Portada » Español » Origen y evolución del castellano
Antes de comenzar a indagar un poco en los orígenes del idioma francés es
Necesario tener unos antecedentes básicos sobre la regíón que hoy conocemos
Como Francia. Este territorio comenzó a ser poblado en el siglo VII a.C. Por
Los galos, nombre por el cual se conoce a todos los pueblos que habitaron lo
Que hoy es Francia, Bélgica, las regiones de Alemania y Holanda ubicadas al
Oeste del Rin, y el oeste de Suiza, y quienes hablaban idiomas celtas que no
Poseían escritura. De hecho, los griegos los llamaban “celtas”, hasta que con
La llegada del Imperio Romano comenzaron a ser llamados “galos”, y a toda esa
Inmensa regíón que habitaban, la “Galia”.
Al sur de este territorio estaban los aquitanos, un pueblo de jinetes que
Hablaba una lengua precursora del vasco o euskera, pero que también desconocían
La escritura. Finalmente, en Massilia (hoy Marsella), los habitantes de las
Colonias griegas escribían y hablaban en este idioma, pero nunca llegaron a
Difundirlo más allá de sus fronteras.
Toda esta serie de idiomas, además de otros hablados en la Galia, comenzó a
Desaparecer paulatinamente con la instauración del latín fruto de la llegada
Del Imperio Romano. Más tarde, con su posterior declive, algunos pueblos
Bárbaros de origen germánico terminaron asentándose en la Galia Romana, de los
Cuales dos se establecieron de manera más permanente y notoria: los francos en
El norte, y los visigodos en el sur, con el río Loria en medio de ambos,
Haciendo las veces de frontera, y quienes poseían a su vez sus propias lenguas
Y dialectos. No obstante esto, pronto adoptaron el latín como su idioma.
Durante siglos, el idioma hablado en toda esta regíón de la Galia fue un
Latín que poco a poco había ido viéndose influenciado por las lenguas de los pueblos
Germánicos. De todas formas, es difícil precisar con exactitud el momento en
Que esa mezcla de dialectos del latín se transformó en el francés o provenzal.
Sin embargo, ese instante se puede ubicar entre los siglos VI y IX d.C. Es en
Esa época cuando se tienen los primeros registros de una lengua diferente del
Latín y del germánico, hablada en el territorio de la actual Francia.
Quizá el documento más fundamental que sirve hasta el día de hoy como
Registro del nacimiento del idioma francés sea “Los Juramentos de Estrasburgo”.
En este documento, los nietos de Carlomagno juran fidelidad luego de la
División que se produce tras la muerte de Luis el Piadoso, Rey de los Francos y
Emperador de Occidente. Este juramento fue escrito tanto en latín como en germánico,
Además de en una lengua que podríamos denominar como “protofrancés”, con el fin
De que cada una de las partes lograran entender las cláusulas enumeradas en el
Documento. Es de allí de donde se tiene el primer registro escrito de esta
Lengua romance.
Tiempo después comienzan a aparecer las primeras obras de tipo literario
Escritas por clérigos y personas cultas, todos ellas en esta nueva lengua, que
Poco a poco fue consolidándose y apartándose más y más del latín, aunque con
Una variedad de influencias germánicas (entre ellas la nasalización), todo esto
A partir del Siglo XI. Entre dichas obras se destacan “El Cantar de Roldán“ y
“La Secuencia de Santa Eulalia”.
Ahora bien, con el devenir del Siglo XII surgieron dos variaciones de esta
Lengua, una al norte y la otra al sur del Río Loira (el cual, recordemos, había
Servido anteriormente de división entre los francos y los visigodos). Estas
Lenguas se denominaron de Oïl y de Oc, llamadas así básicamente por la
Diferencia en la evolución del vocablo “sí”, las cuales dieron pie a su vez a
Variedad de dialectos. No obstante, con la llegada del Siglo XIII la lengua de
Oc perdíó su hegemonía, con lo que la lengua de Oïl, en sus diferentes
Dialectos, continuó su evolución en la alta Edad Media.
Dicha evolución venía presentándose desde que la sede de la Corte se había
Trasladado a París trescientos años antes, y fue el dialecto de la lengua de
Oïl hablado en París, denominado “dialecto de Î’lle de France”, el que con el
Transcurrir de la Edad Media fue desplazando poco a poco a los demás hasta
Convertirse en lo que hoy conocemos como idioma francés, siendo la Guerra de
Los Cien Años y la Revolución Francesa (entre otros significativos eventos
Históricos), detonantes importantes de su evolución.
Actualmente, el francés es el segundo idioma más hablado en la Uníón
Europea, detrás del alemán y por encima del idioma inglés. Es una de la lenguas
De trabajo de la ONU y una de las dos lenguas oficiales en entidades tales como
La OTAN, la OMC, el Comité Olímpico Internacional, entre otras.
En suma, el francés es un idioma con una carga histórica impresionante,
Lleno de exponentes en los campos de las artes que la han dotado de la riqueza
De la cual hace gala, colocándola como una de las lenguas más respetadas a
Nivel global. Los textos literarios de escritores como Molíère, Víctor Hugo,
Françoís Baudelaire, Jean Jacques Rousseau o Voltaire son solo una de sus
Pruebas más importantes. El francés es una lengua que sirve de puente para
Aprender otros idiomas como el italiano y el portugués, y ha proporcionado al
Inglés más del 50% del vocabulario que posee actualmente, lo cual permite el
Perfeccionamiento y compresión de éste.
Además, algunas de las universidades más importantes del mundo se encuentran
En países francoparlantes; lo que lo convierte en una gran opción para crecer
En el mundo académico.