Portada » Historia » Conclusión de las cortes de Cádiz y la constitución de 1812
Asimismo, este enfrentamiento trajo consigo una revolución ideológica que culminó con las Cortes de Cádiz, símbolo de resistencia, y la Constitución liberal de 1812.
En Enero de 1810 los franceses ya habían invadido Andalucía, por lo que la Junta Suprema que en ese momento se encontraba en Sevilla fue desplazada a Cádiz. Allí, ante problemas bélicos y políticos, se disolvíó, no sin antes convocar las cortes y hacer una consulta al pueblo, que exprésó sus quejas contra Carlos IV y su deseo por la mejora de la situación. A pesar de su disolución, fue sustituida por una regencia que siguió con dicha convocatoria.
Las Cortes, reunidas en una Cámara unilateral, se inauguraron el 24 de Septiembre de 2010 en San Fernando con un total de 300 diputados provenientes de todas las provincias, los cuales lograron la aprobación de la soberanía nacional. Este principio daba paso a una nueva etapa de democracia en España, en la que las Cortes llevaron a cabo durante tres años una intensa actividad en los que se daría lugar a la Constitución de 1812.
Entre las labores legislativas que las Cortes de Cádiz llevaron a cabo, una de las más importantes sería la redacción de la primera constitución española del 19 de Marzo, la Constitución de 1812 conocida como La Pepa, ya que en ella se reflejaban los principios liberales surgidos de Francia y Estados Unidos, es decir, las ideas más avanzadas de la época. En ella, se reconocía a Fernando VII como monarca, mas su poder quedaba limitado debido a la separación de poderes: o El poder legislativo lo ostentaban las Cortes.
Podían elaborar leyes, aprobar el presupuesto y los tratados internacionales y comandar el ejército. O El monarca poseía el poder ejecutivo, que consistía en dirigir el gobierno nombrando a los Secretarios de Estado e intervenir en la elaboración de leyes (mediante la iniciativa o sanción), en la cual podía vetar de forma suspensiva durante dos años. O El poder judicial recaía en los tribunales, que debían seguir un código de Estado de Derecho basado en materia civil, criminal, comercial, garantías de los procesos, entre otros.La Constitución reconocía derechos como los del ciudadano (petición, educación y propiedad), libertades civiles (de pensamiento, opinión e imprenta) y la igualdad jurídica y fiscal, así como el derecho a sufragio universal indirecto para varones mayores de 25 años y la implantación de la enseñanza primaria obligatoria, mientras que anulaba a su vez el tribunal de la Inquisión. La promulgación de esta Constitución pretendía acabar con el régimen absolutista y anclado en el feudalismo del pasado para dar lugar a una sociedad nueva en la España contemporánea, convirtiéndose en un documento de referencia en Europa y América. Asimismo, las Cortes llevaron a cabo la aprobación de otras leyes y decretos que daban paso al liberalismo económico en el país y establecían un régimen liberal a la par que se eliminaba el señorial. Las tierras pasaban a manos de propietarios y la población dejaba de estar sometida a la jurisdicción privada de los señoríos. La iniciativa de la reforma agraria, con que la que se pretendía expropiar bienes eclesiásticos y los decretos de libertad de comercio e industria y supresión de los gremios se realizaron con el objetivo de establecer una economía de tipo liberal en España.