Platón fue un filósofo ateniense, discípulo de Sócrates, que construyó el primer gran sistema filosófico expresado en un lenguaje repleto de imágenes.
En su ontología distingue dos mundos, el sensible (la caverna/1ª sección de la línea)
Formado por las imágenes y los objetos físicos y el inteligible (el exterior/ la otra sección)
Formado por los entes matemáticos y las ideas. El mundo sensible es material, mutable, múltiple y perecedero y el inteligible es inmaterial, inmutable, único y eterno. La relación entre ambos mundos es de imitación, de forma que el mundo de las cosas es una copia, y como tal siempre imperfecta, del mundo de las ideas.
A cada mundo le corresponde una forma de conocimiento.
El conocimiento del mundo sensible, posible sólo a través de los sentidos, se llama opinión y consta de dos formas, la conjetura o conocimiento de las sombras y la creencia o conocimiento de las cosas. El saber o ciencia representa el conocimiento del mundo inteligible y también presenta dos modos, el razonamiento discursivo que nos permite conocer los entes matemáticos y la inteligencia pura que a través de la dialéctica nos permite contemplar las ideas. Este proceso representa la educación platónica que lleva a los seres humanos desde la ignorancia hasta la contemplación del Bien.
En el mito de la caverna estos cuatro grados quedan reflejados en el estado de ignorancia de los cautivos que sólo ven sombras (conjetura); cuando se liberan descubren las cosas que pasan detrás del tabique (creencia); cuando salen al exterior la intensa luz les deslumbra y sólo pueden ver los reflejos en el agua y las sombras (matemáticas); finalmente cuando se acostumbran pueden contemplar directamente las cosas y finalmente el sol o idea de Bien (dialéctica).
En su antropología, Platón nos presenta al ser humano compuesto de cuerpo (caverna) y alma (prisionero). El cuerpo representa una cárcel para el alma cuyo lugar natural es el mundo de las ideas. Platón distingue tres partes en el alma, la concupiscible que representa los deseos y apetitos, la irascible vinculada a las pasiones nobles y la racional que es quien conoce y además es inmortal.
En su ética Platón propone tres virtudes vinculadas a las distintas partes del alma: la moderación, la fortaleza y la prudencia.
En su política plantea la necesidad de crear una sociedad ideal formada por tres grupos, los productores, los guardianes y los gobernantes-filósofos.
La justicia como virtud representaría el equilibrio entre las tres partes del alma y entre los tres grupos de la sociedad.
Platón, siguiendo el intelectualismo moral de Sócrates considera que el conocimiento de la idea de Bien es imprescindible para saber guiarnos en nuestra vida privada y en la sociedad ya que virtud y saber se identifican y, por tanto, sólo las personas que conocen el bien pueden actuar correctamente. Esta idea lleva a Platón a considerar como mejor forma de gobierno la aristocracia o gobierno de los filósofos ya que, los sabios serían los únicos capaces de dirigir a la sociedad correctamente.

Platón, uno de los filósofos más importantes de la historia, nace a finales del siglo V a.C. en Atenas en un momento de crisis de la polis y la democracia.
En la primera mitad el siglo V a.C. tiene lugar las guerras médicas que enfrentan a los griegos con los persas y en las que Grecia salió victoriosa. Poco después Atenas vive una época de desarrollo económico y cultural que consolidan su poder en la región originando enfrentamiento con otras polis que desencadenaron la guerra del Peloponeso.
En esta guerra se enfrentaron los griegos entre sí, Esparta y Atenas. Esparta victoriosa instaura en Atenas el régimen de los 30 tiranos que pronto fue sustituido nuevamente por la democracia ante las revueltas de los atenienses.

La democracia de

Atenas era directa y en ella los ciudadanos libres eran iguales ante la ley y tenían derecho a participar en la Asamblea (estaban excluidos los esclavos, las mujeres y los extranjeros). Sin embargo Platón rechaza este sistema político porque condenó a muerte a su maestro Sócrates y porque en ella el gobierno puede recaer sobre personas ignorantes al utilizar la práctica del sorteo. Esto hace que Platón proponga como gobierno ideal la aristocracia o gobierno de los mejores (filósofos).
No obstante, a pesar de todos los conflictos, Atenas vive su mayor esplendor cultural en esta época. Se construyen grandes edificios, en literatura destacan las tragedias de Sófocles y Eurípides y las comedias de Aristófanes; en escultura Fidias y Miron; en historia Herodoto y Tucídides; en medicina: Hipócrates y en Filosofía los Sofistas y Sócrates.
Respecto al contexto filosófico señalar que la filosofía nace en el siglo VI a.C. en Grecia como paso del mito (explicaciones fantásticas de la realidad) al Logos (explicaciones racionales). Los primeros filósofos, los presocráticos, se preguntaban por el arjé u origen de la naturaleza y, un siglo después, los sofistas y Sócrates se preocupaban por el ser humano y la sociedad.
La filosofía platónica es heredera de unos y otros. Recoge el movilismo de Heráclito, el materialismo de Demócrito y el relativismo de los sofistas como características del mundo sensible; el inmovilismo del ser de Parménides, la idea de inmortalidad y las matemáticas de Pitágoras y el conocimiento de lo universal de Sócrates como características del mundo de las Ideas.
Con la teoría de las ideas Platón supera el relativismo y escepticismo de los sofistas y el convencionalismo de las leyes que estos defendían. Como su maestro Sócrates, defiende el intelectualismo moral y político considerando que sólo aquel que conoce el Bien puede actuar correctamente.
Platón siguiendo la técnica socrática escribe diálogos en los que uno de los interlocutores suele ser su maestro. Su obra se divide en cuatro periodos, diálogos socráticos o de juventud, diálogos de transición, de madurez y críticos o de vejez.