Portada » Lengua y literatura » Cuestionario de la obra crónica de una muerte anunciada
Por una parte hay que tener en cuenta la importancia que tienen las acotaciones en el texto, ya que las transformaciones que ocurren en el escenario tienen singular significación para comprender el desarrollo de la obra.
El llamado efecto de inmersión implica una superación de la objetividad “narrativa”, ya que el espectador sólo puede acceder a la historia siguiendo la voluntad del autor, que manipula la acción dramática hasta conseguir que nos sintamos identificados con el protagonista aun sin ser conscientes de ello, ya que “vemos” a través de sus ojos a pesar de que no lo sepamos hasta muy avanzada la obra.
Podríamos decir que el espectador es “engañado” por el autor que lo hace participar, en cierta medida, de la enajenación del protagonista.
El efecto de inmersión apunta, pues, hacia el mundo como algo engañoso, y por medio de esta técnica dramática Buero denuncia lo equívoco de nuestra sociedad y busca la comprensión hacia el delator al que el público llegará a entender y perdonar.
En definitiva, el hombre debe dudar de la condición real o ilusoria de todo lo que le rodea, y replantearse en cada ocasión lo provisional del estado adquirido. La crítica es una necesidad constante del individuo para no caer en el engaño.
Hay elementos simbólicos como el ventanal que refleja libertad, el retrete descubierto que representa la dignidad humana pisoteada…
También hay un léxico culto, estilo cuidado y refinado , no exento de ironía.
es quien soporta todo el peso de la obra y gracias a él los espectadores conocen el significado pleno del drama. Tomás nunca abandona la escena. Cree residir en una moderna fundación de investigación. Poco poco, y nosotros con él, irá percibiendo la dolorosa realidad. Recupera el juicio por completo al final de la obra.
ASELes uno de los personajes más complejos del teatro de Buero. Al igual que Tulio, ha superado, como hombre de acción, los límites de los “activos” y, como los “contemplativos”, es capaz de soñar con un mundo mejor e intentar transmitir sus deseos a los demás. Asel es quien impulsa la acción dramática: es él el que ha ideado la terapia para que Tomás vuelva a la realidad, y es él quien ha preparado el proyecto de fuga. Finalmente, la máxima tensión dramática de la obra llega cuando Asel decide suicidarse.La actitud final de Asel, al igual que la de Tulio, parecen contagiadas por la fantasía de Tomás, como si de un proceso de “quijotización” se tratase.
TULIOes , en un principio, colérico, caracterizado por su hosquedad e intransigencia. Pero todo queda compensado por su personalidad soñadora.Acaba siendo el que en mayor grado se identifica con Tomás al final de la historia, por lo que, dada su humanidad, su ejecución resulta más dolorosa.
MAXestá caracterizado por su bajeza moral ya que se entrega a fáciles compensaciones a cambio de una traición.
LINO, apático en un principio, hombre de acción más tarde es el que mata a Max.
BERTAes un personaje atípico, fruto de la imaginación de Tomás.El verdadero sentido de los diálogos de Tomás y Berta no puede ser entendido por el público hasta el final de la obra. Se trata de un desdoblamiento de la personalidad de éste, un reflejo subconsciente que experimenta los primeros atisbos de la realidad.
La obra transcurre en una habitación compartida por seis hombres (Tomás, Asel, Lino, Max, Tulio y un hombre sin nombre) en el seno de cierta institución, denominada por Tomás como “la fundación”. A medida que Tomás regresa a la realidad, el escenario se va convirtiendo ante nuestros ojos en lo que verdaderamente es: una celda.
una meditación sobre la libertad y la esclavitud: sobre la opresión que los regíMenes totalitarios ejercen sobre los individuos que no se pliegan a sus estrictos códigos de comportamiento. Es la interpretación que mayor fuerza cobró en la época de su estreno, pese a que el franquismo se encontraba ya en sus postrimerías La obra queda así emparentada con En la red, de Alfonso Sastre, al denunciar la brutalidad de prácticas como la tortura, la delación, la represión ideológica y la pena de muerte.
en una línea existencial podemos considerar que la vida es también una cárcel sórdida e interminable en la que permanecemos secuestrados bajo la amenaza de la muerte. De esa áspera realidad se evaden los hombres -al igual que Tomás- mediante ensoñaciones se dejan alienar por bienes de consumo o cosas amables y apetecibles que les hagan olvidar el destino inexorable.
La
obra mantiene unidad de lugar, ya que toda la acción transcurre en un único espacio, aunque este varíe su configuración a lo largo de la obra, al pasar de ser la habitación confortable de una fundación a una cárcel. El escenario está situado en la mente de Tomás y es un elemento de total importancia en el desarrollo de la historia.
En la obra no hay indicaciones temporales muy precisas, pero los cuatro “cuadros” en que se divide transcurren, sin saltos cronológicos internos, en pocos días.Tiempo mínimo imprescindible para poder explicar el proceso mental que experimenta Tomás. Este es el tiempo de la acción dramática, pero la historia abarca un tiempo más amplio. A medida que el protagonista va aproximándose a la realidad, se suministran al espectador los datos referentes al tiempo pasado.
La historia es suministrada al espectador con la misma lentitud con que la conoce el protagonista, a medida que éste va pasando de la ficción a la realidad, y se complica rápidamente al final al desvelarse los proyectos de fuga y la nueva existencia de un delator que se resuelve fatalmente
Hombre de 21 años que abandona los estudios de secundaria cuando su padre fallece y tiene que dirigir el Divino Rostro. Es soñador, alegre, pacífico, afable, formal y creyente. Vive en su casa con su madre (Placida Linero), la sirvienta (Victoria Guzmán) y la hija de ésta (Divina Flor). Tenía pensado casarse con Flora Miguel.
Ingeniero de trenes, bien vestido, galante con las mujeres, culto. Tenía dinero y le gustaban las fiestas con algarabía. A primera vista produjo admiración en el pueblo a su llegada. Decidíó casarse con Ángela Vicario.Ángela Vicario
Es la menor de su familia, no es creyente, pero muy recatada respecto a los hombres, sabía lo que hacía en cada caso. Madura después de lo ocurrido y se vuelve ingeniosa. Prima del narrador. Flamante novia y devuelta esposa de Bayardo San ROMán al descubrir que no era virgen.
Los hermanos de Ángela son los encargados de devolver la honra perdida a la familia. Ninguno de los deseaba pasar por ese trance porque no eran hombres violentos, de modo que intentaron, sin lograrlo, que otros realizaran ese cometido.
(narrador): joven estudiante no mayor de veinte años que manténía contacto con su madre a través de cartas, solo en época de vacaciones visitaba a su familia. En este pueblo tiene dos buenos amigos llamados Santiago Nasar, Cristo Bedoya yMercedes Barcha.
En Vivir para contarla, el autordeclara que su intención al abordar esta novela era la de tratar este asunto.
Es la única respuesta a la violación del código del honor que rige la moral del pueblo y que exige a la desposada llegar virgen al matrimonio: hay que lavar el honor de la familia con la sangre del ofensor.
Es un código rígido que todos acatan y que refleja la moral puritana e ignorante del pueblo y nos trae reminiscencias del teatro del Siglo de Oro.
Se nos presenta a través de la visita del obispo y las expectativas frustradas que provoca en el pueblo.
El destino trágico pesa sobre Santiago Nasar en forma de una serie de circunstancias adversas que lo conducen a la muerte.
A veces es grotesco y esperpéntico y sirve de anticlímax a la violencia y lo macabro del crimen.
La novela es también la historia de la pasión amorosa de Bayardo y Ángela.
Veintisiete años después del crimen, un amigo del protagonista decide reconstruir la historia: el narrador es, por lo tanto, un narrador interno y aporta el punto de vista de un personaje secundario pero no recuerda nítidamente lo sucedido y para esclarecer los hechos se vale de la correspondencia de su madre, del informe jurídico, de la autopsia y de los testimonios de los testigos. Por tanto, Crónica de una muerte anunciada es una novela que sirve de variados puntos de vista: narrador-cronista, narrador-testigo, narrador-partícipe, testigos, personajes centrales, fuentes escritas como informes o cartas. Es tanta la polifonía (multiperspectivismo) que a veces los personajes se contradicen; la historia se presenta, entonces, como ambigua, llena de dudas, sobre todo en lo que se refiere a quién fue el que “deshonró” a Ángela o; por ejemplo, el clima del día, que varía de ser fúnebre a radiante, según los testimonios.
En toda la obra solo hay dos puntos claros y firmes: el asesinato de Santiago Nasar y la creencia de todo el pueblo en un código de honor. El pueblo solo se pone de acuerdo en el tema de la honra, el cual, visto a su manera, solo puede desembocar en tragedia. Santiago Nasar tuvo la desgracia de vivir en un pueblo de valores invertidos poco razonables. El abogado de los hermanos Vicario defiende el código popular del honor y sobre él fundamenta la defensa. La mayoría del pueblo lo acepta también puesto que este hecho los exculpa de no haber impedido el crimen pudiendo haberlo hecho. Los hermanos Vicario matan a Santiago Nasar por el hecho de cumplir el férreo código de honor de esa sociedad, aunque realmente ellos no querían hacerlo, de hecho se nos dice en la obra que “hicieron más de lo imaginable para que alguien les impidiera matarlo”; por eso se consideran inocentes ante Dios y ante los hombres, porque simplemente cumplieron el código de la honra. Finalmente es Gabriel García Márquez, a través del juez, quien critica irónicamente este código de honor que a la postre fue el desencadenante de los acontecimientos trágicos de la obra.
Se observa que en Crónica de una muerte anunciada, no está presente de la fusión entre lo real y lo maravilloso. Márquez nos lleva de la mano por relatos que discurren entre varios planos de verosimilitud, unos más imaginarios que otros, todos diferentes y a un tiempo parecido, por eso se confunden en ocasiones y nos hacen dudar al mundo al que pertenecen. En la narración fantástica, los hechos irreales no tienen justificación alguna.-.En la literatura fantástica la realidad y la fantasía se mezclan, pero cada una tiene lugar específico. El Realismo mágicose diferencia del uso tradicional de los elementos fantásticos en la literatura, porque presenta lo real como maravilloso y viceversa. Representa la coexistencia y coincidencia de dos mundos: el real y el mágico. El acontecimiento mágico no irrumpe precisamente en el discurso realista, sino que corre paralelo a él. Los personajes toman los sucesos maravillosos o mágicos o hiperbólicos como algo perteneciente a la realidad básica, no se sorprenden.-.Crónica de una muerte anunciada presenta una desmesura, lo hiperbólico es un vehículo de lo fantástico. En el texto subyacen símbolos, metáforas, detalles que nos llevan hacia un mundo extraño para el lector en el que lo irreal se toma como cotidiano.
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No existe una referencia taxativa al año de la narración pero una serie de acontecimientos, aludidos en la novela, sitúan la historia en los primeros años de los 90.
La novela sigue, en general, un orden cronológico, lineal, siete meses que van desde mediados del otoño hasta el final de la primavera. Este orden temporal está marcado por la sucesión de hechos meteorológicos (la lluvia, el viento, las hojas caídas, la luz de la mañana de Mayo, las fases de la Luna). Este orden cronológico se ve alterado por algunas analepsis: recuerdos de la infancia del inspector, de la estancia en el País Vasco y también los recuerdos de la vida de Susana Grey.
En ningún momento de la obra se cita claramente una ciudad, pueblo o regíón, pero se reconocen algunos lugares que aparecen en los libros anteriores de Muñoz Molina. Es Mágina, la desintegración literaria que Muñoz Molina adopta en su ciudad natal, Úbeda.
En esta ciudad tienen gran importancia, el asesino sale en la oscuridad de la noche para gozar de su secreto. Destaca el parque Cava.
La mayoría de personajes se mueven en sus entornos de trabajo. La viviendas particulares que aparecen reflejan la personalidad de los seres que la ocupan.