Portada » Lengua y literatura » Clara trueba la casa de los espíritus
La casa de los espíritus ha sido relacionada con el Realismo Mágico, movimiento literario surgido en la década de los sesenta en la narrativa hispanoamericana que incorpora elementos míticos (extraños, extraordinarios, irreales) procedentes de la tradición indígena y de la fuerza de la tierra, de la propia geografía, para integrarlos en lo cotidiano.
Este relato, que presenta los sucesos acaecidos a la familia Del Valle-Trueba a través de cuatro generaciones, refleja perfectamente la situación política y social de Chile en el Siglo XX y hasta la década de los ochenta: el caciquismo imperante, el campesinado sumiso y en ocasiones resentido, el avance de la ideología socialista, las luchas políticas, las revueltas universitarias, el periodo del gobierno de Allende, el golpe militar liderado por Augusto Pinochet…
A pesar de no poder ser adscrita al Realismo Mágico por la distancia con esa corriente en cuanto a aspectos temáticos y formales, sino al llamado Posboom, cuyas carácterísticas señalaremos más tarde, vamos a indicar a continuación algunos rasgos de estilo que la aproximan al movimiento anterior representado por obras como Cien años de soledad de Gabriel García Márquez y Pedro Páramo de Juan Rulfo entre otras.
1.1. Combinación de lo natural (la fuerza de la tierra, la fuerza telúrica, huracanes, terremotos, lluvias…) con lo sobrenatural (poder clarividente de Clara, espiritismo, desplazamiento de objetos por el poder de la mente, aparición de muertos…) La realidad y la fantasía se funden en esta novela, bien porque lo mítico, mágico y sobrenatural se incorpora a la realidad o bien porque se fantasea con la realidad presentándola de un modo hiperbólico, desmesurado…
1.2. Polifonía narrativa. Utilización de varios narradores, pluriperspectivismo. Apreciamos narrador testigo en primera persona (Alba y Esteban) y narrador omnisciente en 3ª persona (que resulta ser la propia voz de Alba que reescribe la historia).
1.3 La emotividad se alza frente a lo racional. La muerte convive con la vida de un modo natural e irracional al mismo tiempo.
1.4. Hay una distorsión del tiempo, a pesar de ser de un modo general una narración lineal, hay pequeñas alteraciones a lo largo del relato y sobre todo al presentar la historia siguiendo una estructura circular.
1.5. En el Realismo mágico la violencia entra imparable en la vida cotidiana. Este hecho aporta una sensación de primitivismo, irracionalidad, agresividad, falta de control, etc. Se refleja perfectamente en la figura de Esteban Trueba cuyas actuaciones agresivas, instintivas y primarias también lo conducirán a la soledad.
1.6. El estilo desmedido, el barroquismo estético a través de hipérboles, exageraciones, repeticiones exhaustivas, crudeza de las imágenes, descripciones sensacionalistas, apocalípticas…
2.1. Alejamiento de las técnicas narrativas experimentales. En el posboom, frente al boom (más dado a la experimentación) se tiende hacia un estilo narrativo más realista y tradicional. Tiende a la narración lineal, con algún uso de analepsis y prolepsis y la estructura circular del relato.
2.2. Introducción de elementos de la literatura popular: folletines, melodramas, boleros (amores ocultos, muertes por envenenamiento, matrimonios de conveniencia, accidentes, violaciones…).Muchos de esos elementos son truculentos, desmedidos, pasionales…que evocan la temática de seriales, boleros y folletines.
2.3. Se vuelve al interés por el compromiso político y social (se evoca la historia de Chile), mientras que en el boom se habían inclinado hacia lo cosmopolita y lo universal.
2.4. Los personajes no desarrollan una gran complejidad psicológica. Hay una tendencia a la tipificación: Esteban (violento, tirano), Alba (ROMántica), Pedro Tercero (rebelde).
2.8. El mundo femenino es muy relevante. Destacamos la importancia de los personajes femeninos. Desde esa perspectiva se arremete contra aspectos de violencia y machismo. Los personajes peor parados son las figuras de Esteban Trueba y Esteban García especialmente.
2.8 El existencialismo desaparece de esta obra, hay mayor vitalismo y optimismo que en la narrativa anterior, hay esperanza, deseo de cambio e ilusión para afrontar la vida (reflejados en el personaje de Alba).
Para concluir señalemos que estamos ante una novela cuya autora se encuadra en una corriente literaria que surge en mitad de los setenta, denominada Posboom. Isabel Allende utiliza una narración de estilo más realista, sencillo, con trasfondo sociopolítico, con gran relevancia de lo femenino, pero también hay esta obra ciertos rasgos que pueden vincular su conmovedor estilo con el Realismo Mágico.