Generación del 14 (Rasgos generales)Después del estallido de la Primera Guerra Mundial, surgieron a nivel internacional una gran cantidad de movimientos artísticos y culturales. En España, surgíó un movimiento cultural diferente, o mejor dicho, se asignó un nombre a todos aquellos intelectuales destacados de la época, no sólo del ámbito literario, sino también del mundo del arte, de las ciencias, de la política, de la filosofía… «La generación del 14 ́ ́. Esta generación, denominada como la generación del 14 o Novecentismo, se sitúa a principios del siglo XX en España y en ella se encuentran una serie de escritores que se sitúan entre la generación del 98 y del 27. El tratado oficial del grupo, aparecíó en el año
1913 firmado por los autores Ortega y Gasset, Manuel Azaña, Salvador de Madariaga, Américo Castro y García Morente. Para este grupo de escritores, Europa significaba regeneración cultural, educación, ciencia y lucha contra el irracionalismo o el anarquismo intelectual. Estos son algunos de los rasgos de la generación del 14: 1. Defensa del intelectualismo. 2. Búsqueda de la renovación de España, involucrados en la vida política y social. 3. Los autores de esta generación son universalistas y cosmopolitas. 4. Defensa de la deshumanización del arte, con el lema «el arte por el arte  ́ ́. 5. Su finalidad es huir del sentimentalismo y de la expresión de las propias vivencias. 6. Los autores de esta generación, vuelven la mirada hacia Europa, considerando que los modelos europeos son válidos para la renovación española. Los autores de la generación del 14, cuidaron mucho su estilo y un ejemplo claro de ello lo encontramos en Juan Ramón Jiménez. Además, dejaron de lado los temas como el amor, la muerte, el dolor… Y comenzaron a tratar los temas no humanos, como el avión, el deporte o la bombilla… Tuvo como objetivo rechazar el pensamiento negativo y pesimista de la generación del 98 tomando como referencia el ensayo. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la neutralidad de España en la primera Guerra Mundial evitó que su influencia fuese tan decisiva en el devenir de esta generación.
Generación del 27 y carácterísticas generales La generación del 27 es una corriente literaria de gran importancia que surgíó en España durante el Siglo XX, concretamente entre los años 1923 y 1927. Estuvo compuesta por autores como: Federico García Lorca, Rafael Alberti, Emilio Prados, Pedro Salinas, Jorge Guillén… En el año 1927 estos autores se reunieron para celebrar el tricentenario de la muerte de Góngora en el Ateneo de Sevilla y fue esta reuníón la que supuso la consagración del grupo de autores literarios conocidos como la generación del 27. Aunque todos estos autores contaban con formación universitaria y una gran variedad de estilos literarios, deseaban renovar el lenguaje poético con el objetivo de buscar la perfección conceptual y formal. Para ello, tomaron a Góngora como modelo y se centraron, principalmente, en el empleo adecuado de la lengua y en el rechazo del sentimentalismo. De hecho, lo más carácterístico de la época fue la ruptura del sentimentalismo. Sin embargo, esta generación nunca estuvo unificada, sobre todo, porque entre los autores se encontraban posturas muy diferentes e incluso, en ocasiones, contrarias. Su finalidad era romper con los patrones de la tradición y forjar nuevas tendencias que expresa en la realidad de una forma creativa. A pesar de todo ello, la generación del 27 no destacó por alzarse contra algo específico y no rompíó

con el pasado, sino con la estética de la época. Sobre todo, porque esta estética convocaba, al mismo tiempo, la tradición propia como demostración de la valía y el mérito de la visión realista del mundo. Sin apartar la vista de la realidad y sin distanciarse del pasado, los artistas españoles de vanguardia querían ver la realidad desde otro punto de vista y con otra perspectiva. La generación del 27 mostró un equilibrio entre lo intelectual y lo sentimental, entre el arte para mayorías y para minorías, entre lo universal y lo español, entre la renovación y la tradición… Y se caracterizó, principalmente, por la admiración que sentían hacia Góngora. Con todo, los autores dedicaron obras a Garcilaso de la Vega, se interesaron por la Generación del 98, y se sintieron próximos a las Vanguardias. En definitiva, tuvieron influencias del Siglo de Oro español y basándose en estos clásicos, crearon nuevos estilos que se mezclaron con las diferentes ideologías vanguardistas

creando una nueva literatura. Gracias a ello, llegaron a experimentar nuevas técnicas y procesos creativos.