Portada » Geografía » Diferencias entre desarrollo sostenible desarrollismo y conservacionismo
Durante las primeras épocas de la humanidad, el uso que hacía de la energía era el meramente trófico, es decir, para alimento (unas 2500 Kilocalorías/día). Se utiliza energía endosomática, interna o metabólica. También utilizaba el fuego quemando madera para calentarse, cocinar y ahuyentar a las fieras. Todas las energías que empleaba eran renovables, ya que se trataba de la biomasa, que se obtiene directa o indirectamente a partir de la energía solar. Los impactos ambientales fueron muy escasos porque, cuando el alimento escaseaba en una zona, emigraban a otra, con lo que la primera se recuperaba.Constituye un subsistema integrado en el sistema natural.
Cuando comenzó la agricultura, además de las energías anteriores, se emplean otras, como la que produce el trabajo animal, de procedencia también trófica.En la Edad Media comenzó la utilización de otras energías: la eólica, para mover los molinos y para la navegación; y la hidráulica, para los molinos y para los sistemas de riego. Se eleva el gasto de energía exosomática, externa, aunque es renovable.- Al haber mayor disponibilidad de alimentos, la población humana experimentó un crecimiento, que es controlado por la capacidad de carga. El tamaño de la población se mantiene estable por bucles de retroalimentación: pestes, guerras, emigración…- Los impactos fueron más importantes que en la etapa anterior:- Se usa leña como combustible y para fabricar carbón vegetal.- Se talaron grandes extensiones de bosque para implantar pastos, cultivos o para construir barcos.- Aumenta la erosión por la deforestación y por la excavación de minas para extraer minerales.- Se levantaron ciudades y se construyeron numerosas vías de comunicación.
La Revolución Industrial comenzó a mediados del siglo XVIII, resolviendo sus necesidades energéticas en la combustión de la madera de los bosques, a los puso en peligro. Posteriormente, se recurrió al carbón mineral, fuente energética más eficaz que la primera, que facilitó el trabajo de las fábricas. En el siglo XX el empleo del petróleo supuso un nuevo impulso para la industria, con lo que se incremento el consumo energético.El sistema energético deja de ser estacionario, se consume más energía que la que entra al sistema. (Salidas por uso de energía son muy superiores a las entradas). El gasto energético se multiplicó por 100 pasando de las 2500 kilocalorías por persona al día de la primera época a las 250 000 kilocalorias/día de hoy)
Las mejores condiciones de vida provocaron un incremento imparable de población humana, que en la actualidad, sobrepasa ya los 6000 millones de seres humanos, el 70% de las cuáles habita en grandes ciudades (megaciudades).
Paralelamente, se han disparado los impactos.Consumo de grandes cantidades de recursos no renovables: minerales y combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas natural).- Erosión y desertización intensas debido a la deforestación, a la urbanización y a la contaminación.- Escasez o agotamiento del agua por consumo excesivo o por deterioro de su calidad.- Contaminación del aire, del agua y del suelo. Cambios climáticos, como el incremento de la temperatura planetaria o efecto invernadero.- Pérdida de biodiversidad (diversidad de seres vivos) animal y vegetal.- Hacinamiento de la población en grandes ciudades. Problemas de marginalidad y de pobreza. Tanto el empleo de los recursos como la generación de impactos han ido aumentando.
Tradicionalmente el desarrollo económico se ha producido al margen de los sistemas naturales, lo que ha generado una serie de problemas conocidos como crisis ambiental.
Los problemas: El crecimiento exponencial de la población y la concentración en grandes ciudades con problemas de inseguridad, salud, pobreza, etc. Consumo de recursos por encima de la capacidad de renovación. Contaminación del aire. Aumento de la concentración de gases con efecto invernadero que producen el cambio climático. Destrucción de suelos, bosques, y pérdida de biodiversidad. Deterioro de recursos renovables como el agua o la pesca. Aumento de las diferencias entre países ricos y pobres. Agravamiento de los riesgos naturales.
Modelo en el que prima el desarrollo económico al margen de la preservación del medio natural. Se basa en promover un crecimiento económico (generación de recursos y bienes de consumo) sin tener en cuenta el deterioro del sistema natural. No cuantifica los costes ocultos o insumos.
Estos son los gastos ambientales, como el agotamiento de recursos, impactos o generación de residuos, que no se contabilizan en el precio de un producto, pero que provocan efectos nocivos en el ambiente, en la sociedad o en la salud. No permite mantener un crecimiento indefinido porque provoca el deterioro del sistema ecológico del que depende. Por ejemplo, agota los recursos. Las soluciones a los problemas del modelo se basan en confiar en los avances tecnológicos para encontrar nuevas fuentes de recursos.
Prima la conservación del medio natural sobre el desarrollo económico. Propone detener el desarrollo económico para evitar daños en el entorno, proteger el medioambiente mediante medidas restrictivas, evitar la superpoblación y el agotamiento de los recursos. Este modelo de desarrollo supuso un fuerte enfrentamiento entre los países ricos y los pobres. Los primeros ya habían alcanzado un fuerte desarrollo y empezaron a poner en duda su propio modelo de desarrollo de explotación incontrolada, mientras los países en vías de desarrollo necesitaban desarrollarse económicamente para erradicar la pobreza de su creciente población. Surgió en los años 70 con los informes del Club de Roma y la Conferencia de las Naciones Unidas por el Medio Ambiente de Estocolmo de 1972. Hoy día este modelo no convence prácticamente a nadie.
Busca el equilibrio entre el desarrollo económico y la conservación del medio natural. Se puede definir como la actividad que satisface las necesidades de la generación presente sin afectar la capacidad de las generaciones futuras de satisfacer sus necesidades. Plantea que la sostenibilidad se ha de lograr a tres niveles: económica, ecológica y social. Fue propuesto por Gro Harlem Bruntland en el año 1987. Posteriormente, se desarrolló en la Cumbre de Río de Janeiro en 1992 donde se concretó en el programa 21. Se decidió, además que los países desarrollados destinarán el 0,7 de su PIB al desarrollo de los países en vías de desarrollo. En la Conferencia Río + 10 de Johannesburgo se comprobó que la ayuda no llegaba a la mitad
La tasa de consumo de un recurso potencialmente renovable ha de ser igual o inferior a su tasa de renovación.
El consumo de recursos no renovables ha de ser igual o inferior a la tasa de creación de nuevos recursos renovables que puedan sustituirlos cuando se agoten.
La tasa de emisión de contaminantes ha de ser inferior a la capacidad de asimilación o reciclado natural de los mismos por el entorno.