Portada » Psicología y Sociología » Cliente oportunista caracteristicas
Las tipologías de clientes son un instrumento de ayuda que proporciona información al vendedor a la hora de materializar la venta.
Según Sheldon, por el aspecto corporal se distinguen tres tipos:
Asténico, apariencia débil, alto, delgado, nerviosa.
: Tímido, procura pasar inadvertido, se muestra atento y se siente orgulloso de ser diferente.
compra por seguridad, se interesa por temas que tratan sobre el futuro o la ciencia.
Atlético, bien proporcionado, huesos y músculos muy desarrollados.
Dominante, enérgico, agresivo, extrovertido, tiene seguridad en sí mismo y se siente superior.
compra por orgullo, busca lo importante. Está interesado por los negocios, política y deportes.
Formas redondeadas, grueso, afofado.
relajado, amable y con sentido del humor, le gusta el bienestar.
compra por comodidad y facilidad, se interesa por temas afectivos y familiares.
El aspecto físico nos puede dar la primera pista, será a lo largo de la conversación cuando iremos descubriendo cómo es nuestro interlocutor, le daremos un calificativo según sea su comportamiento o actitud durante la entrevista.
Existen tres grupos de individuos genéricos: dominante, amistoso o sumiso.
Expone sus deseos y necesidades, exige prueba documental de cada cosa que le dicen.
Se cree superior, aconseja, dirige. Su decisión se basa en un análisis de los hechos.
Narcisista y vanidoso, halla defectos en todo
Impulso y obstinado, se entusiasma o se enoja obstaculizando el diálogo. No rectificará ni ante las más claras evidencias.
Escuchar atentamente y respuestas rápidas, conclusiones sostenidas por pruebas.
Demostrar experiencia, profesionalidad, conocimientos técnicos del producto y las ventajas de la empresa para convencerle.
Permitir que desahogue sus emociones negativas, sin contradecirle
Mantener firme en la posición inicial y no ceder.
Darle la razón y reconducirlo a un diálogo constructivo y progresivo.
Expresivo, efusivo, alegre, agradable, atento y educado. A veces es demasiado amable, empalagoso, se desvía del tema.
Charlatán, habla a sus anchas sobre el tiempo, política, fútbol, temas ajenos a la venta.
Objetivo e inteligente, sabe lo que quiere, pide datos y no decide si no las ventajas.
Escucharle hasta que nos deje de hablar y reconducir el tema.
Esperar un silencio para hacerle preguntas y encauzarlo a la conversación.
Hay que darle lo que espera, asesorarle con eficacia.
Reservado, poco comunicativo.
Tímido, vergonzoso, no colabora.
Débil, cohibido, se amolda a las ideas de otras personas y da su aprobación.
Indeciso, tiene dudas y pide opinión. Se deja aconsejar por el vendedor.
Inestable, apresurado y sin autodominio. Cauto, receloso.
Actuar con suavidad para ganar su confianza.
Hay que hacerle preguntas abiertas o cerradas de respuesta afirmativa.
Mostrarnos amistosos, sociables, ayudarle, complacerle, no contradecirle, pero terminar pronto la venta.
Darle pocas opciones y con sinceridad, elegir por él.
Demostrarle que le comprendemos, debemos protegerle y no tratar de engañarle.
La mayoría de las veces los clientes actuarán siguiendo una de las tres conductas anteriores, pero también puede cambiar su actitud frente a repetidas frustraciones o puede adoptar una máscara en respuesta a presiones externas; adquiriendo entonces una personalidad secundaria.
Lo que más nos interesa son las razones de compra o sus intereses. Algunos rasgos de personalidad y cómo se relejan en la conducta del individuo:
El individuo está seguro de sí mismo, tiene las ideas claras y sabe lo que quiere.
La persona emotiva es afectiva, sensible y trata de agradar.
El individuo es indeciso, le cuesta actuar, desconfía pero sabe que necesita consejo del vendedor o de una persona allegada.
La persona es poco emotiva, fría y calculadora, va a lo suyo y desconfía de todos.
Nos podemos encontrar clientes que presente características de dos rasgos opuestos: seguridad o emotividad con seguridad u hostilidad, ante estas situaciones de este tipo la típica pregunta es:
Cliente seguro y poco emotivo, dejar que exponga sus necesidades y problemas, tratarlo con respeto y ayudarle con todo tipo de información
Cliente seguro y emotivo, tiene un conflicto entre lo que le interesa a él y sus deseos por agradarnos. Trataremos de convencerle de que lo nos gusta es poder resolver su problema, nunca engañarle.
Cliente hostil e indeciso, desconfía pero nos necesita. Debemos aportar datos para desmostrarle cómo nuestro producto le puede ayudar. Hay que tratarlo con cuidado y venderle sin prisas.
Emotivo e indeciso, el más problemático. Nos prometerá volver mañana o comprar con intención de devolver el producto.