismo y escepticismo de los sofistas sobre las realidades. Frente a ellos, Sócrates pretende fundar la virtud en el saber y Platón, intenta establecer qué es el bien permanente como punto de referencia para los ciudadanos y gobernantes.
La búsqueda de algo universal y permanente Platón la amplía a la búsqueda de la verdadera realidad.
Desde esta necesidad, Platón desarrolla su Teoría de las Ideas. Para llegar a conocer aquello que no cambia, Platón tiene muy en cuenta por un lado a Heráclito, “Todo cambia y nada permanece”, es decir, los sentidos no pueden conocer la realidad permanente; y por otro lado, a Parménides, que dice que la verdadera realidad es estática. Y esto es lo que quiere Platón, luego esas realidades tienen que existir, pero ¿Cómo se pueden unir estas teorías? Platón hace una síntesis con su Teoría de las Ideas, y esta teoría nos remite al dualismo ontológico de Platón: La ciencia tiene que tratar de los objetos permanentes, pero esos objetos no están en el mundo sino que están en otro mundo. Así, Platón distingue dos mundos o realidades ( establece un dualismo ontológico):MUNDO SENSIBLE / MUNDO INTELIGIBLE
Frente al mundo sensible, de las cosas materiales y cambiantes ( que puede ser percibido por los sentidos), Platón afirma la existencia del mundo inteligible ( que puede ser conocido mediante la razón- inteligencia), el mundo de realidades inmateriales, estables e inmutables, del cual forman parte los objetos matemáticos y las IDEAS o formas. Dando lugar a dos esferas contrapuestas por una separación:
La importancia de la Idea de Bien en Platón aparece tanto en su explicación metafísica como en la del conocimiento y en la teoría ético-política.En sentido ontológico:
En sentido epistemológico, el Bien es causa de la comprensión (conocimiento) de las restantes Ideas, y por tanto, del mundo sensible como copia o imitación de las IdeasLuego, el Bien es la causa del conocimiento, la causa de la verdad en el conocimiento, hace posible la ciencia.
Por ello Platón compara la Idea de Bien con el sol en el libro VI de la República (símil del sol): La Idea de Bien es y representa en el mundo inteligible lo que el sol en el mundo sensible. Al igual que el sol proporciona luz para que las cosas puedan ser vistas y hace posible la existencia y el desarrollo de las cosas, sin ser directamente su génesis; la Idea de Bien desempeña una función de máxima importancia en el Mundo Inteligible: La Idea de Bien sería la causa de la existencia de las demás Ideas, proporciona verdad y conocimiento, y el conocimiento del Bien por el alma humana proporcionará la luz (conocimiento absoluto) que nos hace «ver» y comprender el resto de las Ideas, esencia de todo.
En sentido ético- político, el Bien es el valor máximo para encauzar sabia y rectamente la vida privada y en la vida pública para gobernar, pues sólo quien conoce el Bien puede tener una visión clara del bien propio y del bien del Estado, y gobernar conforme a ello.
La concepción del hombre en Platón ha ejercido una gran influencia en la antropología occidental.Lo mismo que Platón tiene una concepción dualista del mundo,el concepto de hombre es igualmente dualista: el hombre es una especie de unidad compuesta de cuerpo y alma, que son realidades distintas y contrapuestas por su naturaleza y origen (dualismo antropológico). El alma es considerada una realidad intermedia entre los dos mundos, es un elemento suprasensible, afín a las Ideas. El cuerpo es un elemento del mundo sensible.
El alma para Platón procede del Mundo Inteligible( mundo de las Ideas). Es inmaterial, inmortal, trasmigra de unos cuerpos a otros, y además de principio vital (anima y mueve al cuerpo, de por sí inanimado), es principio de conocimiento. También es fuente de pasiones, en conflicto con la razón.El conflicto entre la razón y las pasiones propias del alma aparece en la teoría del alma tripartita. Platón distingue tres partes en el alma que representan los distintos aspectos de las actividades psicológicas del hombre que luchan entre sí: los apetitos, las pasiones y la razón.
La imagen del alma tripartita aparece en el mito del carro alado en el diálogo Fedro, en el que describe metafóricamente al alma humana como un carro alado tirado por dos caballos (uno bueno y otro malo) y conducido por un auriga, elementos que simbolizan las tres partes del alma
Bajo la imagen del carro conducido por un auriga y tirado por dos caballos, encontramos las siguientes partes o funciones del alma:
a) ALMA RACIONAL (Auriga): Sede de la razón. Es la más noble y elevada, pues su actividad consiste en conocer intelectivamente y dirigir a las otras dos partes. Su virtud es la sabiduría ( teórica y práctica o Prudencia).
b) ALMA IRASCIBLE (caballo de raza noble):Es fuente de pasiones nobles de las personas espíritu de lucha e indignación ante las injusticias. Su virtud es la Fortaleza.
c) ALMA CONCUPISCIBLE (caballo de raza malvada): Es la inferior, se encarga de mantener al cuerpo en la existencia, cubriendo las necesidades y apetitos naturales y fisiológicos. Es fuente de bajas pasiones y deseos sensibles en el individuo: odio, egoísmo etc. Su virtud propia es la Templanza (moderación).
En todo hombre existen estos niveles, pero cada hombre se diferencia de los demás por la parte que domina en él. La virtud y el conocimiento que se puedan alcanzar y el puesto social en el Estado dependen de ello.
Hemos visto que las almas son inmortales, están desde la eternidad en el Mundo Inteligible, donde pueden contemplar las Ideas (Fedro). Para Platón las almas vinieron al mundo sensible a encarnarse en los cuerpos como castigo por un pecado de concupiscencia. Por lo tanto, el cuerpo representa la cárcel para el alma, porque cuerpo y alma son realidades heterogéneas, tanto por su naturaleza, como por su origen: el cuerpo es de naturaleza material y, en cuanto tal, pertenece al mundo sensible; el alma, por su parte, es de naturaleza espiritual. Lo propio del alma no es estar junto al cuerpo, su lugar natural es el mundo inteligible. Por eso, mientras permanece unida al cuerpo desea liberarse de los lazos que la atan a lo sensible. Teniendo en cuenta el lugar natural del alma, es evidente que para Platón la uníón de cuerpo y alma sea accidental y temporal.
Platón, para hablar de la relación entre el alma y el cuerpo,habla de que el alma está en el cuerpo como un piloto en una nave, indicando que la conducción de la vida humana debe ser cosa del alma, y que el cuerpo debe ser algo ajeno al alma. No obstante, Platón no niega la influencia que el cuerpo puede ejercer sobre el alma, pues admite que una mala formación física y los hábitos corporales viciosos pueden ejercer una pésima influencia y llevar al alma a la esclavitud, al servicio del cuerpo. Pero también afirma que en el estado actual de hombre (cuerpo + alma), un elemento y otro están interrelacionados, y es posible que el alma pueda estar en armónía con el cuerpo, dominándolo. El dominio del alma sobre el cuerpo resulta una liberación para el alma. Esta liberación se consigue a través de una actividad de purificación que consiste en:
Viendo la importancia que tiene en Platón el control del cuerpo por parte del alma, y dentro del alma, la importancia del conocimiento y de la virtud, en la vida humana el alma racional es la que tiene que gobernar para que nuestra vida cobre sentido y llegue a la virtud que necesita (ella es la que conoce). Pero la razón sola no nos lleva a ningún sitio. Por eso, dice Platón que el sumo bien, mientras el alma está unida al cuerpo consiste en una mezcla proporcionada de placer y sabiduría, de placer controlado y subordinado a la sabiduría, porque el hombre no es ni pura inteligencia, ni pura animalidad
Idea es aquello que siempre permanece, que no cambia, frente a la mutabilidad de las cosas. Para Platón las ideas no son simples conceptos ni representaciones mentales sino que son realidades existentes de las cuales podemos elaborar un concepto. Veamos sus rasgos:
Si las Ideas son las esencias de las cosas pero separadas de ellas, este mundo, el sensible no es más que un reflejo,una PARTICIPACIÓN o IMITACIÓN de la verdadera realidad. Para Platón el mundo inteligible es la verdadera realidad, mientras que el mundo sensible tiene SER en la medida en que participa o imita al mundo de las ideas.Por eso, el mundo sensible es el mundo de las APARIENCIAS. Las Ideas son el modelo que el mundo sensible tiende a imitar. Cada vez que una cosa sensible es justa, bella o buena es porque participa de la idea de Bien. Sin embargo, las cosas feas, malas o injustas no es que imiten las ideas de maldad sino que en esas cosas no está presente la idea de belleza. En las cosas sensibles «ser» es sinónimo de presencia de la realidad inteligible y «no-ser» ausencia de la realidad inteligible (
Esto se explica desde la teoría cosmológica de Platón .El mundo sensible ha sido hecho por un artífice divino(Demiurgo) que vivía contemplando las Ideas. Actúa sobre la materia caótica y la ordena en el espacio, utilizando como modelos las Ideas y teniendo como fin hacer el mundo más bueno.Pero el Demiurgo no es omnipotente, está subordinado a las Ideas, que son algo distinto a él, y no es capaz de hacer un mundo como el de las Ideas sino sólo parecido.Por todo esto, el mundo sensible es una imitación (una copia imperfecta ) del mundo de las Ideas que sería su modelo.
En el mundo inteligible existen infinidad de Ideas. Pero no están desordenadas, sino que tienen una estructura jerárquica rigurosa. Hay ideas morales, estéticas: Bien, Belleza y Justicia; matemáticas que sirven para el conocimiento general del mundo particular, y por último hay Ideas de objetos, que se refieren a los seres existentes en el mundo sensible.Platón establece una gradación en el propio mundo de las Ideas: por encima de las ideas de objetos y matemáticas que constituyen el ser (la esencia) de las cosas sensibles, están la “supremas realidades”: Bien, Belleza y Justicia. Estas supremas realidades serían el fundamento de las demás Ideas. Pero la Idea suprema, “la Idea de las Ideas” es la Idea de BIEN.