El fragmento que se nos propone a comentar se trata de un
texto porque tiene sentido completo, cierre semántico además de ver en el que
se cumplen las tres propiedades, es decir, la adecuación, la coherencia y la cohesión.

 En primer lugar
nuestro texto es adecuado ya que en el a través del canal que es el papel, un
emisor que es Emilia Pardo Bazán utiliza un código lingüístico formal
(“ardillas, sombra, cabello…”) no sin dejar de utilizar un registro de tipo culto
(“lactando, ronchas, palmípedos…”) propio de la época que en nuestro caso es el
S.XXI. Por otra parte el discurso va dirigido a un amplio número de
destinatarios que somos cualquier lector que pueda leer esta obra literaria; la
finalidad de toda obra literaria como veremos posteriormente será la función
poética. El mensaje en nuestro texto, escrito en código verbal, es muy claro:
la descripción del barrio de la protagonista amparo.

Por lo que respecta a la coherencia textual, aquí nos viene dada
por la selección y organización del propio mensaje; para conseguirlo, las ideas
están completas y bien desarrolladas de forma clara y precisa para que los
lectores las puedan interpretar con normalidad. Por eso, a partir de un tema: (“la
juventud de un barrio”) se van desarrollando una serie de sucesos apartados
correctamente ordenados que están conectados entre sí en progresión temática
constante porque todo el texto gira en torno a la primera idea de cómo: (“las
actitudes de los niños, y de las mujeres en verano”).

En cuanto a la cohesión, o tercera propiedad textual,
podemos decir que está fuertemente cohesionado porque los principales
procedimientos que vemos son:

Recurrencia fónica : (“ Pescadores y pescantinas, patizambos
y palmípedos”), también observamos el uso de recurrencias sintácticas (“ Unos
daban indicios de no sonarse los mocos en toda su vida, y otros se rodeaban sin
reparo”), utilizaba recurrencias léxicas (“ellos, niños, sol…”), así mismo la
recurrencia semántica la vemos en el uso de sinónimos que en este caso no
encontramos, antónimos(“ bonitos y horribles”) y el campo asociativo del cuerpo
humano y los caracteres. También tenemos que ver la 3º
persona (“vivía el
barrio entero en la calle”) pronombres reflexivos, y adjetivos (“ grosera
cazuela, brazo blanco”). Por lo que se refiere a la deixis podemos ver que se
percibe deixis espacial (“los ahogados edificios, en la calle”) y diexis
temporal (“el tiempo estuviese apacible”) y deixis personal (“de ellos los
había, una mujer”)

Por ultimo por lo  que
se refiere a la cohesión, el autor utiliza los siguientes marcadores textuales
(“de la cual, como “)

 Se puede decir que el
fragmento que vamos a comentar se trata en su mayoría de un texto descriptivo
ya que en él se nos informa de las cualidades del barrio y de las personas que
viven en él y por su forma de discurso se trata de un texto literario, cuyas
características generales son:

La finalidad del texto es estática ya que crea belleza y
también pretende entretener al lector, las funciones predominantes son: la
poética, la expresiva y la representativa. Se trata de un fragmento subjetivo
por la utilización de la 1º persona verbal y pronominal, el léxico es
connotativo y el modo verbal subjuntivo. Se trata de una descripción
idializante o impresionista porque describe el barrio tal y como es pero desde
su punto de vista.

Según su dinamismo es: estática porque retrata realidades
fijas, sin cambio o movimiento (describe el barrio de amparo)

Según el objeto descrito es etopeya. Por tanto se trata de
un texto literario concretamente una novela.

Por lo que respecta a las características lingüísticas
veremos en el fragmento:

En primer lugar uso de sustantivos concretos (“cabello,
carmín, manzana”) y sustantivos abstractos de cualidad, a continuación nos
encontramos con adjetivos descriptivos especificativos (“carnes rollizas, una
saya vieja”) luego se aprecian complementos del nombre (“se abrían de par en
par, lactando a un niño”), aposiciones descriptivas especificativas, oraciones
de relativo y también adjetivos posesivos y demostrativos. Uso de verbos
atributivos (“el barrio de amparo era, el tiempo estuviese apacible”) para dar carácter
estático: preferencia por el uso verbal en presente y el imperfecto (“vivía el
barrio entero en la calle,  los había patizambos”).

En cuanto a la sintaxis, uso de periodos paratácticos:
yuxtapuestas o coordinada (unos daban indicios de no sonarse los mocos en toda
su vida, y otros se oreaban sin reparo”), alternando con periodos hipotácticos:
subordinadas.

Por último y por lo que respecta al comentario estilístico podemos
observar que el autor selecciona cuidadosamente el vocabulario (“un tribu,
carnes rollizas, lactando a un niño”) además de utilizar figuras retoricas del
tipo ( bonitos como querubines, respiraban trabajosamente los ahogado edificios”)
con todo esto se ve la función poética o estética, pues selecciona, valora,
embellece e interpreta la realidad descriptiva.

Para finalizar, el texto es una muestra de las ideas de Emilia
sobre el barrio de amparo. Pero sobre todo es un claro ejemplo de sencillez
descriptiva, claridad y precisión. Se trata de un lenguaje llano en el que se
nos ofrece una exactitud al describir las personas que viven en el pueblo dando
una sensación de pulcritud de estilo y de elegancia creadora.