Portada » Español » Complemento circunstancial de lugar
ERRORES CATALÁN-GRAMÁTICAS
1 – Los llamarán a él y al su padre.
En esta frase encontramos la preposición delante de CD. Al mismo CD encontramos dos categorías léxicas diferentes: un pronombre personal fuerte y un sintagma nominal. También encontramos que el CD pospuesto al verbo.
En este caso nos presenta una cuestión conflictiva: tenemos que saber si el uso de la preposición a es correcto ante el CD, teniendo en cuenta que se trata de un caso de paralelismo sintáctico, y, teniendo en cuenta que , por separado, el uso de la preposición delante de pronombre personal fuerte se considera correcto, al contrario que ante el sintagma nominal, en cuyo caso se considera incorrecto. También hay que tener en cuenta que en las obras de consulta no existe un consenso claro y este hecho dificulta la resolución del conflicto.
Fabra, implícitamente, nos indica que no es correcto el uso de la preposición ante SN, ya que enumera las excepciones en las que sería correcto o tolerable, y el caso de simetría que analizamos no se encuentra incluido.
Antoni Badia i Margarit, indica que «el contraste entre un pronombre personal fuerte (que lleva a) y otro complemento de persona (que no la debe llevar), cuando son complementos de este verbo y se encuentran uno al lado del otro, hace una cierta violencia a quien quiere expresarse con corrección «.
Ruaix considera que «por simetría, es igualmente admisible la preposición cuando los pronombres personales fuertes llevan un término coordinado».
Joan Solà, que indica que en los casos de paralelismo sintáctico «es problemático eliminar la preposición a».
Todas las obras nos parecen fiables ya que argumentan sus propuestas de una manera razonable. La obra de Fabra no apoya su propuesta con una argumentación concreta, pero por su estatus de obra oficial su pronunciamiento no es cuestionable. Como ya hemos dicho antes, el IEC no se ha pronunciado al respecto y carecen argumentos y propuestas sobre este aspecto en concreto. Este hecho ha implicado cierta discordancia entre las obras no oficiales.
Bahía utiliza el argumento de que, por un lado, la norma establecida es que «el complemento directo de persona se construye sin preposición» y, por otra parte, indica que si es frecuente este uso es por influjo de la sintaxis castellana. Esto nos parece un argumento suficientemente claro como para decir que su propuesta es fiable. Sin embargo, el hecho de que este fenómeno sea fruto de una influencia foránea ha sido muy discutido. Hay otros autores que argumentan el uso de la preposición como un proceso interno de la lengua catalana. Si Ruaix y Solà son más tolerantes ante el uso de la preposición en los complementos acusativos, es porque también dejan abierta la posibilidad de que sea un proceso interno propio del catalán, y no lo reducen directamente a un castellanismo. Como contraargumento nos resulta convincente.
En cuanto a Manual de estilo, la obra de más carácter expositivo de todas las que hemos consultado, hay que decir que no se decanta por una argumentación en concreto, ya que espera el pronunciamiento del IEC. Esta conclusión es, quizá, la más adecuada, ya que el IEC es la obra de consulta oficial más actual. Sin embargo, Fabra sigue siendo la obra de referencia por excelencia, pero hay una normativa actualizada del problema en cuestión y, hasta que no se establezca, determinar si el uso es correcto o incorrecto nunca resultará factible del todo.
2 –
En los partidos políticos tiene que haber un líder.
Después de buscar en las gramáticas y poner toda la información que encontrado en este informe de investigación, explicaré lo que creo que es la solución a la problemática que me había planteado al inicio. Me preguntaba si era más correcto que en en oraciones como la que se me había dado a mí para analizar, pero he visto que realmente, no acaba de importar cuál preposición de las dos se utilice. Si seguimos la norma general deberíamos utilizar en (por lo tanto, la frase ya sería correcta), pero si alguien utiliza a, tampoco estaría mal, eso sí, siempre siendo consciente de que de momento no hay una gramática que diga cuál es la norma exacta para este uso locativo, y que se pueden utilizar las dos hasta que una gramática oficial no diga lo contrario.
3 – A este ritmo, no me lo acostumbraré nunca.
De acuerdo con la bibliografía consultada, y nuestros conocimientos, la solución a la cuestión conflictiva es que el pronombre él en la frase «A este ritmo, no me acostumbraré nunca» es correcto. Según las gramáticas consultadas la oración anterior es un pleonasmo, dicho en otras palabras, una oración donde aparece el mismo complemento del verbo dos veces. Primero, aparece en su forma completa y posteriormente, en pronombre débil o al revés. La oración anterior forma parte del grupo de los pleonasmos habituales, concretamente es un fenómeno llamado «tematización izquierda». La tematización izquierda es un pleonasmo que se anticipa. Es decir que pone como tema un complemento dejando que un pronombre débil represente el resto de la oración. En caso de que después del elemento que se anticipa no venga seguido inmediatamente por el verbo, sino que le sigue el sujeto o un inciso, se hace una pausa y se pone una coma, como es el caso de la oración anterior.
4 – El prisionero le confesó el crimen al juez
Esta frase está formada por un único verbo (confesó) que rige el sujeto (el presone r), un complemento directo (el crimen) y dos complementos indirecto (el pronombre le y al juez). Confesar es un verbo que rige tres argumentos , sujeto, complemento directo y complemento indirecto. Por tanto, se trata de una frase con un verbo triargumental, aunque, el problema de la frase no radica en el tipo de verbo utilizado, sino en la repetición del complemento indirecto.
Solà en su gramática afirma la existencia de diferentes construcciones con duplicación de clítico en los dativos. Los dos primeros casos que expone no nos sirven, ya que tratan sobre los dativos posesivos y los dativos benefactius, en ambos casos la duplicación del clítico es necesaria. A continuación, Solà trata el comportamiento de los clíticos en el complemento indirecto experimentador y meta. En los complementos indirectos experimentadores las construcciones dependen de un verbo de actividad psicológica, como gustar, molestar, interesar, etc., O de verbos pseudoimpersonals, como ocurrió, hubo, hacer falta, etc., En ambos casos la duplicación pronominal también es obligatoria. La excepción a la duplicación pronominal la encontramos en los complementos indirectos meta, sabremos que tenemos un complemento indirecto meta cuando el verbo el verbo es biargumental (con sujeto y complemento indirecto). La frase que nos ha tocado analizar consta de un verbo triargumental y un complemento indirecto meta y, por tanto, la duplicación es incorrecta ya que el verbo no exige la duplicación del clítico. Nosotros estamos totalmente a favor de esta solución propuesta por Solà, ya sea porque nos la han enseñado como criterio a seguir en clase o, porque nos hemos leído la totalidad de su explicación y creemos que los argumentos son 100% fiables y útiles en un futuro.
5 – La escuela donde van tantos inmigrantes está ahí.
El problema se encuentra en el pronombre débil «hay», ya que hace la misma función de que el pronombre relativo «donde»: los dos sustituyen al sustantivo «escuela».
Para concluir, de acuerdo con la bibliografía consultada nuestros conocimientos y nuestra intuición lingüística, creemos que la solución a la cuestión conflictiva de la frase es «La escuela donde tantos inmigrantes es allí», es decir, se debería eliminar el pronombre «ella» que produce el pleonasmo, ya que hace la misma función que el pronombre relativo «donde». Alguna gramática, pero, también da otra posible solución: «En la escuela donde van tantos inmigrantes está ahí.» De todas formas, creemos que la mejor solución es la primera porque poner «hay» en una frase como ésta, a además de causar un pleonasmo, es más bien característico de la lengua coloquial, según López del Castillo.
6 – El examen será en diciembre
El problema que identificamos es el artículo definido el, ya que en esta frase este artículo sólo acompaña el sustantivo diciembre, por lo tanto, es una frase incorrecta. La frase correcta debería ser: el examen será en diciembre, ya que queremos que diciembre haga la función de complemento circunstancial de tiempo.
Según el prólogo de Bahía, «Gramática de la lengua catalana, descriptiva, normativa, diatópica, diastrática», en el artículo VII, hemos podido ver que afirma que las preposiciones en y tienen la función de introducir los complementos circunstanciales de tiempo , en el caso de nuestra frase, queremos que nos introduzcan el nombre diciembre. Bahía afirma que el tiempo en que es u ocurre algo expresa unas veces con la preposición a (cuando hablamos de un periodo de tiempo) y otros, con la preposición en. Sin embargo, el prólogo de Josep Ruaix , «catalán completo curso superior de lengua» afirma que las preposiciones a y en se utilizan en diferentes contextos. La preposición en se utiliza cuando se expresa situación, presencia, reposo, etc., En cambio, la preposición a se utiliza cuando se expresa una dirección. Por lo tanto, nuestra frase debería ser, en un principio, el examen será en (como que introduce un CC y un período de tiempo y, además una dirección, se pide la preposición a)
en diciembre.
Hemos identificado un problema de la frase, la falta de preposición ante el CC de tiempo, pero la frase de momento es el examen será en diciembre, por tanto, seguirá siendo incorrecta. Sin embargo, en catalán, las preposiciones a, de, por y para, cuando se encuentran con los artículos masculinos el y los, se contraen y producen los artículos contratos o, dicho de otro modo, contracciones. Así pues, la preposición a y el artículo el, introductorio de diciembre, se contraen formando la estructura en el y, de esta manera, tenemos la frase resuelta, tal y como la hemos introducida anteriormente, el examen será en diciembre, así pues, tenemos un complemento circunstancial de tiempo, tal y como buscábamos.
7 – Tardará diez días en llegar.
La cuestión conflictiva que presenta esta frase es el uso de la preposición en ante el infinitivo llegar. La corrección o adecuación de esta preposición ante una forma verbal de infinitivo depende de la función que hace este infinitivo. También debemos tener en cuenta la relación que éste tiene con el verbo principal.
Podemos llegar a la conclusión de que todos, o casi todos, comparten el mismo punto de vista en cuanto al uso de la preposición en ante infinitivo. Aunque la solución que proponen es que la preposición en se sustituya para, en ningún caso eliminan por completo la preposición en ante un verbo en infinitivo. Es preferible y aconsejable utilizar la preposición delante de un verbo en infinitivo siempre y cuando éste haga de complemento del verbo principal. Un caso muy diferente es cuando el verbo tiene valor de gerundio. En este caso sí se aceptará la utilización de la preposición en.
Por lo tanto, después de consultar todas las gramáticas, aceptamos la solución que propone Fabra y para resolver la cuestión que nos presentaba la frase, sustituimos la preposición en por la preposición en.
La frase queda de la siguiente manera: tardará diez días en llegar.
8 – No se acuerda de que quedamos.
La cuestión conflictiva de esta frase es el cambio y la caída de las preposiciones. En esta oración se observa el uso de la preposición «de» ante una proposición subordinada sustantiva, con función de complemento de régimen verbal, introducida por la conjunción «que».
Es necesaria la supresión o caída de las preposiciones ante la conjunción «que» por razones lingüísticas, como dice Bahía, «de estructura lingüística, de documentación filológica y de tradición literaria». De esta manera, la forma correcta de la oración es:
La solución, sin embargo, puede sonar forzada, por lo que Solà propone el uso de construcciones de sintagma nominal como: «el hecho», «la posibilidad», «la manera», entre otros. De esta manera, otra opción no tan dura o forzada para la oración sería:
9 – Es la chica de la que habla todo el mundo
La gramática normativa prohíbe explícitamente el uso en este caso de la forma [Preposición + arte + que / quien], ya que se considera influencia del castellano.
la utilización de la que es incorrecto y hay dos posibles soluciones: es la chica de la que habla todo el mundo y es la chica de la que habla todo el mundo.
La primera construcción es la forma más recomendable en caso de duda, ya que casi siempre resulta correcta. Habría que conocer el contexto para hacer una elección más cuidadosa, ya que, por ejemplo, la solución de la que resulta más adecuada para un registro escrito y formal. En cambio, la propuesta utilizando la forma de que resulta igualmente correcta, pero no denota tanta formalidad. Para resolver el conflicto de la frase en cuestión encontramos más adecuada la construcción: é es la chica de la que habla todo el mundo
El relativo compuesto el que se puede usar detrás de una preposición, con referencia a cosa o persona. El adjetivo relativo que siempre precedido del artículo definido.
La combinación el que se utiliza ordinariamente como pronombre (equivalente a que, quién o qué
Tanto el uso de quien como la que son igualmente correctas y sólo es más recomendable el que si el antecedente está muy alejado del relativo, que puede causar confusión de significado. Solà dice que la elección entreque / quien y que también responde a motivos estilísticos. El motivo estilístico es simplemente que lo posee unos rasgos distintivos de género y número que pueden ser útiles para deshacer una ambigüedad.